One-shots [Detroit Become Human]

Mi dulce melocotón

[Markus x Reader(Male)]

No contiene lemon

Espero que te guste

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Una fría y helada mañana, las calles de Detroit llenas de gente acompañados de sus muy conocidas máquinas o más específico Androides, seres perfectos con total inteligencia y belleza.

Ya hace un tiempo que anhelabas poseer uno, para que te haga compañía en tu departamento pero, el dinero que ganas en tu trabajo como artista callejero no te da más que para pagar la renta y la comida, así que solo será un sueño.

Aún que, siendo sincero, al menos te alcanza para pagar la deuda que tienes en el banco por ir al club eden todos los viernes y hoy es viernes, así que decides esperar a que caiga el sol para ir a visitar al Androide que amas.

[...]

Al llegar la noche, caminas por las calles hasta llegar a tu destino, el Club eden, dónde puedes tener experiencias placenteras con los Androides más sexys de la ciudad, según es lo que te prometen.

Entras y como es de esperarse hay gente mirando los tubos donde bailan los Androides o solo observando el contenedor dónde los retienen, sin más, decides ignorar sus miradas para ir directamente a un Androide.

Un modelo Rk200, test morena, ojos verdes y un aspecto serio, las facciones de una persona dominante, el Androide el cual siempre rentas para pasar tiempo con el, te observa, claro, sabes que lo hace porque está programado solo para eso.

Tocas la pantalla, ajustas el tiempo, unas 3 horas serán suficientes, "Compra confirmada" habla la voz al confirmar, "El club eden le desea una experiencia placentera"

- Sigame por favor - indica el traci al tomar tu mano - Le enseñaré la habitación - explica

Sin más, lo sigues, ambos entran a una habitación, te sientas en la cama para después acostarte.

- Markus - lo llamas, claro, no te gusta dirigirte a el como Traci, por ello la habías puesto nombre

- ¿Si? - respondió Markus al sentarse a un lado tuyo

- ¿No quieres escapar? - preguntás

La verdad, es que nunca habías tenido sexo con el Androide, siempre ibas a rentarlo para que te hiciera compañía, te sentías solo desde que tus padres se habían divorciado, solo hablabas con el, compartiendo tus problemas o alegrías que te sucedían en la semana, y como Markus está programado para obedecer, solo te escuchaba atentamente, mientras hacía diferentes gestos.

Claro, la política del club es borrarle la memoria a los Androides para que los clientes queden en un modo incógnito, pero, por alguna razón, Markus siempre te recordaba, cada momento, cada detalle, todo de ti.

- Adelante - indico Markus - Solo quiero estar contigo - añadió

Markus, por su parte, estaba arto, su divergencia había parecido desde la primera vez que lo habías rentado, ya que el Androide no era usado para lo que lo habían hecho, simplemente, era tratado como si fuera una persona, solo quería estar contigo, ya no quería estar con ninguna mujer u hombre que no fueras tú.