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- ¡No! ¡Alto! ¡Rubén tu eres mío! ¡Para! .-la voz del alfa sonó incluso más dominadora.

El chico nombrado, hizo caso al instante de sentir aquel tono, temblando un poco, por suerte su mejor amigo lo seguia por detras, y tomando su cintura de forma delicada lo guió hasta un auto blanco, a pesar de los constantes gritos del hombre.

- Esta bien Rubius, entra al auto, todo esta bien .-apoyo el contrario, mas el menor no decía palabra alguna, sólo acataba cada orden, sin siquiera mirar a su amigo

Pues el muñequito de Papá no podia mirar a nadie que no fuese él, nisiquiera su reflejo.

Tan pronto como mangel entró al auto, a un lado de Ruben este partió, dejando que el hombre gritara y forcejeara con mas fuerza, mas era inutil, aquellos 2 hombres lo sostenían sin problema.

- ¿Estas bien Rubius? .-Miguel miró a su amigo, quien sólo tenia la cabeza agacha-. No te hizo nada antes de salir ¿verdad?

- Sí

- Menos mal .-suspiró, llevandose sus manos a su rostro-. Lo siento tanto, debí hablar antes, no esperar a este punto, mi Rubius, lo lamento tanto .-lagrimas amargas bajaban por su rostro, sintiendo frustración al ver al mejor chico que en su corta vida conoció no mostrar emociones. El menor no contesto, su padre nunca le habia dicho que tenia que hacer en esa escena.

El viaje continuo en silencio sólo se podia oir los suaves sollozos del mayor. Ruben por su parte sentia curiosidad hacia el lugar que lo estaban llevando, pero claramente no iba a preguntar, no tenia permiso para ello.

El Auto paró en medio de un bosque; Mangel bajo agradeciendo y avisando al peliblanco, quien imitó la acción y agarró los bolsos que llevaba el mayor, recordando al hombre.

- No, Rubius, no tienes porque llevarlos todos .-Entonces Ruben los soltó, en cambio mangel le dedicó una pequeña sonrisa-. Puedes llevar el verde si quieres.

Rubén y Miguel Angel se conocia hace ya bastante tiempo, ambos se habian conocido gracias a sus madres, quienes eran las mejores amigas en el mundo, y gracias a ese ejemplo ambos también lo eran, basicamente habían crecido con el otro a su lado, y por ello ambos conocían hasta el minimo detalle del otro. Recordar ese dia al mayor siemore le llenaba de alegría.

>> Miguel llego corriendo hasta la omega, gritando y saltando para que la mujer le prestara atención, quien lo regaño por interrumpir a 2 adultos, mas poco duro la molestia de la mayor porque pronto sonrió y le presentó a su amiga, una hermosa mujer de pelo castaño corto que le sonreia con un niño en brazos, mostró curiosidad ante el niño

- Hola, soy Miguel Angel Rogel, es un gusto para mi conocerlos .-se presentó, asustandose al ver como la castaña chillaba-.

- ¡Pero si eres un encanto! .-grito-. El gusto es mío Miguel .-no dijo su nombre, pues su amiga ya lo habia hecho, pero si bajo a su hijo, quien al sentir como bajaba estiró sus pies para pararse por si mismo-. El es Rubén, mi hijo, tiene sólo 3 añitos

- Hoda .-saludo el nombrado, sus ojos se alumbraron al notar el objeto que tenia el niño mayor en sus manos-. ¡Odito! .-levanto sus manos para celebrar-.

Miguel miro sus manos, en ella tenia su pequeño oso, no habia notado cuando lo agarró, pero no se asombro, aquel juguete lo llevaba a todos lados. El pequeño Rubén dio pequeños pasos hasta el objeto e intentar agarrarlo, pero el contrario lo alejó, no deseando prestar lo que era suyo. El lo sabia, ya lo prevenia, su mamá lo iba a retar por no prestar su juguete, pero antes de que la mayor pudiera alegar se escuchó una pequeña risa infantil, tratando de correr para atrapar aquel bonito osito, pero Miguel no se iba a dejar ganar, corriendo de igual manera al rededor de las mujeres, quienes sonreían enternecidas por los niños de 3 y 5 años <<

Y asi siguió los años, y aquella amistad que en algun punto se formó creció hasta el punto de ser indestructible, nadie ni nada podia separarlos. Pero el destino era un hijo de puta, quien trato mal al menor, convirtiéndolo en lo que ahora era.

Comenzaron a caminar por el bosque, escuchando sólo sus pisadas, hasta que Mangel decidió romper el silencio.

- ¿No tienes curiosidad hacia donde vamos? .-El menor no respondio, pero él sabia que si sentia curiosidad, Rubius siempre fue curioso-. Le hable a un viejo amigo, Alex, nose si lo recuerdas, pero el me contó que habia encontrado un pueblo muy tranquilo y que comenzó a vivir ahi, a si que vamos a ir a ese pueblo, espero que el cabron no me haya mentido .-solto una pequeña risa-. En fin... Falta poco

Y no hablaron mas, hasta llegar al dichoso pueblo.

El Muñequito De Papá [Rubegetta] OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora