Sesenta

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No había hablado con Fred desde la última vez que lo vio. Y justo ese día debía ir a clase de lenguaje.

¿Fred iría?

La última vez que no fue no tuvo a nadie con quien practicar y tuvo que hacerlo con el profesor.

Soy un idiota, pensaba.

Cuándo dejó de mirar la ventana soltó un brinco asustado, Fred estaba a un lado de él e intentaba tocarle el hombro.

— ¡Lo siento! — dijo Freddy.

Fred bajo el dedo anular y el de en medio dejando los demás arriba, los sacudió; Hola, significaba.
Luego con ambas manos escondió los pulgares y las golpeó ante sí para finalmente bajarlas como sí tomara un objeto muy pesado; ¿Cómo estás?, era el significado de ambos movimientos.

— Estoy bien...

— Me alegro.

Fred comenzó a hablarle de un sueño extraño dónde cortaba su cabello y lo tenía de rosa. El castaño rió un poco por el comentario.

Quizá Fred no recuerda lo que pasó, o tal vez intenta evitar lo para que podamos ser amigos. Pensaba Freddy.

En tal caso sólo había que seguirle la corriente, volver a ser amigos como sí nada hubiera  pasado.

Era la mejor opción, después de todo él quería estar cerca de Fred fuese como fuese.

Porque, ¿quién podría querer a un chico sordo?

(perdón sí las explicaciones de las señas de manos no son muy claras, no sé cómo explicarlas:( )

Sordera (Freddedy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora