Lucem ac tenebras (Drarry)

Capítulo 1: El número 4 de Privet Drive

El número 4 de Privet Drive no había sido tan deprimente como ese 31 de julio. Harry se había levantado feliz, ya que por fin cumplía la mayoría de edad y tenía la posibilidad de huir de ese hogar de mierda en el que le había tocado vivir después de que sus padres murieran en un accidente de coche. Salió de su habitación y lo primero que oyó fueron los pesados ronquidos de su primo, hizo una mueca antes de bajar colocando bien las gafas. Si era sincero con él mismo no se esperaba ninguna felicitación de nadie, estaba acostumbrado a los desplantes y malas formas de su tíos, ese día no iba a ser diferente. Entró en la cocina y recibió un delantal que le tapó la visión por un momento.

- Prepara la comida.- Dijo Petunia antes de darle una mirada de asco.- Hoy viene un hombre importante de Londres, necesito que la comida sea excelente y que tu seas un buen chico.- Dijo antes de ir hacia el salón donde Vernon estaba sentado.- Aunque bueno, si pudieras esconderte en tu habitación mejor.- Dijo antes de sentarse al lado de su marido.

Harry resopló antes de acercarse a la cocina y comenzar a cocinar una comida de banquete, si de algo le había servido ser el mayordomo de los Dursley fue para saber apañárselas solo. Mientras cocinaba la comida picoteó su desayuno y le preparó un plato con más grasas que nutrientes a su primo. No tenían ganas de tener una de sus rechonchas manos perjudicando mientras cocinaba. A las doce y media toda la comida y la mesa estaba lista, él se quitó el delantal y miró como su tía asiente haciendo muecas.

- Bien, bien.- Dijo antes de mirar con asco a Harry.- Ves a ducharte y ponte algo más arreglado, cuando llegue recoger su abrigo y después a tu cuarto.- Dijo antes de que Harry resopló. Decir que estaba harto era quedarse corto, desde que tenía memoria había vivido con estas despreciables personas. Harry se duchó con rapidez y se puso unos pantalones, que Dudley le había que pequeños hace muchos años y una camisa que le iba un poco grande. Suspiró antes de intentar arreglar su pelo pero se rindió antes de suspirar. Si tenía suerte nadie lo molestara hasta el final del día.

- Feliz cumpleaños a mi.- Susurró antes de salir de su habitación y bajar donde los Dursley posaban como una familia de revista.

La puerta sonó y Vernon le hizo una señal, Harry abrió la puerta frunciendo el ceño al ver tres personas ahí. Un hombre mayor con una barba bastante larga y poblada, este vestía un traje de dos piezas amarillo chillón. A su lado un hombre pálido con el pelo negro largo suelto, este iba vestido con un traje de dos piezas completamente negro, además de que su mirada era fría como el hielo. Y detrás de esos dos hombre había otro, con el pelo castaño, no podía apreciar muy bien cómo iba vestido pero se arriesgaría a decir que era una camisa blanca y un chaleco de punto encima de color crema, sus ojos eran ámbar y tenía una extraña cicatriz que cruzaba su cara. Harry se hizo a un lado y los tres hombres entraron mientras lo miraban curioso y sorprendidos.

- Bienvenidos, debéis ser los representantes de Hogwarts ¿No?- Dijo Vernon alargando su mano. El hombre de traje amarillo sonrió antes de aceptarla con la expresión que Harry se atrevía a clasificar de abuelo dulce. El recibió un carraspeó de su tía y tragó saliva antes de mirar al hombre castaño que lo miraba con cariño y nostalgia.

- Así es, soy Albus Dumbledore, el director de la academia.- Dijo con una sonrisa y Harry miró sorprendido al hombre. Los estudios superiores no habían sido una opción para él nunca.- Conmigo viene Severus Snape subdirector y Remus Lupin, profesor de Psicología y Psicólogo del centro.- Dijo Albus antes de que todos menos Harry fueran al salón, Dumbledore se detuvo en la puerta y miró al chico con una sonrisa.- ¿No viene joven?- Este levantó la mirada antes de suspirar y abrir la boca para hablar.

- No, mi sobrino tiene cosas que hacer ¿Verdad Harry?- Este miró a su tía, que como siempre había hablado por él, antes de asentir secamente en la dirección del director.