En la una habitación, una chica miraba la pantalla de un portátil mientras sus dedos tecleaban el teclado, era el único sonido combinado con el crujido de mordidas. Un shinigami disfrutaba de una manzana mientras estaba tendido en el suelo.
-No ah ávido movimientos.
-¿Eh? , ¿a qué te refieres?
-Las cosas han estado muy calmadas últimamente – deja de el teclado para recostarse y inclinarse en la silla –No más bombas, no más estorbos, y los pocos criminales están desapareciendo – suspiro.
-¿Estas aburrida de tu vida justiciera? –pregunto el dios mientras recordaba una palabras que le dijo a su padre.
-Eso es tonto – soltó una suave risa – Mientras exista un fragmento de maldad el trabajo de Kira no terminara.
-Sí, eso ya lo sé, pero no dice lo que sientes tú.
-Si estuviera aburrida ya te hubiera devuelto el cuaderno o si no hubiera estado interesada lo habría rechazado o quemado.
“Directa como siempre” pensó Ryuk con una sonrisa.
-¿O es que ya te aburriste y piensas matarme?
-¿Qué?, no – se apresuró a decir – Es divertido ver el comportamiento de los humanos, hasta donde pueden llegar, lo que el deseo, la avaricia, o ese sentimiento llamado amor que sienten los llevan hacer o como hasta algo inofensivo puede destruirlos.
-Que filosofo – contesto sin interés aunque en su mente se repita que los dioses de la muerte no sienten, en especial, alguien como Ryuk.
Al terminar de hacer el papeleo de documentos eh informes que se le habían acumulado, salió de su oficina para ir a la cocina y comer algo, al bajar la escalera vio como llegaba su familia.
-¡Mamá! – chillo la pequeña al correr hacia la castaña – ¡Adivina!, bueno te cuento, salve a un niño que lo estaban molestando.
-Es muy bueno – sonrío contenta por el logro de su hija.
-Y me llevaron a la dirección y ahora estoy castigada.
-¿Qué?, ¿enserio? – miro a su esposo y este sudo nervioso.
-Él, ¿castigarte? – se carcajeó Ryuk.
Después de burlarse un poco del pelinegro, la familia se reunió a hacer la comida, ya que no tenían servicio por pedido de Akira, el aroma podría atraer la atención de muchos. Ichiro había desarrollado un talento en la cocina. A la hora de comer, todos estaban sentados disfrutando de camarones con arroz, el ambiente era cálido como todas las veces y para la princesa era agradable pasar siempre un tiempo con sus dos personas favoritas.
-Mamá un día de estos puedo invitar a un amigo.
-¿Tienes un amigo?
-Sí – asintió al darle un mordisco al camarón en su tenedor.
-Es raro que tengas amigos hombres – menciono con ciertos celos.
-Hay papá – lo reprocho la pequeña – Seria la primera vez.
-Me niego.
-Pensé que te agradaba Shiro.
-Todavía no pasa la prueba de admisión – mira a la cabeza de la familia - ¿estás de acuerdo?
No tuvo que pensarlo dos veces para asentir con una pequeña sonrisa.
-¡Sí! – grito feliz Hikari.
La tarde empezó, el calor aumento ligeramente pero gracias al aire acondicionado la mansión permanecía tibia, en una habitación de color verde agua y color rosa, con juguetes en el suelo y un fuerte de almohadas cerca de la ventana por donde entraba los rayos del sol. En la cama descansaba plácidamente una pequeña de cabello azabache, leves ronquidos salían de su boca, mientras abrazaba a uno de sus favoritos peluches.
Desde la puerta la observaba una castaña, le sorprendida lo rápido que caía dormida su hija, y con cuidado retrocedió sin cerrar la puerta. Camino por los pasillos hasta que lo vio, vestía sus ropas negras, se acercó curiosa.
-¿Qué sucedió?
-Nada.
Akira levanto una de las cejas, ¿en verdad creía que le iba a tragar eso?, con su fuerte mirada lo interrogo hasta que Ichiro suspiro aceptando su derrota.
-¿Sabes que le dijiste a Hikari que podía traer a su nuevo amigo?
-No dije que sería aquí.
-Chica astuta – una sonrisa bailo en sus ojos.
-Sabes que si – admite con arrogancia pero lo señala - ¿Vas a salir?
Ichiro asintió y se apoyó en la pared más cercana, después de ver al sujeto que se había llevado a Shiro sentía que algo estaba mal, aunque desconocía la razón. Akira noto el cambio de actitud de su esposo.
-Bueno si vas a salir, necesito que vayas a cazar, le pediré a Yoto que se encargue de las cámaras.
-¿Quieres diversión?
-Debo hacer unos experimentos.
-¿Por qué? – pregunto curioso, a veces le gustaría poder leer los pensamientos de la castaña.
-No lo comente porque creí que no importaba pero va a ver un cargamento especial para el cuartel policiaco de Kanto y tuve un adelanto de que en una semana se realizara – desvía la mirada mientras masajea su mentón –El contenido lo desconozco, lo poco que se, es que es para mí.
-Espera, ¿qué?, la policía como todo el mundo está ante tus pies.
-No todos – niega con la cabeza – Y la persona que solicito esto no fue alguien del cuartel.
-¿Cómo es eso?
-No sé, alguien los hakeo o quien sabe, lo único que sé que ese cargamento es sospechoso.
Ichiro asintió, era normal que Akira sospechara de todo, siempre había estado a la defensiva y cuando algo entraba en su cabeza era imposible de sacársela. Era una cualidad por la que la amaba.
-¿Quieres que investigue?
-No, por ahora, hay que concentrarnos en acabar con la basura de este mundo.
-A sus órdenes mi princesa – sonríe e inclina la cabeza en respeto.
El mundo estaba podrido hasta que Kira llego y después de tantos años, había vuelto para volver su sueño realidad, aunque aún hubiera oscuridad. La luz brillaba, para Ichiro estaba claro, el seguirá el camino que su amada caminaría. Porque con ella, vería el renacer de un nuevo mundo, el mundo en el que tenía a las personas que ama.
Continuará....
¿Qué pasa por tu cabecita Akira?
Eres un enigma (^^)Recordar que todo capítulo posee un dato que une las piezas del rompecabezas.
Disfruta y
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La Flor de la Maldad© [Kira 2]✔️
FanfictionAkira cumplió con el sueño de su padre y creo un nuevo mundo donde la paz reina. Pero esa paz se verá interrumpida, enfrentándose a un nuevo enemigo. La Princesa deberá volver a poner orden. ¿Lo lograra? Esta prohibida la copia o adaptación de esta...