Cap-7

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Lágrimas caían sin parar y sus manos temblaban.

La chica proviniente de Tailandia se arrodilló, pero simplemente no hubo nada, ni un solo movimento.

Jennie se encontraba en el suelo desangrandose, tenía sus pies a la altura de pechos, en tanto sus manos se hallaban caídas a ambos lados de su cuerpo.

Las cortadas estaban a todo lo ancho de sus antebrazos y muñecas.

La sangre sobresalía de su prenda (la ropa de la imagen☝️) de tejido blanco, pintándola de un rojo intenso. Sus muslos y piernas se encontraban en el mismo estado.

La mirada chocolatada de la castaña estaba sobre la tailandesa, que al contrario de esta tenía en su rostro una sonrisa, mientras Manoban solo la miraba con reproche y dolor por lo que se había hecho.

Kim no la culpaba. Sabía que eso era fruto de su arrogancia, al no querer ver las cosas de otra manera. Para ella el suicidio era la opción más satisfactoria para alejarse de todos y no volver a tener la sensación del dolor consumiémdola por dentro.

Quería morir para vivir.

Pero algo no la dejaba, pero, ¿qué era exactamente lo que le motivaba a seguir viviendo? ¿Qué era lo quería o anhelaba cada noche a su lado? ¿Por qué carajo tenía tantas ganas de vivir la vida y sonreir a cada instante si para ella no había motivo alguno?

Esas preguntas incrustadas en su cabeza la hacía confundirse cada vez más.

A caso tener un padre alcohólico, drogadicto y sin ganas de subsistir era motivo de reír a carcajadas; a caso tener una madre que la odia, la golpeaba con cualquier cosa que tuviera en frente y que luego la abandonó porque simplemente dijo que tan solo era un estorbo en su vida, era razón para gritar de felicidad.

La chica de ojos gatunos se sentía una mierda, una basura, un parásito.

Ella solo quería tener en su rostro una sonrisa, que por primera vez no fuera falsa, fingida. Solo quería dejar de sufrir y llorar cada día en su cama y ser alguien que pudiera vivir una vida color de rosa.

La respuesta a sus preguntas era sencilla...

Lalisa Manoban.

La coreana no dejaba de mirarla, la hacía feliz.

El verla cada día en el colegio, pelear con ella, sentir como la mira cada vez que se duerme en clase, cuando rozan sus cuerpos por accidente, y ver como se sonroja por su causa, sonríe y su forma de hablar, eso si la hacía feliz.

Sin darse cuenta se había enamorado de su Manoban.

....

Jennie colocó su mano en ls mejilla de Lisa, durante con la otra tomaba su mano y la entrelazaba con la de ella.

- Por favor ayúdame a vivir, ayúdame amar para amarme y aprender amarte.

👭😥❤

Help ♧Jennie y Lisa (Jenlisa)♧♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora