Capítulo 22

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Nos sentamos en el restaurante y veo la amplia carta, nose que pedir pero tampoco tengo hambre asi que dejo la carta encima de la mesa y bebo un poco de agua mirando hacia todos lados menos enfrente. Llama al camarero con la mano y cuando el chico se acerca pide el mismo plato para ambos y el mismo postre. Lo miro inseguro y cuando el camarero se va le digo -No tengo hambre- el me mira y me dice calmado -no puedes estar tanto tiempo sin comer bebe, desde que hemos llegado nos hemos probado bocado- muevo mis manos inquieto por debajo de la mesa he intento decirle -Dante es que...- tira sus hombros para atrás molesto -Cristian- dice con sequedad -vale- le respondo. El camarero se acerca con dos platos y veo una ensalada de aguacate y pollo con una pinta increíble. Cojo el tenedor y empiezo a comer despacio mirando a todos los lados menos al frente, el come y de ves en cuando posa su mirada en mi comprobando que estoy comiendo. Cuando acabamos me sonríe satisfecho y llama al camarero para que se lleve los platos y traiga el postre. El camarero no tarda en traer el postre y me muerdo el labio al ver una tarta de chocolate con dulce de leche en el pequeño platito de porcelana. Dante me mira y sonríe con ternura. Empiezo a comer el pastel gustoso a la atenta mirada de Dante. Cuando acabamos el patre Dante pide la cuanta y salimos del restaurante.

Empezaremos a caminar por las calles de la preciosa ciudad de Londres y entramos en una pequeña tienda de recuerdos. Hecho un vistazo y busco algo que comprarle a mi madre y a Cami. Veo un montón de figuritas del ojo de londres, de cabinas rojas, banderas... me adentro más en la tienda quedando a Christopher en la entrada pendiente de cada paso que doy. Agarro una cabina y el ojo de londres y me acerco a la caja para pagarlo sintiendo la mirada celoso de Christopher. Resoplo fuerte y unas cuantas lágrimas caen sin que pueda evitarlo " ya estamos otra vez con los celos" -¿Estas bien?- me pregunta el chico detrás de la caja. Levanto la mirada y veo a un chico moreno muy atractivo que me ofrece un pañuelo de papel -Si gracias- le digo cogiéndole el pañuelo dándole el dinero. El chico coloca muy despacio las figuritas en una bolsa, miro hacia atrás y no veo a Dante pero si se da cuanta se pondrá celoso y no quiero ni pensar como reaccionaría -¿cómo te llamas?- me pregunta el chico interesado "Hay dios" le ignoro y me vuelve a decir -Yo soy Enrique ¿sales con alguien?- cuando le voy a contestar oigo la voz de Dante irritado -y a ti que te importa- dice cruzándose de brazos. Me hecho a temblar del miedo cuando me giro y veo la oscuridad en los ojos de Dante de la furia. Enrique lo mira y me pregunta burlandose -¿y este quien es?- miro a Dante y este contesta con amargura -quien sea yo de un de tu puta incumbencia- le agarra de la chaqueta y empiezo a respirar agitado, me quedo congelado -olle tío sueltame- le dice Enrique safandose de Dante con brusquedad -normal que te pongas así colega, es un bombón- dicen estirando el brazo dándome una nalgada. Dante levanta el puño pero me lanzo hacia el y lo abrazo empujandolo un poco para evitar una pelea -por favor no, por favor- le digo llorando el me abraza asesinando a Enrique con la mirada, agarra la bolsa y me saca de la tienda entra sus brazos. Al salir de la tienda y le digo -Dante...- digo entre lagrimas -te juro que le ignore, pero ha insistido, te lo juro- insisto entre lagrimas
-tranquilo papi...- lloro en su pecho asustado, por un momento pensé que iba pasar algo horrible. Intento relajarme pero el cuerpo no para de temblarme. Se separa de mi limpiando mis lagrimas con sus dedos
-tranquilo... - me repite despacio -vamos a casa de tu padre- Empezamos a andar hasta llegar a casa de mi padre. Entramos en la habitación, me pongo el pijama y sin decir nada me meto en la cama. Dante hace lo mismo y se mete en al suya dándome la espalda. Hago lo mismo y me quedo dormido enseguida. Estoy ha sido una noche bastante movida y caigo rendido de cansancio.

Me levanto muy temprano adolorido, me duele todo el cuerpo y me hago una ligera idea del por que. Sacudo la cabeza he intento no pensar en ello. Me levanto y veo que Dante aún está durmiendo plácidamente en su cama. Salgo de la habitación, entro en la habitación de mi padre y veo que también duerme como un tronco. Voy a la cocina, veo el reloj y me sorprendo al ver la hora. Son las ocho de la mañana. Cojo pan, algo de queso y un zumo que veo en la nevera y empiezo a comer en el comedor que esta en el salón, me pongo la música a todo volumen en los cascos y devoro el bocadillo de una sentada. Me sobresaltó al sentir una manos en mis hombros y levantando la mirada encontrándome con Dante que se se sienta en la silla de al lado, me quita los cascos y se acerca a darme un beso en los labios muy espacio y dulce. Cuando se separa de mi lo miro sin saber que decir -¿piensas que estoy enfadado por lo de ayer?- asiento esperando su respuesta - no amor mío no te preocupes- me dice sonriendome sincero. Me da un beso en la frente y se levanta de la silla
-Me voy a vestir. ¿Por la noche quieres hacer algo?- me encojo de hombros y le respondo - lo que quieras- entra en la habitación y respiro aliviado.

