Natsuo esperaba en el auto, recogió a Shouto, quien había sellado la entrada con hielo, gran ventaja además de ir rápidamente en el automóvil de su hermano, aunque ahora tendrían ambos la cita.
Lucy estaba eligiendo que desayunaron cuando de pronto tocaron a su puerta, un albino y un mitad mitad, le sonrieron.
—¿Vendrias con nosotros? Pasábamos por aquí y quisimos invitarte a desayunar.
—Amm ¿de acuerdo? — estaba sumamente confusa, pues ellos parecían algo nerviosos.
La tomaron cada uno de una mano y la llevaron con ellos. El lugar a donde irían era nada más y nada menos que una hogareña fonda. Todo era sencillo y ella sonrió, pues no venía preparada para algo como en la cita de Endeavor, traía un lindo pijama que constaba de un short azul marino y una blusa blanca, iba toda despeinada, por otro lado, ellos venían tan casuales que parecía habían ido de compras al mercado.
Un par de hotcakes, jugo de naranja y una pequeña ensalada de frutas, un ameno desayuno tan familiar. En todo momento hubo sonrisas por parte de los chicos.
—Me encanta tu cabello. — mencionó el mayor.
Un leve sonrojo apareció en las mejillas de Lucy, pues recordó como venía "arreglada".—Gracias. — le sonrió mostrando sus dientes.
Sus mejillas fueron tomadas por el bicolor, quien no demoró en besar su frente.
—Gracias a ti por aceptar salir con nosotros, espero que vuelva a ocurrir, aunque quisiera tener la oportunidad de ser solo los dos. — le susurró lo último.
La llevaron hasta su casa y se despidieron de forma cortés, antes de entrar a su casa, Natsuo la tomó del brazo y le entregó una nota.
"Eres la diosa que incluso perezosa te ves jodidamente hermosa"
N&S Todoroki.