Los One-Shots BNHA

Mirio Togata

Emergencias I (edades alterada  Aqui cuando Mirio lucha tendrá 25 años y Eri seguira siendo una niña

Revisó que su uniforme estuviera completo, guardo la cadena de plata junto a la foto de su novio la misma que miraba con cariño y de la que se despedía cada que comenzaba su turno, justo como ahora.

El dia en el trabajo prometia ser tranquilo, reviso sus actividades para esa mañana y tendría que asistir al área de pediatría.

Algunas mujeres embarazadas esperando a tener esa pequeña alegria en sus brazos, otras cuantas llorando por los dolores causados, ¡Que hermosa es la vida! Claro eso penso hasta que una madre histérica la jalaba de su uniforme pidiendole que de alguna forma calmara el dolor de las contracciones que tenía.

Ese día habían nacido al rededor de 23 bebes solo en el transcurso de la mañana-tarde, y ella había asistido a 10 de esos nacimientos, era hermoso ver como un ser llegaba a esta vida.

A las cinco en punto de la tarde su turno ya había terminado, decidió dejarse puesto el uniforme y sólo volvió a su locker para ponerse la cadena de plata y sacar su bolso.

Bajó a firmar sus actividades del día cuando vio que llegaban varias ambulancias, al parecer era un gran grupo de heridos.

—Hey _____ necesitamos ayuda extra, ¿Puedes quedarte unas horas?— le preguntó su jefa poniéndose rápidamente unos guantes y cubre bocas.

—claro que si — ella imitó la acción y se acerco a la comilla que su jefa encabezaba con aquel herido.

—Hombre caucásico de 25 años, tibia y peroné izquierdos rotos, tiene perforado un riñón y el intestino delgado, se le administraron dos unidades de sangre—dijo mientras los médicos se acercaban a recibirlo.

—Prepara un quirófano, este hombre tiene que entrar ya.

—El 3 está disponible —dijo ella afirmando.

—Bien, encargate de darle aire y no dejes de hacerlo, revisa los signos vitales también.

Su jefa Lili era una gran jefa, sabía manejar a los enfermeros e instruirlos muy bien, ____ era la más ágil de ellos pues siempre que ella pudiera pedían su ayuda.

Pará cuando _____ se acercó a cambiar de posiciones con el otro enfermero sintió su estómago pesado, la habitación daba vueltas y ella se movía pero de cierta forma se encontraba ajena a la situación, sus ojos se pusieron vidriosos de inmediato y las lágrimas no dejaban de salir de ellos, pestañeaba muy rápido para que no obstruyecen su visión.

Ese hombre recién llegado al que le daba aire era el mismo del de la foto en su casillero, su prometido Mirio.

Estaba anonadada, aún no podía creer que aquel al que ella se empeñaba en dar aire para que no dejara de respirar fuese su prometido, Mirio.

Las lagrimas no pidieron permiso para salir de sus ojos a montones, y sus manos no dejaban de bombear la capsula.

—Mirio..... ¿Como rayos pasó?— susurro...

Su jefa la escucho y tomó una decisión necesaria.

—Vanessa, cubre a _____ su turno ya terminó, ella necesita descansar—la nombrada se acercó a ella.

—¡No! Yo puedo con esto, ¡Yo tengo que estar aquí!— había contestado demaciado exaltada, no había podido controlar su tono de voz.

—Vamos linda, estarás al tanto de todo.

______ no opudo resistencia y solamente se dejó guiar por otra de sus compañeras a la sala de espera.

Nadie más que su jefa Lili sabían que el héroe Lemillion era su prometido, ella prefería mantenerlo así para evitar preguntas innecesarias de sus compañeros sobre los héroes que posiblemente ella conocía.

Ya era más que suficiente con tener algo de prensa encima cuando se enteraron de que salía con el.

La operación había durado tres horas, a pesar de lo cansada que estaba, ella no pudo dormir después de verlo a él en esa camilla, ella sabía que él ser héroe era un trabajo duro y que no siempre podían salir ilesos, simplemente ella no quería pensar en qué ese día había llegado.

— La operación salió bien, está fuera de peligro pero tendrá que quedarse un par de semanas... puedes ir a verlo — Vanessa le dijo ya sin preocupacion.

_____ no espero a que le dijeran otra cosa y salió casi corriendo a la habitación donde lo habían trasladado. 

Mirio aún dormía, para cuando ella entró sus ojos ya estaban hechos un mar de lágrimas y Sir estaba con la cabeza tan agachada que ella podía ver las canas que se hacían presentes.

— Traté de que no fuera solo pero si no se adelantaba el.... Ella.......  —guardo silencio un momento —Pudimos rescatarla y esta con nosotros ahora— Sir se refería a la pequeña Eri.

— ¿Como esta? — su voz era baja pero sonaba casi normal.

— Tiene varios huesos ro...

— Ella, la niña ¿Como esta?

Sir levantó su mirada hasta que topo con la de ______mamá y cuando la vio ahí parada con la nariz roja y las lágrimas bajando sobre sus mejillas , el tampoco pudo aguantar y soltó las suyas.

El día que el conoció a la novia de su compañero Lemillion sabía que era la chica indicada para el, ella se preocupaba por los demás antes que por si misma.

—Ella esta bien, necesita descansar y recuperarse pero esta en observación para que su singularidad no dañe a alguien, si Mirio no hubiera ido por ella, Eri hubiera terminado en las manos de Overhaul y ellos seguirían experimentando con ella.

—Eso ya es una gran ventaja ¿A el que le paso? — se sento en la silla que estaba al lado de la cama y lo observo.

—Overhaul creo una droga con el poder de Eri y se la dispararon a Mirio, el perdio su singularidad.

la sala quedo en silencio _____ no sabia que decir.

Continuará...

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