SIN ESENCIA || TYSH

11. Ramio

– Ey, despierta –Josh se froto contra la almohada sin abrir los ojos. Sentía el cuerpo ligero, muy ligero y solo quería volver a dormir–. Despierta, se te va a hacer tarde –frunció el ceño y tironeo de la sábana para cubrirse más.

– Un rato más –soltó en un ligero gruñido. Entre abrió los ojos y se encontró con la mirada de Tyler.

– No. Levántate ya –el alfa jalo la sabana para descobijarlo haciendo que Josh soltara otro gruñido mientras se colocaba boca arriba.

– Quiero dormir más –cerro los ojos de nuevo pero Tyler sacudió su hombro.

– Ya, arriba.          

– Voy –se sentó en la cama y despertó de inmediato en cuanto sintió la humedad de su interior deslizándose lentamente hacia afuera.

Se abrocho la camisa y se aseguró de que esta cubriera la parte baja de su cuerpo antes de correr al baño. Una vez adentro se llevó las manos al rostro recordando lo que había pasado la noche anterior, todas las imágenes que le llegaron a la mente le hicieron sentirse avergonzado, así que se apresuró a abrir las llaves de la regadera.

No podía recordar cual había sido la reacción de Tyler ante lo que había pasado, y lo admitía, una parte de él se moría de curiosidad por saber qué es lo que había hecho, pero simplemente se perdió después de que su cuerpo reacciono de esa manera tan violenta.

Cerró los ojos. No había sido su culpa, simplemente se había sentido tan bien, cada toque de sus manos, cada vez que su lengua tocaba su piel, los escalofríos que le recorrían con cada movimiento, lo había sentido en cada rincón de su cuerpo.

Abrió los ojos de golpe y sacudió su cabeza de lado a lado salpicando agua a las paredes. No podía creer que estaba teniendo esa clase de pensamientos. Inhaló profundamente mientras terminaba de quitarse el jabón del cuerpo, tenía que tranquilizarse y ser el mismo Josh de siempre.

Salió de la ducha se secó rápidamente para poder cambiarse. No había visto la hora pero si Tyler le había despertado seguramente ya era tarde.

Salió vestido con su bata de baño encontrándose con el castaño sentado contra la cabecera de la cama, sintió su mirada recorrerlo y él intento cubrirse un poco más con la toalla que llevaba en las manos–. ¿Todo bien?

– Sí… ¿Te vas a bañar? –se cubrió la cabeza con la toalla.

– Tengo que hacerlo –Josh apretó con más fuerza la toalla a su alrededor.

– Sí… tengo que hacer el desayuno.

– ¡Ey! –se volteo cuando escucho que Tyler lo llamaba–. ¿Vas a hacerlo en bata?

– No –fue al closet para buscar su uniforme y no se atrevió a voltear al escuchar como el mayor se levantaba de la cama. Soltó el aire hasta que escucho la puerta del baño cerrarse y se llevó una mano al pecho ¿Por qué estaba tan nervioso? No era la primera vez que estaba en esa situación.

Termino de vestirse y fue a la cocina para preparar el desayuno.

Había dejado la comida hecha desde temprano para poder salir con sus  amigos en la tarde.

Tal cual Tyler le había prometido podía salir toda la tarde con sus amigos y estaba feliz porque hacía mucho tiempo que no podían estar todos juntos disfrutando como unos adolescentes normales.

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– Anda, hazlo –todos le empujaron suavemente para que se acercará al mostrador en donde habían comprado palomitas.