Eres un tarado/ Mateo Palacios

❷⓿

Llegamos a mi depa, Mateo se instalo en un cuarto que no era el mío y eso me sorprendió.

–Pensé que te mudarias conmigo.– le pregunté entrando en la habitación.

–Uhh, creí que querías tu privacidad y espacio.– dijo doblando unas pantalonetas y metiendolas al Placard.

–Gracias, pero no, está todo bien, cuando quieras vas a dormir conmigo. ¿Vale?.

–Si amor.– dice Mateo mirándome feliz.– oye, ¿salimos a dar una vuelta?.

–Ouhhh, si claro bebé, espera me baño y salimos.– dije mirándome la mano que tenía un poco de sangre de Diana.

–Dale, yo te espero.– dijo Mateo entre risas y tirándose a la cama.

Me fui a el baño mientras procesaba lo que había pasado, Mateo estaba raro conmigo, lo noto como si me temiera, tal vez se decepcionó de mi.

–AMOR VOY A VER TELE.– grita Mateo para que yo lo escuche desde el baño.

–COMO QUIERAS!.– respondí gritando para que me escuchara.

Me bañé muy rápido, la sangre se juntó con el agua haciendo que se deslice por mi piel hasta caer al suelo, me sentía mal por haber golpeado a Diana pero supongo que son cosas que tenían que pasar.

Salí de la ducha con dirección a mi habitación.

Cierro la puerta y me quito la toalla, quedando como Dios me trajo al mundo.

–Diablos Vane que sexy.– dice Mateo viéndome de arriba a abajo.

Yo me voltee y ví a Mateo acostado en mi cama con el Netflix pausado.

Me dió demasiada vergüenza, él no tenía que estar aquí.

Yo inmediatamente me puse roja y empecé a temblar, decidí tapar mis partes íntimas.

–Amor estás nerviosa.– dice Mateo riendo y yo agache la mirada.– Ouh, perdón eh, dale cámbiate yo me hago el boludo.– dice tapándose la cara. Se veía tan tierno pero aún seguía con la pena; quería que la tierra me tragara en ese instante.

Yo me quedé ahí pasmada, me quería literalmente morir. Me quedé en shock no sabía cómo reaccionar.

Mateo se destapa la cara pensando que ya me había cubierto.

–Ey Vane, tápate.– dice Mateo mirándome fijamente a los ojos, o eso creía yo.– venga te ayudo.

Mateo se levanta de la cama y yo tenía mis ojos llorosos, yo solo lo seguía con la mirada, Mateo se inclina hasta recogerme la toalla que estaba tirada en el piso.

–Toma, cámbiate te espero afuera.– dice Mateo con intensiones de salir pero yo no lo dejé.

–Espera...–dije sin ponerme la toalla.

–Dime.– Mateo se gira y nota como sostengo la toalla en mi mano sin ponermela.

–Estoy lista.

–¿Vas a salir así?.– pregunta Mateo mirándome confundido.

–No seas bobo, como se te ocurre.– de inmediato solté severa carcajada.– me refiero que estoy lista para lo otro.

Solté en un tono provocador y me acerqué a él para besarlo. Mateo instantáneamente me siguió el beso, y éstos empezaron a volverse más desesperados.

Lo agarre del brazo y lo tiré a la cama, el todo sumiso seguía mis movimientos con su mirada.

Él se quita el buzo y yo me siento encima de él. Acomodandome en su micrófono.

–Che, creí que eras tímida.– dice Mateo sorprendido, jadeando y con el corazón a mil.

–Pues yo creí que era el momento, pero si no quieres hacer nada, está bien.– dije un poco triste, ¿no quería conmigo?.

–Si, obvio que si quiero, lo que no quiero es que te sientas presionada, yo te espero el tiempo que sea. Si crees que porque te ví en bola tenemos que matar ganas estás equivocada, todo a su tiempo, yo estaré aquí y te voy a entender y a amar. Vane te amo, sos lo mejor que me pudo pasar.– dice Mateo con una risita nerviosa y sincera.

Me sentía tan cómoda estando con él.

–¿Te volviste un okupa Mateito?.– pregunté riendo.

–¿Es un delito invadir tu corazón?.– pregunta sonriendo y un poco ruborizado, me acerco a él y nos besamos nuevamente.

Los besos eran una maravilla y más cuando se volvían húmedos.

–¿Tenes forros?.

–Wow, Vane no me la creo, vos preguntandome eso.– dice Mateo mirándome sorprendido, mientras tanto yo estaba sentada encima de su erección dando movimientos circulares lentos.– Si, si tengo.

💎💎💎
Algo cortito.

Acá les dejo, nos vemos depronto mañana. ❤️
Gracias por las 2k vistas🤯