♣28♣

72 9 0
                                    


Jungkook había manejado hasta un resto bar lo más lejos que podía. Sentía su pecho contraerse en un dolor punzante, otra vez estaba pasando, otra vez le rompían el corazón. La primera fue cuando SeokJin se fue y pensaba que estando de vuelta iba a tener alguna posibilidad.

No importaba la hora que fuere, estaba sentado mirando su vaso con alcohol y sus ojos rojos, no iba a quebrarse en ese lugar, solamente quería matar ese dolor en su pecho por un momento.

¿Por qué le hacía esto? ¿Por qué cuando piensa estar tan cerca de conseguir que Jin lo acepte, termina de nuevo roto?

Podría rendirse de una vez... fueron cuatro años en los cuales claramente pasaba por su cabeza que su hyung iba a conseguir a alguien más de quien enamorarse. Pero estaba tan seguro de sí que aparto esa negatividad de él.

—¡No!

Golpeó su puño contra la mesa llamando la atención de algunos presentes cerca.

Limpió sus lágrimas y terminó su vaso de un solo trago, ardiendo su garganta y sintiendo como el alcohol llegaba a la cabeza.

—No me voy a rendir

¿Rendirse...? Nunca...

Eso no estaba integrado en alguien como Jeon Jungkook, no iba a permitir que jueguen con él. Él iba a jugar, e iba a ganar. Y si era necesario hacerle ver a SeokJin que en realidad está enamorado de él, le iba a quitar la venda de los ojos con descaro.

No se iba a rendir tratándose de Jin. Y el primer error que cometió el mayor fue volver a caer en los brazos de Jungkook, porque por ello terminó siendo infiel a su supuesto novio. Suponiendo que lo amara, no habría cedido.

Y como si fuera un cambio repentino, aquella noticia que destrozó a Jungkook ahora lo hacía sonreír. No iba a usarlo en contra del mayor. Era una buena oportunidad para atraerlo a la tentación.

Dejando dinero en la mesa más de la cuenta, se retiró del lugar para ir de vuelta a su hogar. Suponía que SeokJin ya estaba en su departamento, por lo que estando a solas volvería a pensar cómo hacer que el corazón de su hyung demuestre sus verdaderos sentimientos.


○•○•○


SeokJin se encontraba recostado en su cama, no recordaba que su departamento estuviera así de limpio y con aquella decoración. Hoseok le había comentado que Jungkook era el que frecuentaba más su departamento, yendo a limpiar y verificar que no faltara nada.

Siendo el menor quien más visitaba el lugar, decidieron dejarle la llave a él, por lo tanto, Hoseok no estuvo a cargo de ello durante casi tres años. Aunque este se sintiera un poco mal dejarle ese trabajo a Jungkook, esté quería hacerse cargo solo.

Todos sus amigos ya sabían que había llegado bien a su departamento. Organizó con ellos sin mencionar a Jungkook, para reunirse, al día siguiente les contaría todo lo que ellos pudieran preguntar y pensaba decirles acerca de su noviazgo con el chico que conoció en Italia.

Iba a ser una sorpresa para todos, pero viendo las circunstancias que había tomado al decirle al menor sobre su relación, se aseguraba que tal vez, debía decírselos por su cuenta propia antes de que se enteren de parte de Jungkook.

Después de todo no faltaba mucho para que su pareja se apareciera por Seúl en unos días. Iba a decírselos cuando él estuviera presente, ahora las circunstancias cambiaron.

Aún no había terminado de desempacar. Faltando dos maletas más de tres, era agotador volver después de años y reordenar tus cosas en tu hogar de vuelta. Mañana seguiría después de encontrarse con sus amigos.

Solo comería e iría a la cama. El delivery no tardo mucho, por lo que cuando lo recibió ya estaba en pijama. No le importaba si lo veía de esa manera, estaba cómodo y disfrutaría la comida en su cama viendo algún programa.

Agradecía tener un pequeño tacho de basura en su habitación, porque no tenía las ganas suficientes para ir a la cocina a tirar los residuos. Apagó el televisor y se acomodó juntando sus manos debajo de su mejilla contra la almohada.

Al día siguiente por precaución SeokJin había puesto alarma, en caso de que se pasara de dormir mucho y no tuviera tiempo para prepararse antes de salir. Pero eso no sucedió, había despertado una hora antes de que llegara a ser medio día.

Con pesadez, preparó su ropa dejándola en la cama. Se metió a bañarse por una media hora, dejando que el agua lo relaje y despierte del todo.

Luego de alistarse tomo lo necesario para salir, celular, llaves, dinero. Estaba a gusto de recorrer las calles nuevamente, esperando ver algún cambio en estas que haya ocurrido en su ausencia.

Estando en el taxi miraba atento por la ventana del auto como es que algunos locales ahora seguramente habían cambiado de dueño, incluso hacer funcionar su cabeza de tantas cosas que no recordaba de la cuidad. Pidió al chófer parar unas cuadras antes, el día estaba lindo, sin que el sol este demasiado fuerte.

Al bajarse respiro profundo, sintiéndose libre al soltar el aire retenido. Caminando sin tanta prisa, avisó a sus amigos que estaba cerca del restaurante donde se encontrarían. Taehyung ya estaba en el lugar, en cambio Yoongi y Hoseok todavía no llegaban.

Subiendo los tres escalones de la puerta del restaurante, al entrar buscó con la mirada a su mejor amigo quien no tardo en levantar la mano para que lo viera. Con una gran sonrisa se acercó hasta la mesa y ambos chicos se dieron un fuerte abrazo. Con un sentimental Taehyung empezando a tener los ojos llorosos, de volver a ver a su mejor después de tantos años.

—Te daría una paliza por abandonarme de esa manera, pero te extrañé mucho Jin Hyung

Expresó su amigo quien ahora estaba teñido de azul. Se veía muy bien con ese color, más atractivo y los años le ayudaron en cuanto a desarrollar mejor sus facciones y cuerpo.

—Yo te extrañé más, fue tonto de mi parte irme sin avisarte, perdóname por eso Taehyunggie, traje regalos para todos, pero ahora te digo que ese color te queda estupendo. Te ves muy atractivo, tanto como yo

Guiño el ojo ganándose un golpe en el hombre por parte del contrario. Lo había avergonzado, sus mejillas de un color rosado lo delataban.

—Gracias, los chicos no tardan en llegar, mientras te voy a poner al día con mis sucesos

Ambos rieron y se sentaron en espera de los dos restantes. Taehyung comenzando a contar lo que le había pasado en esos años que Jin no estuvo presente. 

Give Up?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora