Pétalos rosas

Sakumo Hatake

Eran las 12 del día y Sakura salía del cuarto de Izumo y Kotetsu suspirando. Esos dos ahora sí se habían metido en un problema.

El par había llegado la tarde anterior, siendo cargados por el escuadrón de rescate y desde entonces Shizune y ella habían estado tratando de estabilizar sus signos vitales, ayudando a que no decayeran por completo. Shizune se había ido más temprano, a ayudar a la Hokage con el interrogatorio de los ANBU que los encontraron y ella se había quedado sola con otro médico y un par de enfermeras.

Así que bajó las escaleras, dispuesta a tomar su descanso después de varias horas de jornada.

Pero al llegar a la recepción, se encontró con Shikamaru y su caravana, compuesta por Genma, Kakashi, Aoba e Ino entrando al hospital. Al verla se detuvieron y ella dio un suspiro cansado.

- Sakura -

- Lo siento, caballeros, me temo que no puedo otorgarles lo que me van a pedir - dijo ella, adelantándose.

- ¿Cómo sabes lo que te íbamos a pedir, gatita? - preguntó Genma.

Kakashi lo miró, curioso por el sobre nombre, pero no dijo nada.

- Izumo y Kotetsu siguen muy débiles, sus signos vitales están muy bajos. Si alguien con jutsu sensorial empieza a hurgar por su memoria, me temo que solo hallarán cosas incongruentes y--

- Pero al menos podríamos intentar - interrumpió Shikamaru, señalando a Ino que venía detrás de ellos - Ino sabe de ninjutsu médico -

- Si fuera solo eso, no habría ningún problema, pero si despiertan algún trauma o algún suceso que los altere, puede afectar su ritmo cardiaco de manera negativa. Sin mencionar que podrían revolver su memoria y perder cualquier cosa que hubieran podido encontrar - explicó la médico, intentando razonar con él.

- Sakura, entre más tiempo dejemos pasar, más corremos el riesgo de perder todo rastro de Asuma -

- Tiene razón, Cerecita, cada segundo cuenta - dijo Genma.

Esta vez, Kakashi frunció el ceño.

- ¿A costa de la vida de ellos dos? - dijo Sakura, ya molesta. Los demás se quedaron en silencio.

Sakura suspiró nuevamente, se acercó a su amigo y puso una mano en su brazo, llevándola de arriba a bajo de manera consoladora.

- Créeme que te entiendo y está en la prioridad de todo el hospital. Desde ayer, Tsunade-sama dio la orden. Ahorita estamos trabajando Shizune, Shiho y nuestros mejores médicos con ellos dos -

Shikamaru solo asintió con la cabeza.

- Te prometo que serás el primero en saber cuando haya algún cambio -

- ¿Han mostrado mejora? - preguntó Aoba, genuinamente preocupado por sus compañeros.

- No han mejorado, pero no han empeorado, lo cual es una buena señal. No tomará mucho para que despierten -

- Bueno, nos retiramos entonces. Gracias, Sakura - dijo Shikamaru, dándose la vuelta y saliendo del edificio con los demás, pero después de hablar algo que Sakura no pudo escuchar, cada quién se fue en distintas direcciones.

Sakura los vio marcharse y volvió al escritorio de la recepción para avisar que se iba a tomar un pequeño descanso.

Salió del hospital y entró a la misma pequeña cafetería en la que siempre disfrutaba de sus tiempos libres del hospital. Amaba ese lugar, sobre todo sus...

- Capuchino. Grande. Por favor - le suplicó a la chica de la barra, quien con una sonrisa le dio el capuchino ya preparado.

- Día duro ¿eh? -