𝓣𝓾 𝓶𝓮𝓷𝓽𝓲𝓻𝓪 𝓮𝓷 𝓪𝓫𝓻𝓲𝓵 | ʏօօռʍɨռ

~ El susurro de las sombras ~

~ Capítulo 7 ~

Todo estaba oscuro y el silencio era ensordecedor, el ambiente era frío y lo único que se lograba observar bajo una gran luz era un columpio y ahí meciéndose levemente provocando un rechinido agudo, se encontraba Yoongi con la mirada gacha y las manos entrelazadas entre sus piernas abiertas, con la misma expresión neutra de siempre.

- Hola.- La voz perturbó el horrible silencio, haciendo eco en todo el área y causando que el pelinegro se detuviera y subiera la mirada, buscando con la vista a la persona, dueña de aquella voz.

- ¿Como va todo?- Prosiguió. Min seguía buscando al culpable de perturbar su silencio, pero solo pudo divisar, en la profunda oscuridad, unos ojos redondos, de un color verde eléctrico, muy brillante, colocados en un rostro de pelaje negro, acompañados de una humedad naricita rosada. Sus pupilas alargadas se mantenían atentas a él.

- Dentro de poco es la competición.- Le dijo cuidadosamente. El pelinegro bajo la mirada de manera lenta, ocultando sus pequeños ojos con su flequillo.

- No le tengas miedo. No deberías preocuparte.- Yoongi subió solo un poco la vista y pudo divisar, ahora, las peludas orejas del ser que le hablaba.

- ¿Qué más da si te humillan y se ríen de ti? De todos modos no van a abandonarte.- Sus manos entrelazadas se apretaron, ¿por qué le decía todo eso? ¿Cómo que qué más daba que le humillaran? ¿A qué se refería con que ni iban a abandonarlo?

- No eres Beethoven. Claro que tampoco eres Chopin.- La dureza y la frialdad en sus ojos gatunos eran casi palpables, pero, era la verdad, él no era ninguna de esas honorables personas. No, no lo era.

- Lo sé.- Dijo en un susurro grave, sin mirar a la criatura, sus labios eran una fina línea en su inexpresivo rostro.

- ¿Oh?.- La criatura se sorprendió por su cruda afirmación. - Entonces...- Pronunció, caminando con gracia y a paso lento hacia la luz, saliendo de la oscuridad, dejando ver su cuerpo pequeño y peludo. Su cola se movía con elegancia de un lado al otro, sus pequeñas patas se enterraban en el suelo y sus bigotes se mecían, prestando atención al chico sentado en el columpio, frente a él.

- ¿Quién eres?.- Sus ojos se abrieron demasiado y solo así, miró al felino a los ojos.

¿Quien era él?

- ¿Dónde estás?.- El chico no respondió.

- ¿Y bien? ¿Estás listo para que comience tu viaje?.- El hocico del animal se abrió en grande, sus colmillos y su lengua rosada se apreciaban. Posteriormente su voz se fue desvaneciendo en el mato oscuro.

~ 🐱 ~

El balón giraba con velocidad sobre el pasto verde y de un solo movimiento con su pie, Jungkook lo elevó al aire para pasar a los jugadores del equipo contrario, quienes peleaban por arrebatarle el balón al capitán.

Yoongi hizo un pequeño sonido de exclamación, cuando vio la increíble jugada de su amigo castaño, miraba concentrado el juego de fútbol,hasta que gritos agudos ensordecedores se escucharon a su lado, eran las chiquillas que babeaban por Jungkook, apoyándolo con carteles y bandanas con su nombre en grande, pero ellas también fueron interrumpidas con los gruñidos intensos de Taehyung y Jimin.

- ¡Ya lo tienes, Jungkook!.- Gritaron ambos chicos al unísono, con los ceños fruncidos y los puños al aire, mientras, Seokjin los miraba con una expresión neutra.

Jungkook corría con gran velocidad por el campo, pateando la pelota hacia el frente, los jugadores del equipo contrario lo rodeaban buscando algún punto débil por el cual atacar, sin conseguirlo realmente.