Capítulo 10: Quiero ser siempre tuyo, mi querido Tenma.

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Al amanecer Tenma se levanta y observa a Asmita dormir un momento, luego se retira de esa habitación. Al llegar a la suya comienza a alistarse, quería ayudar a su abuelo y a su tío con la fiesta de Sasha.

Cuando bajo al comedor, se encontró a Albafica y a sus dos familiares desayunando.

-Buenos días Tenma -dijo el peli aguamarina-

-Querido sobrino, buenos días -habló el peliplateado menor-

-Hijo, buenos días, en seguida traen tu desayuno -expresó alegre el mayor-

-Buenos días, si abuelo gracias -respondió contento el castaño-

Al bajar el rubio de ojo azul observo a su Tenma sentado a un lado de aquel chico peli aguamarina, entre cerro los ojos y dijo con amargo:

-Buenos días

Aquellos cuatro hombres respondieron felices, cosa que fue como una puñalada en su ánimo. Al sentarse Sage mira con más detalle a su sobrino y ahí se da cuenta de su cosmos.

Cuando terminado el desayuno los tres hombres alfas se dirigieron al despacho a comenzar con los preparativos del fin de semana, obvio ya tenía unas cosas para la fiesta, pero faltaba asegurarse de cualquier detalle que faltara.

Albafica aprovecho para llamar a su padre, que por cierto casi le revienta el tímpano de lo preocupado que estaba, para informarle de la fiesta y obvio que él se encontraba en perfectas condiciones. Al cortar la llamada alguien le habló por la espalda:

-Joven Albafica, ¿podemos charlar un rato?

-¡seguro!, lo sigo -expresó tranquilo-

Pararon al estar fuera en los jardines, luego Asmita le pide que se siente en la banca y el peli aguamarina acepta.

-¿ocurre algo Asmita? -preguntó curioso el oji azul-

-sí, estoy algo preocupado por Tenma. Quisiera pedirte que regreses a tu casa, Tenma es de mi pertenecía y no voy a permitir que ni tú, ni nadie me lo quite, así que vuelvo a decirlo, aléjate de mí alfa

Al escucharlo se quedó atónito, sin embargo, este le sonrió maliciosamente y le contesto.

-¡oh! Perdona, nunca vi tu nombre en su piel. Y respecto a regresarme a mi hogar, obvio no lo haré, Tenma aún puede cambiar de parecer, así que ni te apuntes "Barbie"

-¡eh! ¿Barbie?, para tu información, Tenma me ha marcado y haré lo posible por que sea solo mío -recalcó mostrándole la marca-

-¡¿qué?!, ¿Cómo? -musito sorprendido-

-ese maldito día que llegaste me hizo suyo, así que alégate de aquí maldita flor estorbosa -dijo molesto al levantase de ahí- ¡vete de esta casa!

-¡Nunca!, el hecho que te marcara no significa que seas el dueño de su corazón, Tenma es libre de decidir con quien se queda, así que escúchame bien "pelos de elote", deja de acosar a mi castaño -ordenó al levantarse y verlo-

En ese momento hubo un rato de silencio, hasta que aquel rubio decidió bofetearlo.

-Te he dicho que te vayas -ordeno el rubio-

-¡Asmita!, Basta -gritó a lo lejos un anciano-

Al verlo los omegas, se dieron cuenta que eran esos dos hombres alfas mayores. Él mayor de los gemelos se acercó y jalo a Asmita.

-Vete a tu cuarto muchacho molesto

-¡no!

En lo que Hakurei jalaba al joven hacia adentro de la mansión, Sage se acercó al peli aguamarina.

Olvidemos la guerra Santa, Parte 1. [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora