Noche 45.

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¿Sabes?
Creo que te alegrará saber que estoy sobria. Y estoy sobria, porque te lo he prometido. No sé si lo recuerdas pero te prometí no volver a emborracharme como solía hacerlo cuando me sentía mal, perdida o algo parecido. Y mira, hoy lo he logrado.

¿Sonreirías si te lo digo?

Caray, te he prometido tantas cosas. Y dije que, de todas mis promesas, está sería la única que no cumpliría. Y ahora mira, está es la única promesa que estoy cumpliendo. Y esto es una mierda. Y tal vez no te lo preguntes pero ¿sabes por qué me siento algo perdida está noche? En mitad de la fiesta recibí una llamada. Eso fue. Seguro recuerdas a Covallín. Él fue quién me habló. En cuanto contesté me dijo "¿vas a venir?" Pensé que solo estaba bromeando y le pregunté el por qué quería que fuera. Me dijo "Porque aquí está tu exnovio, tu folla amigo y tu mejor amigo." Y bueno, ¿quién mierda era mi folla amigo? Al poco tiempo supe la respuesta. Se refería a Juan, a Alexis y a ti. En ese maldito orden. Luego comenzó a reír y colgó.

Y fue cruel.
Y me hizo recordar el por qué no quise ir.
Y espero que tú lo entiendas.

Sin pensarlo mucho me dirijí a la barra de bebidas, tomé un vaso y tomé una botella de refresco con la idea de servirme, sin embargo todos los recuerdos llenaron mi mente de la nada, ¿y sabes? Tú no estabas ahí para hacerlos callar. Y quise llorar como nunca. Me quedé mirando mi vaso vacío por unos segundos hasta que me lo retiraron y lo cambiaron por un vaso lleno de un líquido negro. Coca-cola, pensé. Sin siquiera ver a la persona que me lo había dado, di un gran trago. Era vodka con un poco de jugo de uva. Era la salida perfecta. Comencé a tomarme el vaso completo y cuando me comencé a sentir mejor, por los efectos del alcohol, esa promesa llegó a mis vagos recuerdos. Deberías estar un poco orgulloso porque, literalmente, tiré lo que restaba de mi bebida en el pasto y fui a servirme refresco. No volví a tocar el alcohol en toda la noche.

Dale las gracias a mis amigos, ellos me entretuvieron de una manera que ni siquiera necesité del alcohol para pasar una buena noche. Bailamos, comimos, platicamos, seguimos bailando, reímos y todo lo que te puedas imaginar. Al final de todo, terminó mejor de lo que esperaba.

¿Tú qué tal te la has pasado en la noche de bufandas? ¿Fue divertido? Espero de todo corazón que te la hayas pasado de maravilla. Y espero que no te arrepientas de haber ido.

Frida me contó que te dio mi mensaje.

Espero que no le hayas pedido explicaciones.

Y que ella no te las haya dado.

Me gustaría poder contarte todo de mejor manera, pero son las tres de la mañana y el sueño está comenzando a gobernar mis sentidos. Solo espero que te la hayas pasado bien, lo hayas disfrutado y vayas a disfrutar tus vacaciones de navidad.

¡Por cierto! Estas vacaciones cumplimos dos años de hablarnos... O bueno, al menos hipotéticamente, aunque seguro que no lo recuerdas. También moría de ganas de decirte que ya tengo tu regalo de navidad, y te recuerdo que soy pésima con los regalos así que deberás perdonarme. Ya veré cómo te lo hago llegar, espero te agrade.

Te quiere,

La chica que huye de sus recuerdos.

A mi mejor amigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora