Bad guys (JINKOOK)

Capitulo 18.

Jeon Jungkook jamás habia notado como pasaba el invierno y mucho menos cuando iniciaba la primavera, de hecho, los cambios de estación eran irrelevantes para él. Las personas a su alrededor, decían que con la llegada de la primavera el ambiente se ve un poco más iluminado, porque la luz del Sol aumenta las horas que permanece al día; que caminando en las calles se siente como el Sol baña con su tibieza, las flores ya marchitas empiezan a dar señales de vida nuevamente, adornando los parques con tallos verdes; hay animalitos que hacen presencia y todo se siente mejor en general.

Él se burló, pero no los corrigió porque no tenía caso que las personas dejaran de creer lo que querían creer. Para Jungkook las estaciones del año pasaban normal. A veces necesitaba más o menos ropa, podía conducir más rápido o tenía que ir más lento sobre la carretera y habia diferentes tipos de comida que podía engullir en cada estación del año. Esas eran las diferencias. Al menos las que él encontraba.

Sin embargo, esa mañana de lunes, Jungkook pudo notar esos sutiles cambios de los que hablaban las personas, era un día muy soleado si era comparado con la fría tormenta de nieve de días atrás. (no para él, porque fue realmente caliente) Aunque se sentía un aire invernal bastante fuerte Jungkook sentía calor, estaba demasiado absorto asi que escuchaba claramente a los pajarillos cantar y habia una sensación de bienestar en todo su cuerpo.

Por supuesto, jamás lo asocio a un par de piernas largas que estaban enredadas en sus caderas, restregándose solo un poco. No lo asocio a dos manos de dedos ligeramente chuecos aferrados a su rostro y un par de labios bastante llenitos que le daban un beso intenso.

Él nunca lo asociaría con Seokjin, porque Seokjin jamás asociaría ningún sentimiento con él tampoco.

Pero la realidad era otra, claro está.

Quedaron de verse a las 9 de la mañana y asi ocurrió. Jungkook pensaba que ayudaría al mayor a subir sus cosas en la camioneta, ambos se subirían e iniciarían una conversación bastante trivial.

Pero no fue asi. En cuanto se vieron sus cuerpos hablaron por ellos mismos, la maleta junto con otras cosas que llevaba Seokjin en la mano quedaron en el suelo, mientras Jungkook sujetaba las piernas de Seokjin en su cintura y sus caras se aproximaron como un imán, pegando sus labios con mucha necesidad.

Era un beso maravilloso.

Esto ya tenía un poco más de diez minutos y ahora el cuerpo de Seokjin reposaba en el cofre de la camioneta. No se habían separado mucho, solo tomaban aire y volvían a besarse como si no tuvieran más tiempo en la vida.

Pasaron otros cinco minutos, cuando al fin se despegaron. Habia saliva escurriendo de las comisuras de ambos, pero ellos aun con esa visión, se sonrieron de forma cariñosa. Siendo todo mejillas rojas y cabello despeinado. Después de un último beso suave, Jungkook bajo de un salto a Seokjin y lo ayudo a recoger sus cosas, ahora sí, dispuesto a regresar al plan original.

Cuando terminaron de acomodar todo, tomo a Seokjin, que ya estaba por cerrar la puerta del copiloto y enredó sus piernas en su cintura para volverlo a besar. Fue un beso lento, con poca aparición de sus lenguas, un toque casi inocente. De hecho, en medio del beso habia un poco de platica y sonrisitas coquetas, preguntándose como habían estado y si habían desayunado ya.

­­­—Somi te envía saludos —dijo Jungkook. El menor ya conducía hacia el primer hotel en el que se hospedarían, a las afueras de Seul—. La veré en Busan en una semana. Mi prima tercera de parte de la familia de mamá, tendrá una fiesta por su compromiso y aprovechará que todos estaremos en Busan para presumirnos a su novio holandés.

—¿No te cae muy bien?

—Uhmm... si, aunque no hablo con él en realidad, mi inglés no es el mejor —Seokjin estaba sonriéndole, un poco burlón porque sus ojos hacían que esas arrugas por la risa aparecieran—. Mi prima está muy feliz, no sé lo que significa eso, pero me da gusto por ella.