La asistente perfecta [En edición]

CAPÍTULO 20

CHRISTOPHER

Subo al auto y tengo que tomar unas respiraciones, mi pene está queriendo traspasar la tela de los vaqueros y es sumamente doloroso, mis manos se envuelven con fuerza en el volante mientras trato de pensar en algo que ayude a bajar la erección.

No conoce los orgasmos, nunca la han hecho correrse...

—¡Ah, joder! —Mi puño golpea el claxon sin querer, y es que recordar eso no me está ayudando en absoluto.

Mi teléfono suena e internamente suplico que sea Sophia pidiéndome que suba para ayudarme con esta tortura.

No seas idiota, tú eres el que le tiene que ayudar.

Mi teléfono suena en mi bolsillo, anunciando una llamada, meto la bolsa en el pantalón y sin querer rozo la punta, logrando que un jadeo salga de mi garganta.

Ahora no basta con imaginarla sobre mi escritorio, también tendré fantasías de ella terminando sobre mi cara.

El sonido vuelve a vibrar en mi pantalón y de malas tomo el celular y lo llevo a mi oreja.

—¿Sí? —Agradezco que mi voz tenga un tono normal.

—¡Hartell! —La voz emocionada de mi mejor amigo al otro lado del teléfono es como un balde de agua fría.

—¡Chris! —Y que mi hermana grite mi nombre al otro lado de la bocina también, es todavía peor.

—¿Qué necesitan? —paso saliva y trato de despejar mi cabeza, no pensar más en quién fue mi asistente.

—¡Queremos los detalles!

—¿Qué detalles? —El pánico se apodera de mí, ¿dejé el celular encendido mientras...?

¡Oh, maldición! 

—No nos quieras ver la cara, sabemos lo que estuviste haciendo, puerco.

El miedo me invade, me siento atrapado y de golpe mi espalda golpea en el respaldo.

¿Erección? ¿Qué es eso?

—Yo no sé, ustedes... ¿Cómo? —No puede salir de mi boca una pregunta coherente.

—¡La chica de anoche! —Habla Harry ya estresado y un suspiro largo sale de mí.

—¡Sí, no te hagas el inocente, sucio! —acusa Cassy— Harry dijo que los vio besarse.

—Como está aquí tu hermana, lo preguntaré de una manera decente...

—Harry —advierto—, Harry —repito entre dientes— No lo...

—¿El día de ayer usted y esa agradable señorita tuvieron relaciones sexuales con protección en algún sitio de índole privado? —Mi hermana suelta una carcajada al escuchar a mi mejor amigo y yo solo pienso en mil maneras de matarlo.

—No, Harry. —Le gruño y como siempre, no le importa.

—¿NO TE CUIDASTE? ¡Maldita sea! El condón es lo primero que...

—¡Qué asco, Harry, no quiero imaginar a Christopher con un condón! —Cassy lanza un sonido como si fuera a vomitar— Solo quiero saber si por fin se está dando una oportunidad con otra chica.

—¡No me acosté con nadie y no conocí a nadie importante anoche, maldita sea! —se hace un silencio después de que termino de gruñir a ambos— Solo fueron unos tragos.

—Que se pasaban de lengua a len...

—¡Harry! —Escucho como lo callan con un golpe.

—Dale otro, por favor, Cassy, si es mortal, yo pago tu fianza. Voy a colgar.