Termino de desayunar, entro en la habitación y veo que Dante no se ha vestido y ha esta acostado en la cama poca arriba tecleando en el teléfono. Cierro la puerta, me acerco a mi cama y cojo mi maleta para sacar ropa para vestirme. Dejo la ropa en la cama, se gira a mirarme y mimoso me dice -ven, acuéstate conmigo- obedezco y me acuesto justo a el. Me abraza con fuerza y coloco mis manos en su pecho escondiéndo mi cabeza en sue cuello. Empieza a repartir pequeños besos por toda mi cara hasta que llegar a mi labios, besandome despacio llevando su mano a mi cintura y la otra a mi nuca intensificándo el beso aún más. Me atrae hacia el sin dejar de besarme y me abraza con ambos brazos. Se separa de mi, roza mi nariz con la suya y se le escapan unas cuantas lagrimas -Cuando tu madre me dijo que ibas a venir a Londres a vivir mi mundo se me cayó. Me volví loco y me dio miedo perderte ¿sabes?- me dice apenado. Bajo la mirada y continua -Me mataba la idea de que te alejaras de mi- me coloca encima de el y sigue -No puedo vivir sin ti Cristian... Estoy enamorado- me acurruco a su cuerpo y lo abrazo ronroneando agusto. Últimamente me dice mucho que no puede estar sin mi, y sinceramente nose si podría aguantar estar sin el.

Escuchamos que llaman a la puerta, me levanto de golpe de la cama y me siento en mi cama       -pasa Papa- le digo a mi padre. Dante se sienta en la cama con la espalda en el cabezazo de la cama y mi padre entra a la habitación con cautela -buenos días chicos- sonríe y me dirijo hacia mi padre abrazandolo con fuerza -buenos días papa- me suelta y me dice -¿qué tal anoche?- dice en entrandose y sentándose en mi cama -Bien... nos fuimos a cenar y dimos una vuelta- contesta Christopher sentándose en el borde de la cama -Me alegra mucho y ¿esta noche algún plan?- le dice mi padre a Dante dándole un pequeño golpe en la pierna divertido. Dante se ríe y me mira esperando a que conteste -Estabamos pensando donde ir- respondo jugueteando con mis dedos. Mi padre se levanta de la cama y nos dice -Hijo, voy a descansar un poco más y cuando me levante comeremos juntos en una pizzería que esta cerca de aquí. Yo invito chicos- me da un beso en la frente y sale de la habitación - Tu padre cada vez me cae mejor- dice Dante riéndose y levantándose de la cama para vestirse.

Empezamos a comer la gran pizza mientras que Dante y mi padre empiezan una conversación de manera fluida y relajada. Como si se conocieran de toda la vida. La situacion es sumamente extraña pero no me incomoda -Y tu hijo ¿cómo van los estudios?- trago el trozo de pizza y respondo -Bien papá... llevando los exámenes como puedo- Dante niega con la cabeza y dice con ímpetu -Que modesto Cristian. Ha sacado con muy buena nota los dos últimos exámenes que ha hecho- mi padre me mira gratamente sorprendido y me respondo
-En hora buena pero cuéntame esas hijo. Me alegro mucho por ti, estoy orgulloso- me dice mi padre posando su mano en mi mejilla -Y tú Dante ¿estás estudiando?- bebe de su refresco y le contesta -si, estoy en tercero de Marketing- mi padre pone los ojos como platos de la sorpresa -vaya pero ¿cuantos años tienes chico?- Dante ríe y responde -Tengo 23 años Max- le da una mordida a su pizza ya responde -vaya... Dante yo con 23 años estaba casado con su madre y estaba trabajando. Muy bien chico tienes que labrarte un futuro- ambos ríen mientras yo hago una pequeña mueca con mis labios masticando el trozo de pizza que tenía en la boca Dante me mira de reojo bebiendo de su refresco pero le evito la mirada prestando atención a un tráiler de una película que me moria por ver en la televisión de la pizzería. El se da cuanta de que lo estoy haciendo aposta y debajo de la mesa aprieta mi pierna divertido con fuerza haciendo que lo mire -Y ¿tu madre como esta? pregunta mi padre haciendo que lo mire -ella... esta bien, ya sabes trabajando va de un lado al otro- mi padre asiente convencido -siempre de un lado al otro...- mira el reloj y se impresiona al ver la hora -hay dios llegare tarde al trabajo si no me doy prisa. ¿Viene conmigo o se quedan por hay?- Cuando voy a contestar Dante se me adelanta y dice -Iremos contigo y luego iremos a dar una vuelta ¿verdad?- pregunta mirandome, yo asiento con energía convenciendo a mi padre y nos levantamos cuando mi padre paga la cuenta.

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