Cicatrices del Alma (Terminado)

Infancia

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***Sakura***

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Estaba muy emocionada por el viaje. Después de dos meses de tortura por fin iba a tener un fin de semana solo para mi y Shaoran. No era porque me molestara estar con los demás, solo que, desde que Shaoran y yo habíamos comenzado esta relación, no habíamos tenido mucho tiempo para ser una pareja realmente. Bueno, eso no era del todo cierto. Cada momento, por más pequeño que fuera, aprovechábamos para preocuparnos por nosotros. Aun así lo que yo deseaba era poder estar con él con ciertas libertades que no me puedo permitir ahora por estar en la casa de Eriol.

-¿No estas demasiado emocionada Sakura?- me decía Meiling cuando por fin había terminado de hablar acerca del viaje. Tomoyo como siempre solo estaba escuchándome y con una sonrisa en la cara.

-Es inevitable Meiling, la actitud de Sakura ha mejorado mucho en las ultimas semanas- Tomoyo se había acomodado a lado mío para ayudarme con las cosas que estaba metiendo a la maleta.

-Claro, teniendo a Shaoran como pareja, cualquiera mejoraría su actitud- sabia que ella había dicho eso para hacerme enojar, pero no tenia ganas de arruinar mi buen animo con sus bromas.

-Nunca había estado mas de acuerdo contigo, Shaoran es especial- tomé una de las maletas y me fui al cuarto para guardar mi ropa. Aun así alcance a escuchar sus reclamos

-Te juro que en cuanto pueda patearla, lo haré

-Tranquila Meiling. Sakura no quiso hacerte enojar- la voz tranquilizadora de Tomoyo surtía efecto en Meiling y pudo tranquilizarse. Cuando entre al cuarto Shaoran aun continuaba trabajando. Termine de hacer mis maletas y mientras esperaba que Shaoran terminara con su trabajo me quede profundamente dormida. Me desperté cuando sentí que Shaoran me cargaba para acomodarme en la cama.

-Lo siento, no quería despertarte- se había acomodado a lado mío y sus brazos me estaban abrazando. Sentía su aliento en mi cuello.

-Otra vez trabajaste hasta tarde- mantenía mis ojos cerrados, disfrutando de su aroma y su calidez que una vez mas inundaba mi cuerpo entero.

-La verdad no, tu eres la que se quedo dormida muy temprano- me voltee para quedar frente a frente con él. Mis ojos veían sus labios y sentía una necesidad enorme de él- aun estas dormida Sakura- mis labios se acercaban peligrosamente a los suyos

-No del todo- cuando nuestros labios se encontraron, Shaoran iba con una lentitud casi dolorosa. Yo lo tome del cuello e hice que el beso se intensificara más. Pasando mi lengua por su boca, hasta encontrar la suya. La temperatura iba subiendo cada vez mas

-Vuelve a dormir, debes de estar cansada- Shaoran seguía besándome, pero marcando una lentitud casi dolorosa.

-Hazme dormir- me acomode encima de él. Segundos después Shaoran se encontraba besando y tocando cada parte de mi cuerpo. Sabía que había ganado, Shaoran no se detendría hasta terminar con su cometido y yo me encontraba dichosa de que así fuera. Ya se había hecho casi una costumbre que de vez en cuando me despertara en la madrugada para hacer el amor con Shaoran, creo que mi cuerpo de alguna manera sabia que solo por la noche era cuando Shaoran se podía encargar de mí. Y esta noche no fue la excepción. No paramos hasta que los dos nos encontrábamos satisfechos, sudados y con la respiración agitada.

-Ahora descansa princesa- me dio un beso tierno en los labios- Te amo- me acurruque a su lado, casi haciéndome una bolita

-Te amo- así me dormí tranquilamente disfrutando de la calidez y felicidad que la vida me estaba dando.