siete

3K 345 253
                                    

Dos semanas después.

La señora Hwang y el señor Kim discutían a los gritos, sin importarle la presencia de Soo Ah a un costado de ellos dos, cubriéndose los oídos mientras lloraba.
Kim balanceaba su una botella de vidrio que había de adorno sobre la mesita de entrada, rozándole la cabeza a Seulgi.
Kim estaba borracho. La botella se estrelló contra el suelo, los cristales volaron por todos lados, intentó manosear a la mujer, pero esta con una bofetada le acomodó las ideas dentro de su cabeza, haciéndolo entrar en razón.
Hyunjin llegó justo a tiempo para ayudar a su hermana. Dejó sus zapatos en la entrada y corrió a toda velocidad adentro de la casa, yendo a abrazar a la niña.

-Soo Ah. Mírame, haz lo que te enseñé. - dijo con la respiración agitada tomando las manos de la menor - Una mano aquí, la otra aquí, nos abrazamos, abrazo mariposa. - cantó una pequeña canción que había inventado para que su hermana recordara lo que tenía que hacer cuando tenía ataques - Respira hondo, tres veces.

Los mayores se callaron de inmediato, cuando escucharon los sollozos de la niña. Dongyul quiso acercarse a verificar, pero Hyunjin lo empujó con brusquedad, haciendo que este cayera al suelo, sobándose de dolor.

-Aléjate de mi hermana, ¡ALÉJATE DE MI FAMILIA! - comenzó a empujarlo por el suelo, sin dejarlo levantarse, sacándolo de la casa a patadas. - ¡Vete! ¡Maldito infeliz! - fue lo último que dijo, dejándolo afuera cerrando la puerta de un portazo con furia.

Soo Ah se aferraba como un koala asustada al cuerpo de su mamá, llorando desconsolada. El rubio buscó entre muchos juguetes el unicornio de peluche, hasta que lo encontró y se lo dió a su hermana para que se calmara, y así lo consiguió.

-¿Por qué sigues con ese hombre? ¿No puedes pensar en el daño que nos causas? O al menos piensa en Soo Ah. - inquirió Hyunjin con mirada fría.

Dió una ojeada a su madre por última vez, y subió las escaleras encerrándose en su cuarto, solo, a oscuras.
Ya no sabía más que hacer. Hoy reprobó dos exámenes, no entró al equipo de basketball, y ahora tendría que lidiar con el estúpido de su padrastro que no lo puede dejar vivir en paz.
Recibió una llamada en su teléfono. Felix llamaba con preocupación desde su casa, deseaba que su amigo contestara con rapidez, y eso hizo.

-Amigo, ¿Estás bien? Cuando te dejé en tu casa bajaste corriendo del auto, además se oían unos gritos. - habló Yongbok aferrándose al teléfono.

-No es nada, sólo una discusión familiar, lo común.

Hyunjin en verdad no quería preocupar a su amigo, ya tenía suficiente con su propia vida.
Hubo un silencio.

-Cuéntame sobre ti Felix, en la escuela dijiste que debías contarme algo y jamás lo hiciste.

Felix se rió con nerviosismo rascando su nuca ansioso. Ahora estaba dudando un poco de contarle a su amigo lo que sucedía.

-Pues... Digamos que, mebeséconelprofesorSeoenlasaladeprofesores. - dijo rápido cuál rapero.

Los ojos del mayor se abrieron como platos, sentándose correctamente en la cama. Estaba orgulloso y decepcionado al mismo tiempo. Orgulloso porque Felix consiguió lo que tanto deseaba, y decepcionado porque besó a un profesor que era siete años mayor que él y podrían expulsarlo del colegio.

-¡ESO CAMPEÓN! - gritó de repente.

-¿No estás enojado?

-Claro que no. Bueno quizás un poquito decepcionado pero no es nada, si volvemos al tema, ¡BESASTE AL PROFESOR CHANGBIN!

-¿Y qué hay de ti? ¿Pudiste hablar con el amor de tu vida Jeongin?

Hyunjin se estremeció.

𝐀𝐍𝐗𝐈𝐄𝐓𝐘 ✗ hhjn + ygjnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora