Se alejó y miró hacia otro lado.
Suspiré.
Me puse de pie para irme, tomando de mis cosas.
– Camila. –
Puse mi mochila en mi hombro.
– Camila – Volvió a decir.
Iba a irme.
Cuando intenté ignorarla me tomó del brazo y me hizo girarme.
Me asusté por su reacción. Sentí que podría caerme al suelo cuando me tomó de las caderas apretándome fuerte cerca de ella, poniendo sus labios en lo míos con tanta hambre retenida que me hizo dudar si aquí era yo la única con ganas de esto.
Sentí la madera detrás de mí gemelos.
Gemí porque me alzó cuando chocamos con su cama y me lanzó sobre esta poniéndose entre mis piernas. Me mordió el labio inferior. Tocaba mis muslos, mi culo...
Sus manos apretaban cada rincón de mi cuerpo, siendo posesiva, salvaje con cada toque. Me estaba dejando loca, creo que arruiné mis bragas.
Dejó un rastro de besos desde mi mandíbula hasta llegar a mi cuello, comenzó a marcarme mientras sus manos levantaban la camiseta que me había puesto antes. Me senté levemente y me la quitó. No llevaba sostén.
Llevó su rostro a mis pechos y abrió la boca para chuparme a su gusto, me succionaba con fuerza. Estiraba mi pezón con sus labios y lo volvía a poner en su boca mientras su mano apretaba el otro pecho. Grité su nombre quejándome por la mordida que me dejó en la piel a un costado.
Me miró.
. – Te voy a follar todo lo que quieras, cuando quieras. – Dijo entre dientes, parecía furiosa. Me encantó.
Llevó sus manos a mi ropa inferior y me quitó de una sola vez la ropa interior y el short. Me miró y luego se apoyó sobre mí. Yo estaba desnuda y ella tenía ropa pero aun así podría correrme con solo su roce.
Frotaba su erección en mi coño desnudo mientras me miraba, yo no podía mantener los ojos abiertos porque su presión me obligaba a gemir, a aferrarme a ella.
. – Te necesito...
Me quedé en silencio cuando movió su brazo hacia la mesita de luz quitando una tira de tres condones.
La miro interrogativa.
. – Temía que esto pasara y no los tuviera. – Dijo sonriendo con inocencia.
¿Que qué?
Ella se mordió el labio inferior y se acercó a darme un rico beso en los labios, tocando un poco mi lengua con la suya. Sus besos pasionales tenían mi presión sanguínea por los suelos.
Rompió el preservativo con sus dientes mientras yo le ayudaba a quitarse sus jeans. Solo los bajó hasta las rodillas, estaba muy dura, no podía resistirlo más, lo vi en su mirada de insistencia cuando se colocó el preservativo.
Me abrió las piernas y se quedó mirándome al mismo tiempo que acariciaba su erección entre mis pliegues. Cerré mis ojos hundiendo mi mejilla en la almohada.
Empujó un poquito metiendo la punta.
Gemí, puse mis manos en sus hombros.
Ella las quitó de ahí y me tomó de las manos poniéndolas a los costados de mi cabeza. Me sostuvo desde así.
Abrí más las piernas y ella se deslizó dentro de mi centímetro por centímetro, acariciando todo mi interior, volviéndome loca de pasión. Arquee mi espalda. Si ella se movía yo iba a correrme. Lo juro.
Su cuerpo estaba recostado sobre el mío, mis piernas en sus caderas, sus brazos a mis costados.
Me tenía apretada bajo ella.
Sus manos acariciaron mi rostro, sostuvo mis mejillas, corriendo algunas mechas de mi cara. Mordió mi mentón y se movió un poco. Solté un gemido golpeando mi garganta, ella gruñó.
Se empezó a mover y mis gemidos salían de forma automática, no podía si quiera retener el sonido que producía. Sentía su mirada sobre mí. Me follaba duro, con fuertes estocadas que movían levemente la cama.
Se movía
Una y otra vez.
Esa sensación.
La caricia de su miembro dentro de mi. Su movimiento...
No soporté.
El orgasmo comenzó a golpearme la abracé sin darme cuenta. Ella mordió el lóbulo de mi oreja un poco, su respiración en mi oído me llevaba a otro orgasmo interrumpiendo el anterior,no entendía como eso sucedía pero lo disfruté...
No iba a controlar dos seguidos, mi cuerpo se desvanecía mientras ella me observaba con atención, le sostuve la mirada.
Ella siguió hasta correrse, mirándome.
Mis mejillas ardían, mi coño se estrujaba a su alrededor y sentía las descargas de mi eyaculación desbordarme de placer. Me besaba la mejilla y pasaba su lengua por donde podía, me ponía aún más cachonda sentirla así.
Los espasmos se terminaron por ir, dejándome frágil a todo movimiento. Ella me besó con la respiración entrecortada, mordisqueando, chupando, gimiendo en mi boca.
Estuvo si varios minutos.
Acaricié su nuca, puse mis dedos en sus cabellos, besé la línea de su mandíbula.
Se alejó. Me observaba agitada.
Traté de mantenerme despierta mientras la miraba con los ojos cansados. Veía borroso, mis brazos estaban cansados al igual que todo mi cuerpo.
Me quedé dormida.
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Girls need love [Pausada]
Short StoryEs probablemente mala idea tener sexo con tu crush. Lauren g!p Está historia quedó pausada el 30 de octubre del 2020 y se retomó el 18 de abril del 2021 por inconvenientes en mi confort cotidiano. Ya que escribir historias es solo mi hobby #104 en c...