Capítulo 11

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No hago otra cosa que pensar en lo de anoche. Mi cabeza da mil vueltas recordando sus palabras, como me tocaba, como me hizo sentir... lo que me hizo sentir. Intento estar atento en clase pero no lo consigo. Camila me da un codazo al verme tan distraído. Le profesora nos está dando los exámenes que hicimos hace unos días. Ni me acordaba de aquel examen. Cuando me lo da, abro los ojos como platos al ver un 3 redondeado en rojo "NO PUEDE SER" Camila al ver mi nota me mira sin expresión ninguna -¿Dante?- asiento despacio y me abraza cuando ve una lagrima caer por mis mejillas. La culpa vuelve a mi. Sea lo que sea lo que estoy sintiendo por el se tiene que acabar. No esta bien y esta empezando afectarme más de lo pensaba.

Salimos a la puerta del insti en silencio

-Se que no quieres hablar del tema... pero me tienes que contar que pasa Cristian. Tu nunca has suspendido- Camila me abraza fuerte -¿te obliga a algo? Dímelo por favor- me dice preocupada ¿me obliga? No me resisto cuando me toca.
-No- respondo apunto de llorar -pero nose Cami... no me obliga a nada simplemente no me resisto y final...-
-te gusta- termina la frase
-si. Pero al final acabo sintiéndome culpable- le digo con los ojos llorosos -pero no lo puedo evitar. Siento cosas... nose que es... pero cuando estoy con el, siento... nose como explicarlo, nunca lo había sentido- camila me mira sonriéndome con ternura acariandome el pelo
-cariño... te estas enamorando de Dante. Lo que sientes es amor- "¿AMOR?" -y te sientes culpable por ser el hijo de Teresa, mucho mayor que tu- concluye
-Cami está mal-
-Cariño. No esta mal ¿te ha dicho lo que siente por ti ?-
-solo me ha dicho que no sabe que le pasa conmigo que no se había sentido asi con nadie- Cami vuelve a sonreír tierna
-El también se esta enamorando Cris...- la miro asustado y la abrazo -el amor da miedo ¿he?- nos separamos
-Cami es que...-
-Cris ¿han tenido relaciones?- me interrumpe
-si... bueno no... nose si se puede decir que hayamos tenido relaciones. Hemos tenido momentos-
-ya veo... te está haciendo descubrir lo maravilloso que es tener un orgasmo- me dice susurrando
-cami...- me quejo a lo que Camila se ríe.
-cariño... es normal que te sientas confundido... yo también estuve así en su momento. Si te sientes bien con el, deja la culpa a un lado y disfruta-

Oigo el clapson de Dante a lo que Camila me abraza con más fuerza todavía -Te propongo un plan. Estudiaré contigo los domingos en mi casa o en la tuya. Para que ese suspenso que no repita- nos separamos y la miro agradecido.
-Nose que haría sin ti- me da un beso en la mejilla y se va.

Entro en el coche, dejo la mochila en el suelo, me mira y se acerca a mi para darme un beso en los labios
-Hola bebe ¿cómo fue el insti?- me dice con cariño.
-bien...- le respondo desanimado
-papi... ¿que pasó?- me obliga a mirarlo agarrandome las mejillas con ambas manos.
-si... bueno no... - le digo dudosa
-Si paso algo. Dime papi... ¿qué paso?- me dice con voz calida.
-es que... he suspendido un examen- suspiro
-bebe... pero ¿y eso?- me pregunta preocupado.
-nose... camila me ayudará a estudiar- le digo sin ganas.
-Bueno... si Camila te ayudara, no tiene por que volver a pasar mi amor. No te preocupes- asiento despacio y me otro beso.

Al llegar a casa subimos por la escalera en silencio, pero al oir la voz de Sergio, Dante me agarra de los hombros y se frena en seco. Al ver cómo Sergio bajaba las escaleras hablando por teléfono, Dante me agarra de la cintura com ambas manos y me atree hacia el. Sergio cuelga el teléfono se acerca a darme un beso en la mejilla a lo que mira Dante divertido.

-Hola príncipe... ¿como te fue el insti?- lo mire cauteloso
-bien...- Dante me sujeta más fuerte de la cintura
-me alegro mucho- Me acaria la mejilla -olle, ¿por qué no vamos al cine un día? Que desde que volví apenas nos hemos visto y eso no puede ser...?- canturrea mirandome con los ojos brillosos.
-¿Por que no vamos los tres?- dice Dante de repente. Lo miro sin saber que decir, el sonrie sinico al igual que Sergio -por que ni pienses que voy a dejarte solo con Cristian- continua.
-¡Claro! Vamos los tres. Por que a mi tampoco me gusta que estés a solas con el- ambos ríen irónicos y Sergio baja las escaleras como si nada.
-Imbecil- susurra y seguimos subiendo las escaleras como todos los dias.

Al llegar a mi puerta me da un beso en la frente y cuando va entrar en su casa lo llamo.

