Me siento agotado de fingir que no me molesta tu indiferencia...
Por eso hoy hago huelga de tu voz, de tu mirada, de tus palabras y del tiempo muerto que no quieres compartir conmigo.
Quiero el subsidio de tu atención.
Pero me hablaste...
Me hablaste con esa voz que me ablanda por dentro, olvidando mi protesta... Haciendo que la pancarta que sostenía mi alma se rompa contra el suelo.
Caí... Caí de nuevo en tus palabras, caí en la profundidad de tu mirada y volví a ser preso... De este sistema en el que mi corazón es el autónomo y tú eres el gobierno.
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Escritos para Alejandra
PoetryCuando el corazón se enamora el alma se vuelve poeta. Recopilación de escritos donde desnudo mi alma ante una mujer que me ha enseñado a mirar el amor de otra manera.