Olvidemos la guerra Santa, Parte 1. [Finalizada]

Capítulo 5.1: Él es mi hombre perfecto (Por Albafica).

Desde que nací siendo el hijo menor de Saga y Afrodita, siempre eh sido muy protegido por mis hermanos mayores. A todos los he amado demasiado, pero más a mi madre, que siempre cuidaba de mí, ella era una hermosa omega.

Toda mi niñez siempre admire su belleza. Es más, hasta me sentía a veces celoso, es por eso que decidí ser un omega aún más hermoso. Muchas veces varios familiares me decían que me parezco a ella y es bonito, pero no quiero ser ella. Murió cuando tenía 7 años, de un balazo dado por un asaltante, de hecho, yo iba con ella, al principio me afecto, pero después me resigne.

Durante varios años dejé crecer mi cabello, comencé a arreglarme a los 10 años y digamos que me gusta que me alaguen. Sin embargo, Shion uno de mis hermanos mayores siempre me opacaba con su dulzura y su belleza. Algo que comencé a odiar, además siempre lo seguían hombres alfas muy adinerados y guapos. Los celos comenzaron a invadirme, sé que era algo malo, pues era mi hermano, pero no quería que nadie me bajara de ese trono.

Hace poco él se había ido al otro lado del mundo, lo que me causo algo de felicidad. En casi toda mi vida no eh tenido un novio, debido a que no encontraba a alguien muy lindo o hermoso para mí. Hasta hace poco que recibimos la noticia que mi hermano tenía un novio, por la llegada de una carta y fotos. Ahí me di cuenta que el susodicho era muy lindo, pero lo era aún más el hijo. Me enamore del castaño menor y de sus hermosos ojos color marrón rojo, a los que asocie a mis jardines de rosas que tengo en casa.

Hicimos un viaje improvisado, sinceramente no sabía el porqué. Pero todo el viaje me mantuve impaciente, quería verlo, es más, no lo negaré, fantasee sexualmente con él. A mi edad, comencé a contener mi celo, obvio no a cualquiera me iba a entregar, pero con este joven, quiero saber que se siente coger.

Algo que me atrae es que es un alfa, obvio será un buen partido para mí. No me importa que vaya a ser mi sobrino, lo quiero para mí.

Cuando llegamos al lugar, se veía un pueblo muy... muy... muy poco atractivo. Luego viajamos en carreta, algo que me desespero aún más, así que para distraerme molestaba a Cid y a Manigoldo, ellos siempre me hacían reír, la verdad los quiero mucho.

Al llegar por fin, fuimos bajando conforme nuestro padre nos nombró. Al llamarme baje, quede impresionado con su mirada. Me coloque frente suyo, lo admire un rato y le di un beso en su mejilla.

Todos me miraron sorprendidos, pero me vale, valió la pena verlo sonrojado.

-mucho gusto joven Tenma, eres más atractivo en persona -dije coqueto-

-¡eh!... ¿Qué?, gracias -tartamudeó aquel chico-

Luego de eso, el padre nos pasó adentro de su casa y nos asignó un cuarto a cada quien. Después de dejar mis cosas comencé a acosar al castaño, obvio siendo un omega lo tenía que seducir a como diera lugar. Pero no accedió y se marchó de la casa.

Lo seguí, llego a un río, ahí admire su hermoso cuerpo cuando se quitó su playera y su pantalón. Aproveche el momento, me desnude y me introduje al agua. Fui y lo abracé, me confundió con alguien más.

-Alone, que haces aquí... -expresó coqueto el castaño-

Obvio no le respondí, quería abrazarlo, su piel era muy suave. Trato de voltearse, pero no lo deje, comencé a besarle su varonil y sexy espalda. Al principio lo disfruto, pero luego de un rato se zafo molesto.

-¡tú!, ¿Qué demonios haces aquí? -contestó molesto-

-tranquilo, solo vine a verte, eres muy lindo, además eres un alfa y eso me gusta -respondí coqueto-

El castaño suspiro y se fue a la orilla del rio, ahí se cambió lo más rápido que pudo, yo solo lo miré decepcionado.

-Tenma no te cases, debes de disfrutar tu juventud, además, ¿tanto quieres a ese tal Alone? -dije aun en el río-