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Durante los siguientes días todo iba muy bien, Verena era una excelente reina y era amada por todo su pueblo. Los tres cazademonios habían decidido quedarse junto a Verena por un tiempo hasta asegurarse de que su salud mental estuviera bien.

Sonic llegaba a sentirse muy molesto con Verena, no lo demostraba, pero quería que de alguna forma Verena reaccionara de una vez por todas, ya que la mayor parte del tiempo pareciera que no le importaba lo que estuviera alrededor de ella.

Era de noche, Shadow y Sonic estaban en su habitación, el moreno había salido de bañarse mientras que el menor estaba recostado en la cama muy pensativo.


– ¿En qué piensas? – Preguntó el moreno sentándose al otro lado de la cama.

– ¿No crees que deberíamos irnos ya? – Lo miró serio – Ya no hay peligro de nada y aún no podemos hacer nuestra vida.

– Parece que te molesta cuidar a Verena.

– En cierto punto si me molesta. – Confesó – Ya es la reina, todo un pueblo depende de ella ¡Y no puede ni siquiera cuidarse a sí misma! – Alzó la voz, el moreno se había molestado también por la actitud que su novio estaba tomando.

– Quiero irme lejos contigo y hacer nuestras vidas. Amarnos y coger. – Lo miró serio – Pero Verena necesita todavía de nuestra ayuda, está en una gran depresión y trata de controlarlo o tan siquiera de esconderlo. ¿Cómo carajos esperas a que se ponga? ¿Feliz? ¡Mataron a su familia! – Se frotó la cara con algo de fastidio, el azulado solo se quedaba callado – Si quieres irte hazlo, pero no puedo dejarla sola en este estado. ¿Crees que está siendo fácil para ella? No fue preparada para ser reina, tan solo aprendió un poco durante unos miserables días en los que se sentía sola y débil.

– Yo no sabía... – Dijo el azulado desviando su mirada.

– Sé que no has perdido a alguien importante para ti, tuviste la oportunidad de salvar a Amy cuando estuvo en peligro. Yo perdí a mi madre a los 8 años y tuve que arreglármelas para sobrevivir solo. Tan solo imagina toda la presión que Verena está teniendo, se demuestra fuerte ante todos y sonríe con gran falsedad, ¡Llora cada noche culpándose por la muerte de su familia! – Suspiró hondo controlándose – Solo quiere nuestra ayuda... Y se la daré. – Ambos erizos se miraron – Debo salir... Prometo volver pronto. – Se acercó al azulado para besarlo con gran pasión y en cuestión de segundos desapareció dejando al azulado solo en la habitación.


Al día siguiente, Sonic y Rouge estaban disfrutando de un delicioso vino, ambos se estaban dando un pequeño descanso, Verena estaba junto con Jet haciendo sus labores como reina.


– ¿Qué es lo que piensas hacer esta vez, Rouge? – Preguntó mirando a su amiga.

– No lo sé, tal vez me vaya a vivir a otro lugar. – Sonrió – He querido volver a viajar por el mundo y gozar de una vida normal como la de los mortales.

– También yo y creo que los demonios ya no podrán entrar a este mundo nunca más.

– Por cierto, ¿Dónde está Shadow? – Arqueó una ceja con curiosidad.

– No lo sé, solo me dijo que saldría a dar un pequeño paseo. – Levantó un poco los hombros.


Sonic no dijo nada, se había quedado quieto sintiendo nuevamente una extraña sensación dentro de él, algo que había estado sintiendo desde hace días, sin embargo, no había querido comentar acerca de ello.

Parabellum ~(1° Temporada) ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora