Apostando amor

Un recuerdo nada más

Emilio

Los años pasaron y con ellos, crecí mucho dentro de la música, termine la universidad, aprendí a tocar varios instrumentos, trabaje mucho por conseguir un contrato con una disquera y ahora estoy a días de iniciar un tour por toda Latinoamérica, a la gente le encanta mi música y eso me hace muy feliz, siempre quise que el público pudiera conectar conmigo, como alguna vez conecte con un pequeño chico de lindas pestañas.

Caminaba por las calles de la ciudad de México, preparándome ya que  en unos días saldría del país rumbo a Colombia donde iniciaría esta gran aventura, viajar siempre me pone nervioso, así que usualmente salgo a caminar por las calles de mi hermoso país, tratando de relajar mi mente, después de varias horas caminando sin rumbo, estaba por volver a mi casa cuando vi un cartel, se anunciaba la obra de "hoy no me puedo levantar", la imagen era una pareja abrazada, enfoque la vista en el lindo chico con chamarra de piel roja, cabello despeinado y corto, sonrisa encantadora y piel blanca adornada de lunares, abajo se leía "protagonistas: Joaquín Bondoni y Cynthia Aguirre" sonreí al ver que lo había logrado, en los medios constantemente hablan del chico con estrella que a sus 24 años ha logrado estar en grandes producciones de teatro, incluso se dice se está preparando para que al terminar con esta obra inicie en broadway con una producción que ya está en marcha, me siento muy orgulloso de él.

Suspire con nostalgia al imaginarnos juntos cumpliendo nuestros sueños, seguí con mi camino y sin darme cuenta llegue a una cafetería, al verla decidí que podría tomar algo antes de volver a casa, en cuanto abrí la puerta para entrar, alguien venía saliendo por lo que chocamos y su café terminó derramado por toda la entrada del lugar.

-Perdón- hable rápido, en cuanto levante la vista me quede paralizado, no podía creer lo que mis ojos veían frente a mi.

-Emi- era Joaco, se veía tan guapo que me perdí en él, ambos nos quedamos viéndonos sin decir nada hasta que alguien que venía detrás de él nos interrumpió.

-Joqui ¿todo bien peque?- era Tommy, nos miro y tomo del brazo a Joaquín, dirigió la vista a mi y frunció el ceño -¿Emilio?-

-El mismo, que onda- él levanto un poco la cabeza como modo de saludo y miro a Joaco quién solo dijo un "esta bien, luego te veo", Tommy se acerco depositando un beso en su mejilla y se alejo no sin antes decirle que cualquier cosa lo llamara.

-¿Cómo estas Emi?- pregunto haciéndome reaccionar, no estaba soñando, esta vez en verdad lo tengo frente a mi.

-B-bien gra....gracias, ¿tú?- no sé que me pasa, estoy tan impactado y nervioso, que mi voz suena rara y tartamudeo mucho, el río bajo y me di cuenta que extrañaba su sonrisa más de lo que pensaba.

Miro su vaso de café vacío y después me miro causando que mi corazón se acelere como hace mucho no lo hacía -creo que necesito otro,¿qué te parece si entramos?- me extendió la mano, no dude en tomarla y nos adentramos al lugar.

Después de que nos entregaran nuestras bebidas nos sentamos en una mesa cerca de la ventana, había poca gente por lo que podíamos platicar sin tanto ruido de fondo, solo nosotros, unas cuantas voces y la música que sonaba como ambientando el lugar.

Platicamos por horas como si el tiempo no hubiera pasado entre nosotros, nos pusimos al tanto de todo lo que hemos hecho desde que terminó la preparatoria, le platique un poco de todo, incluso de las personas con las que llegue a salir, no formalice con ninguna porque simplemente no funcionaban las cosas por alguna u otra razón, él me contó acerca del teatro, la escuela en la que aprendió mucho, todos los lugares que ha conocido gracias a su trabajo y note que solo se centro en hablarme de su trabajo, no menciono nada acerca de su vida personal o sobre su vida amorosa, así que temeroso de la respuesta tome el valor de preguntar aquello que me rondaba la cabeza desde que lo vi.