-Dante el se gira y me mira extrañado.
-dime bebe- rodeo los ojos pensando como decirle. No quiero que este tira y afloja que tienen se complique.
-no nada...- me cruzo de brazos y veo que se acerca.
-papi... ¿qué?- me acuna las mejillas con sus manos.
-Dante es que...- miro al suelo sin saber cómo decirle -no quiero que se peleen-. Le digo sollozando. Dante me suelta la mejillas y su mirada cambia de tierno a enfadado
-te preocupa mucho tu amigo ¿verdad? Tu amigo no hace otra cosa que picarme y tú le defiendes- me dice alejándose de mi
- no es eso. Solo que...-
-Mira ¿sabes que? Quédate con el imbecil de tu amigo- me da la espalda y antes de entrar en si casa me dice -te veo en la noche- da un portazo que retumba por todo el rellano y yo me hecho a llorar con tristeza. Repito hondo y entro en mi casa con tranquilidad.

Después de hablar con Camila toda la tarde para hacer los deberes me recuesto en mi cama agotado. Todo el lío que he tenido con Dante me he desviado un poco de los estudios pero Camila me ayudara a volver. No puedo volver a suspender, menos mal que solo ha sido un examen.

Cuando veo la hora me sorprendo al ver que ya es casi la hora de que Dante venga "dios ya es hora de que venga" empieza a temblarme el cuerpo solo de pensar que vendrá, pero no me atrevo a salir, no saldré de mi habitación y me meterá en la cama.

Después de despedirme de mi madre, le digo que me muero de sueño, apago la lampara de la mesita y me meto en la cama cuando oigo el timbre tapándome hasta la cabeza mirando a la pared.

Cuando oigo la puerta cerrarse, siento unos pasos entrar en mi habitación.

-Cris...- dice en voz baja -¿sigues despierto dice cercandose a mi. Siento sus amos encima de las mantas acariando mi cuerpo -Si. Si que lo estas- enciende la pequeña lampara y me quita la mantas despacio pero todavía sigo con los ojos cerrados
-Bebe yo... losiento. Es que... no puedo con Sergio- me acaricia la cabeza despacio -Amor por favor...- me dice en mi oído
-Me lo prometiste...- le digo mientras caen unas pocas lagrimas.
-Papi...-
-Me prometiste que te ibas a controlar tus celos- le sigo aspirando la nariz llorando.
-papi no llores por favor. Mirame... - le ignoro -mi amor por favor- me limpio las lagrimas y me giro para mirarlo -perdóname bebé- me dice acariando mi mejilla. Me siento en la cama, dejando los pies en el suelo. Se coloca entre mis rodillas y se acerca a darme un pequeño beso -intento controlarme pero tu amigo, me provoca...-
-El solo quiere protegerne como un hermano-
-ya le estás defendiendo otra vez- dice levantándose molesto
-ya te has vuelto a enfadar conmigo- le digo rompiendo a llorar frotándome los ojos ojos.
Se frota la cara con ambas manos y corre abrazarme.
-no me enfado contigo amor mío... es solo que soy un idiota- me dice al oído abrandome. Me acaricia la espalda con ambas manos, calmando mi llanto -ya papi... ya esta-
-últimamente siempre te enojas- le digo más calmado
-Mi amor es que me pone celoso que se ponga en ese plan. ¿a que viene que coquetee contigo conmigo delante Cristian?- dice tranquilo
-no sabe...- digo mirando al suelo.
-pero se lo imagina Cristian. La única vez que disimule fue delante de tu madre. Pero delante de él no lo hago simple y llanamente por que no me da la gana. ¿y a que viene que te invite al cine conmigo delante?-
- no lo hace para molestarte-
-si lo hace Cristian... y me molesta que le defiendas y no te des cuenta que todo lo hace para picarme- dice exaltado
-te estás volviendo a enfadar- le haciendo un puchero sin querer
-No me enfado...- respira hondo -No me enfado mi vida, solo quiero que me entiendas- dice acariendo mis brazos.
-reconozco que su actitud está siendo un poco rara- lo tenía que reconocer, cada vez que nos encontrábamos, se ponía muy cariñoso conmigo y el lo era pero no tanto.
-lo ves... papi te prometi que iba a controlar mis celos, pero si alguien se porta así contigo amor entiendes que me ponga celoso- lo miro comprensivo -me entiendas mi vida- me dice besandome -¿me entiendes?- dice con voz ronca recordándonos en la cama sin dejar de besarme. Me besa muy lento y sensual. Acariendo mi pierna levantandola hasta rozar mi rodilla en su cadera - no me gusta estar mal contigo mi amor- me dice besando mi cuello. Mete su mano por debajo de mi camiseta del pijama llegando a mis pezones endureciendolos -se ponen duros tus botoncitos cuando las toco- sube la camiseta hasta el pecho y baja su boca para lamer mis pezones -y cuando paso mi lengua más todavia- dice mirándome sonriendo de lado. La cosa se he empezado a calentar y no sabía cómo acabar, con el nunca lose.

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