- Anjalí - Castigada

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"¿Enserio? Duraste tres horas ¡Tres horas! Podrías batir un record"

¡Cállate! Fue sin querer, todo fue culpa del idiota al que se le ocurrió botar la basura de su tajador cerca de mí. 

— Así que... ¿Usted es la señorita Sharma?

En este momento me gustaría no serlo—. Sí, soy yo...

¡Me van a expulsar! ¡En mi primer día! Ni siquiera puede contar como un día. Mi papá va a matarme y Katrina se burlará de mí. Voy a llorar.

— ¿Quién de ustedes dos fue el culpable del accidente?

Giré y vi al muchacho que estaba a mi costado, era el mismo que tiró de mí para sacarme de allí, miraba todo sin interés. 

— ¿Por qué piensas que soy yo?—. Respondió desafiante ante el director.

— Tú eres nuestro principal problema, Rahul—. Respondió caminando cerca de nosotros mirándolo mal.

— ¡Error! ¡No han podido comprobar nada! Así que, reclamo mi presunción de inocencia—. Traté de no reír, debe estar igual o peor que yo. 

— Ustedes dos estuvieron cuando el incendio sucedió, y quiero saber quien fue el culpable—. Sus ojos escudriñaron en mí, Rahul ni se inmutó, no tenía nada que temer.

"A diferencia de ti" 

— Fue ella—. Me apuntó con el dedo, entré en pánico, maldito delator chismoso—. Pero, yo la empujé.

— ¡Hijo de pu...!—. Me levanté con la intención de golpearlo, maldito idiota, arruinó mi primer día de clases.

— ¡Señorita!—. Gritó el director. Respiré antes de pedir disculpas—. Así que entonces, ambos cubrirán los gastos, señor Rahul, y señorita... 

— Anjalí—. Indiqué.

— Eso, Anjalí, a partir de ahora no quiero ninguna queja de ustedes dos—. "Un poco imposible" La puerta se escuchó, y el director permitió que las personas entraran. 

¡Maldita sea! Era la madre de Rahul y "Meredith Blake" ¿Qué hacía Katrina aquí? 

Los ojos del director saltaron al ver a la novia de mi padre, por lo menos él no está aquí. La mamá de Rahul le lanzó una mirada asesina y Katrina imitó su acción, pero realmente no le tengo miedo. 

— J-jóvenes—. Se acomodó la corbata nerviosamente, como si hiciese calor, Katrina hace subir la temperatura—. Esperen afuera q-que debo hablar con ellas...

Rahul y yo bufamos y salimos de allí sentándonos en las bancas. Ahora sí me iba a escuchar eres idiota.

— ¡Oye! ¡Tú! ¡¿Por qué demonios me empujaste?! ¡¿Te crees muy listo?!—. Grité golpeando su cabeza, él me miró extrañado. 

— ¡¿Qué te pasa?! De no ser por mí, serías solo cenizas—. Respondió cruzando sus brazos.

— ¡De no ser por ti, nada de esto habría pasado!—. Volví a golpear su cabeza, no sé si me estoy pasando de la raya, pero estaba muy enojada, sentía mi cara arder. 

Él se soltó a reír ¿Qué ha de gracioso? ¡Haré que conozca a Dios si se vuelve a reír de mí!

— ¡¿Qué es gracioso?!

— Tienes una cucaracha en la cabeza—. Señaló riendo.

"Patética"

¡Mierda odio las cucarachas! Me asqueé y comencé a mover mi cuerpo y sacudir mi cabeza cual gusano asustado, mientras repetía ¡Quítamela, quítamela!, Rahul no paraba de reír. 

¡Mala Suerte!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora