Amor Con Sabor

XVIII. Cuéntame la Verdad

Capítulo Dieciocho

***

—Te dije que era una mala idea, ¿Ahora que van a pensar?—

—No tenemos que darles explicaciones, no son sus asuntos—

—Santiago, es imposible que te mantengas en esa posición—

Margo estuvo a punto de seguir hablando cada vez aumentando el tono de su voz sin embargo la detuvo el sonido del bullicio de sus compañeros. Entraron como si no hubiera pasado nada e incluso Santiago y Margo consideraron la idea de que Lirio no hubiera dicho nada.

El ambiente se sintió tenso, Lirio prefirió cambiar lugares con Eliot y los demás no dijeron ni una palabra.

—Y... ¿Cómo les fue?— Margo le preguntó a Eliot mientras picaba algo de vegetales

—Bien— Dijo secamente

Margo entendió que no era buen momento para hablar por lo que decidió seguir trabajando en silencio.
Los hornos encendidos, los sartenes aullando y los cuchillos imponiendo autoridad. La cocina estaba calladamente ruidosa gracias a los integrantes, Santiago como siempre evitó el contacto con cualquier persona presente en la cocina. Cuando los meseros entraban por platillos sentían que evidentemente el ambiente se encontraba pesado. Tras tres horas de arduo y dedicado trabajo, la jornada llegaba a segunda mitad. Por petición de uno de los comensales, Santiago fue llamado para dar el veredicto final a sus platillos.

Todos se miraron y entendieron que el plan que habían planeado tenía que salir a la luz. Todos salieron como soldados dejando a Iván con Margo a solas. Bloquearon las puertas poniéndose fuera mientras admiraban la escena por las ventanas circulares típicas de las puertas.

—Margo, Lirio nos contó lo que pasó y ninguno de nosotros te va a juzgar—

Margo desvío la mirada mientras limpiaba sus manos. Iván dio unos pasos hacia ella

—Margo sabes que te estimo mucho y se por lo que has pasado... Por eso tengo que hablarte de algo...—

—¿Algo sobre qué?— Preguntó curiosa

—Margo, Cuando llegamos aquí nunca imaginé que... Bueno... Santiago y tú me tomaron por sorpresa—

—Ve al grano, por favor—

—Violeta escuchó por la misma boca de Santiago que... Estaba en un compromiso matrimonial— Hizo una pausa para suspirar— Violeta no le creyó pero hace unos días Eliot encontró a Santiago con una mujer y si hubiera llegado minutos antes posiblemente todas las sospechas hubieran sido afirmadas—

—Te refieres... A...—

—La mujer con quién estaba, es su futura esposa—

Margo se cruzó de brazos

—¿Se supone que debería creerles—

—Nosotros no ganamos nada con mentirte, Pero a lo que entendimos Santiago quiere dar buena impresión a la prensa y por eso necesita una figura a su lado—

—Eso es imposible, Santiago no haría eso—

—¿Cuánto tiempo lo conoces? No me sorprendería algo de él—