OTRA VEZ

~1

1. No como carne de cerdo

Salí de mi puesto,  cogi mi bolso e intenté salir del trabajo. ¿Soy la única que sabe leer el cartel de cerrado? Conseguí salir de ese enjambre y cogi la bicicleta camino a mi casa. Algún que otro gilipollas me silbaba y/o piropeaba. Cuandi llegué a casa, dejo el bolso en  el sofá y me meto en el baño. Me quito unos vaqueros cortos que me dio una compañera y una camiseta de tirantes negra. Parezco sacada del videoclip Timber. Y yo no bailo twerking. Estúpido trabajo. Me pongo una camiseta grande del color de mis ojos, me lavo los dientes y la cara.

Despliego el sofá y me acuesto.

La alarma del móvil empieza a sonar, con los ojos aún cerrados. Desbloqueo el teléfono. 8 de Junio, 7am. Nombre de la alarma: duchate bitch, hay que trabajar.

Una persona normal, mayor de 18 y que no va a la Universidad no se despierta a las siete de la mañana.  Pero necesito el dinero, soy canguro de unos niños ricos. La verdad fue un golpe de suerte

*Flashback*
Estaba en mi turno de noche otra vez, serían las 10 y termino a las 3.
De repente un hombre entro con dos niños gritones exactamente iguales
-Si me da la gana voy a beber mi cerveza.- dice el hombre
-Quiedo id a casa quiedo mimi.- dice  uno de los pequeños
-Me hago pipí. -grito el otro
Al final el mayor se emborracho llamé a un numéro agregado en su móvil como 'AAALaQueMeParió'. La madre vino, me agradeció y me  hizo una especie de test. Sin que me diese cuenta, luego me pidió mi móvil y desde entonces estoy contratada'

*Fin del Flashback*Los pequeños son unos gemelos de ojos avellana y pelo castaño, son adorables, graciosos, inocentes, ingenuos, y a veces, un poco traviesos. 9 años.Se llaman Juan y Javier. No sé como los diferencio, pero lo hago.

El mayor es un verdadero gilipollas. Fue fruto del primer matrimonio de mi jefa. Fue un matrimonio adolescente y un niño olvidado y apartado. Es un mal educado, irrespetuoso, mujeriego y estúpido. Pero me ayuda a enseñar a los niños y a veces cocina algo. Lo peor es cuando se trae alguna zorra o amigote. Ah. y se llama Jose.

Fui al baño. me duché. Envolví mi cuerpo en una toalla y mi pelo en otra. Salí del baño y cogí del armario un vestido azul mariono con un minicinturón marrón. Que me regaló la jefa por mi cumpleaños, pero como no es cociente de que voy en bicicleta. Así que cojo unos shorts de deporte para ponermelos debajo. Me quito la toalla y me pongo la ropa interior. Me quito la otra toalla y me pongo el vestido y los pantalones. Me pongo unos calcetines cortos  y encima unas vans. Pero como mi jefa quiere que sea femenina, pongo unos tacones en mi mochila y una camiseta grande negra. Mi estómago está rugiendo de hambre, quiero decir de aburrimiento.

-No, no puedo comer.- digo. Pero tengo hambre.- pienso. Cojo una mandarina y empiezo a pelarla hasta que me la como. Los sentimientos de culpa empiezan a invadirme. Voy al baño y me miro al espejo. Respiro hondo. Me doy la vuelta y pongo dos dedos en mi boca. Los apróximo a mi campanilla. Apoyo una mano en la pared. Algunos sonidos extraños salen, no sé si de angustia o que me ahogo. Me voy agachando incoscientemente. Sólo expulso líquido, mezclado con saliba. No consigo expulsar lo que quiero. Vuelvo a probar y sólo consigo eructar un poco. Creo que va a ocurrir cuando retiro los dedos. Nada. Limpie mis dedos y un poco mi boca, me lavé los dientes y seque alguna lágrima.

Saqué la cadena de la mochila y aparqué la bicicleta. Me puse los tacones y guarde las vans en la mochila. Empecé a caminar hasta que llegué al portal de la casa. Toqué.

-¿Si?- pregunta una voz

-Soy Bárbara.-respondo

-Jose ¿hay alguna Bárbara qué esperas?- pregunta el chico. No se escucha nada más, pero abre la puerta. Subo por las escaleras, hasta el ático. Ya, tengo ganas para lo que quiero. Cuando llegué al piso, respiré un poco, sacudí mis manos y acomodé mi pelo. Ya estoy lista. Llamo al timbre y enseguida me abre mi jefa. Me da un repaso y empieza a taconear emocionada haciendo que todas sus joyas empiecen a saltar.