🍂 𝒞𝒽𝒶𝓅𝓉ℯ𝓇 ℱℴ𝓊𝓇 🍂

1.2K 178 48
                                    


🍂 𝓒𝓱𝓪𝓹𝓽𝓮𝓻 𝓕𝓸u 𝓻 🍂

🍂 𝓣𝓱𝓲𝓷𝓰𝓼 𝓱𝓪𝓹𝓹𝓮𝓷𝓼 🍂

El clima era de los peores que Nieves había vivido. El pueblo completamente vació salvo los niños viendo como varios copos de nieve caían. La chica estaba emocionada y realmente nerviosa, jamás había ido a un psicólogo, la chica podría similar que era similar que ir a un médico, te preguntarían cómo estabas, te escucharían y te ayudarían.

A la distancia vio la casa árbol de Guillermo.

Quería verlo.
Necesitaba verlo.
Deseaba hablarle.

Esas eran sus mayores prioridades junto con la junta que tendría con el psicólogo calvo. Llegó al edificio del consultorio temporal de Álvarez. Entro, sentándose en la sala de espera. Eso le causaba más nervios, sentía como se mordía el labio para calmarse, cerró los ojos con la intención de calmarse pero resultaba casi imposible. La puerta del consultorio se abrió y la joven se sentó, ¿como sería el doctor? Conocía un poco al tal Raúl Álvarez pero no conocía su versión psicólogo. De la puerta salió un joven de largos cabellos naranjas, ojos verdes esmeraldas y piel blanca, el ex alcalde, Lolito Fernández. El cual la miró.

—¿Tu eres Nieves? ¿Verdad?—preguntó interesado por la joven del mismo color de cabello sólo que la chica lo tenía un poco más claro.

—Si, soy yo.—contesto la muchacha levantándose de inmediato.—Supongo que usted es Lolito Fernández.

—El mismo, ¿y esa novedad de que no tienes al oso contigo?—la chica lo miro con una ceja le levantada.—¿Ya sabes lo de Rubius y Vegetta?—Nieves asintió algo fría, y no era por el clima.—Lo lamentó en serio, nunca tuve los huevos suficientes para decirte en cara.

—Nadie tuvo los huevos suficientes para decírselo a Nieves ni a Willy.—aseguró Auron parado al lado de Lolito.—Supongo que se merecen una disculpa y una cena.

La conocida cara llamada Póker Face se hizo presente en el rostro de la joven. Lo que menos le apetecía era parecer una chica que no conocía nada de nada en una cena liderada por un psicólogo y el ex alcalde, aunque la idea no sonaba tan mala.

—Si, una cena en casa de Luzu, o de Alex, tienen vistas preciosas.

—Pero la casa de Luzu es un asadero humano.—comentó Lolito moviendo la mano como si intentase espantar algún bicho volador.

—¡Pero es mona!—grito Auron intentando defender la casa de su amado.

Al parecer, Lolito lo noto y le dijo. Así era una pelea, lo único que esperaba es que no sacaran sus espadas e intentaran matarse, no, ni uno de los dos héroes era capaz de hacerse daño entre sí. Bueno, después de que se quedo pensando, tal vez si podían llegar a hacer una que otra broma pesada como explotarle el invernadero al vecino, matarle todas las vacas, secuestrar mascotas, lo casual.

—Bueno, Lolo, aún tienes que ir a pescar con Alex y Fargan, me los saludas...—le dedico una mirada amistosa a la joven que sólo se dedicaba a debatir en su mente sobre quién ganaría un duelo de espadas.—...yo me ocuparé en atender a la señorita, ¡NOBITA!—grito Auron a todo pulmón.

—¡¿Que quieres, Raúl?!—grito la mujer asomando solamente su cabeza.

—Le podrías decir a Lolito el método de pago. Voy a entrar a sesión con la joven Nieves, ¿vale?

Nobita asintió viendo a Lolito el cual se acercaba sacando su billetera.

—¡Lolo! ¡Nos vemos en casa de Luzu! Llegaré tarde, iré a avisarle a Willy

Willy... así que el también era invitado. La chamarra, la dichosa chamarra no la tendría que llevar por más que Nieves quisiera. No quería devolvérsela, e igual y ella le daba una chamarra suya. Era ridículo ponerse tan nerviosa por unas chamarras, o eso hubiera pensado su antiguo yo pero ahora, su nuevo yo sólo le importaba la chamarra con el dulce  olor a Guillermo.

—...Dulce Guille...—pensó, de inmediato se sonrojó.—¡NO!—rápidamente corrigió.—...Dulce aroma a Guillermo... ¿o dulce olor de Guillermo?

Sus pensamientos se desvanecieron cuando Auron la saludó, ella correspondió el saludo y el chico la invitó a entrar al consultorio. Así que tomó asiento, el sofá era cómodo, mucho más de lo que esperaba, al parecer el psicólogo no quería un consultorio de quinta.

—Bueno, Nieves... yo soy el doctor Raúl Álvarez, pero me puede llamar Doctor Auron. ¿Vale?—el primer paso del psicólogo Abduzcan era ganarse la confianza del paciente, en sus primeros días eso era difícil pero con el paso del tiempo se hizo un experto.

—Claro.

—¿Algún nombre que usted quiera utilizar?

Nieves se lo pensó, le había encantado Ni pero ese solo lo utilizaba Guille por lo que negó con la cabeza con una sonrisa boba.

—No, no tengo ni uno.

—Vaya lastima, ¿cómo está?

—Bien, muy bien, ¿y usted?

—Igual, ya eh hablado con Rubén de su separación, aunque él no quiere hablar del tema, por lo que supongo que usted está aquí por el.—la chica asintió.—¿Usted ya habló con alguien?

—Solo con Akira.

—¿Solo con ella?—Nieves asintió.—Pues vaya, ¿y? Conoces a alguien que no sea Akira y Rubius?

—Si, si conozco a un chico, y pues a usted...—balbuceó viendo por la ventana.

—¿Un chico? ¿Eh?—preguntó con la ceja levantada y una sonrisa.—¿Se puede saber quien es?

—No, aún no. ¿Podemos dejar de hablar de G...—a nada de decir "Guillermo" se apresuró a corregir—:del desconocido?

—Pues vale... comencemos, ¿que te hizo venir aquí?

Nieves le comentó la situación que había vivido con Rubén, sintiéndose una boba cuando hablaba lento, claro que omitió las partes de Guille. No le gustaba la idea que uno de sus amigos se enteraran de que Nieves, la ex de Rubius, uno de los nueves héroes, anduviera sintiendo nuevas cosas dentro de sí por Guillermo Díaz, otro héroe. Por que si, estaba empezando a tener ese famoso hormigueo por todo el cuerpo, el sonrojó en sus mejillas y no parar de darle vuelta al asunto. Se repetía a sí misma "Es sólo un amigo" por llamarle de algún modo "Un chico que hablamos sólo un día, bailamos y nos conocimos". Nieves había visto series donde se enamoran al primer día, o con tan solo con mirarse.

Si el amor de series existe
sería una jodida locura...

🍂——————————🍂

Lamento mucho la espera, sólo
que me re-vicié a la Casa De Papel
Me perdonan ¿? 🥺👉🏻👈🏻

🍂——————————🍂

🌻ℬℯ𝓈𝒾𝒹ℯ ℳℯ🌻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora