༄︎ ¿Y si Hinata hubiera logrado confesarle sus sentimientos a Naruto antes, cuando aún eran genin? Las cosas serían muy distintas pero... ¿Para bien o para mal?
◤ 𝐇𝐈𝐒𝐓𝐎𝐑𝐈𝐀 𝐎𝐑𝐈𝐆𝐈𝐍𝐀𝐋 ◢
✧ Prohibida su adaptación sin permiso previo.
✧ Ab...
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Hinata Hyūga siempre fue una chica demasiado tímida y conservada, obedecía en todo lo que le pedían y se ponía nerviosa con facilidad.
No fue de extrañar que se pusiera nerviosa y tímida cuando un niño rubio de su edad le preguntó porqué estaba llorando aquella vez que casi fue secuestrada y la llevó a su casa.
Aunque después su familia le prohibiera verlo por razones que ella desconocía, su corazón le pedía ir con él y jugar, al igual que le dolía en el alma cuando lo veía solito y siendo tratado de la peor forma.
Pasaron los años Hinata quedó en el salón de Naruto, feliz de poder ver al niño rubio otra vez, quiso hablarle, pero su timidez se lo impidió además de su nerviosismo acerca de lo que podría decir y de cómo podría reaccionar el rubio.
Y así pasó el tiempo, hasta que ambos se volvieron genin y quedaron en distintos equipos, Hinata comenzaba a darse por vencida con Naruto y a aceptar la idea de un amor no correspondido.
Estaba en una banca, mirando el cielo, simplemente perdida mirando las nubes.
—¡Hinata!— escuchó el llamado de Kiba junto a un ladrido del pequeño Akamaru cerca suyo por lo que volteó a verles con una sonrisa.
—¡K-Kiba-kun! ¿Qué pasa?— preguntó acercándose a ellos para acariciar al pequeño perrito que ahora estaba en sus brazos feliz.
—Quería venir a avisarte algo que creo quieres saber.— dijo con una sonrisa. —Naruto fue dado de alta del hospital— la ojiperla volteó a verle con sorpresa y felicidad, para luego bajar la vista y sonreír.
—Eso... Es muy bueno— murmuró y Kiba suspiró para luego sentarse en la banca y palmear el asiento a su lado, Hinata le miró extrañada pero se sentó.
—Hinata, ¿Hasta cuándo dejarás esa timidez tuya con Naruto?— suspiró Kiba frustrado por lo tímida que era su mejor amiga. —Ya la superaste con Kurenai-sensei, Shino y conmigo, ¿Qué tiene de distinto Naruto?— Kiba solamente quería que su amiga fuera un poco más valiente para hablar con el rubio cabeza hueca y decirle cómo se sentía.
—Es que... Naruto me gusta, ustedes son mis amigos y pasé mucho tiempo con ustedes, supongo que esa es la diferencia— murmuró acariciando a Akamaru. —Además, es un amor que seguramente nunca será correspondido, tal vez debería rendi-
—¡Oe Hinata! / ¡Guaf!— tanto Kiba como Akamaru interrumpieron a Hinata ante su desacuerdo con la actitud. —Tienes que superar eso, aunque sea por sólo unos segundos para decirle lo que sientes y después ya huyes, te sonrojas, desmayas o lo que quieras pero sólo unos segundos para decirle lo que sientes. ¡Ahora o después será muy tarde!— le animó el inuzuka, dejando a la chica confundida.
—¿Muy... Tarde?
—Espías a Naruto pero no sabes esto, es el colmo— bufó. —Naruto se irá a entrenar con Jiraiya-sama apenas se recupere totalmente, si no se lo dices ahora tendrás que esperar otros dos años para hacerlo.
