The Exit: La Guerra De los Mundos

Capítulo 33 - Ella

Rosa, tras atravesar el portal de Vane, era lo único que distinguían sus ojos, hasta que este fondo fue decorándose con pequeños brillos que caían del cielo como la nieve. Tras llegar Vane, el portal se cerró, y dejó a los 9 en medio de aquella lluvia de diamantes.

Dulce: Vaya, cuánto rosa.

Evy: Demasiado para mi gusto.

Shiro: ¡Ala! (Ilusionada) ¡Está nevando! Oh... Pero esto no es nieve...

Rivielle: Uhm... ¿Seguro que esto es Hoolnima? Van...

Rivielle, dubitativa por el lugar, volteó en su intento de dirigirse a la maga que los había llevado hasta allí, mas al hacerlo, pudo observar la cara de los tres, donde la tristeza decoraba aquellos rostros. Los tres permanecían en silencio, al igual que Jessica, quien ya había parado de patalear sobre Rivielle al llegar, pero ese silencio se rompió en pedazos con una voz grave y firme.

Rush: Sí, lo es.

Rivielle: ...

Vane: Cuando vinimos la primera vez, ella ya nos lo explicó. La parte central de Hoolnima, el centro educativo, permanecía en el interior de una burbuja que protegía todo de su interior.

Evy: Oh, entonces tendría sentido que tu magia haya rebotado.

Dulce: "¿Rebotado?"

Evy: Sí, si les protege, es normal que no nos haya podido mandar a su interior, por lo que el portal se ha abierto fuera.
Rivielle: Si ese es el caso, no deberíamos de estar lejos de la burbuja.

Shiro: ¡Pues busquémosla!

???: (En la lejanía) ¡Guau, guau!

Jessica: (Levantando la cabeza) ¿S-Smash?

Dulce: A ver (Agachándose) ¿Qué le pasa el nen..? ¡...! N-no está.

Shiro: ¡¿Se ha quedado en Vulcanur?!

Jessica: No (Bajándose) Es él, no tengo ninguna duda.

Rivielle: Tal vez haya encontrado la entrada.

Evy: Pues sigamos su voz, por ahora es nuestra mejor opción.

Jessica: Os guiaré yo entonces ¡Smash! ¡¿Dónde estás?!

Smash: (En la lejanía) ¡Guau! ¡Guau!

Jessica: Vale, por allí (Señalando una dirección)

Guiados por el instinto de la druida, caminaron por el rosado lugar, aunque por más pasos que daban, no parecían avanzar o cambiar de lugar, quedando siempre ante sus ojos únicamente el rosa del lugar.

Dulce: No es por desconfiar, pero... ¿Seguro que estamos yendo a algún lado? El paisaje no cambia.

Jessica: Sí, cada vez le siento más cerca.

Shiro: ¡Sí, mirad, ahí está!

Shiro salió corriendo sin previo aviso, los demás fueron tras ella al darse cuenta, hasta que finalmente Shiro se paró y, al voltearse, sostenía al animal ante sus brazos.

Shiro: Sí que era Smash.

Jessica: Ya os lo dije.

Rivielle: (Extrañada) Te veo rara.

Vane: Yo también...

Shiro: (Extrañada) ¿A mí? Espera... Ahora que lo dices, yo a vosotros también, como más oscuros.