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El silencio se postra en aquel pequeño y humilde parque. Me volteo y veo a Aiden relajado, con las manos en sus bolsillos. Algo estropeado sale de los labios de Tana y Aiden se dedica a mirarlos a cada uno de ellos. Cuando su mirada reposa en Marcus, este aprieta los puños y lo mira con todo el odio que puede.

–Thalia...

–¿Que demonios hace este tipo aquí?–ruge Marcus.

–Dime que no.–dice Tana–¿Él es parte del trato?

–¿Pueden confiar en mi?–les pido.

–Veo que los encontraste.–dice Aiden mirando a Pos, este lo mira extrañado con la cabeza ladeada–Me preguntaba cuanto tiempo te tomaría.

Nick da un paso al frente llamando la atención de todos y se cerca a Aiden. Todos pensamos que iba a golpearlo pero solo se posa frente a él.

–¿Tu sabías que estaba vivo?–musita el irlandés.

Y entonces todas las piezas cayeron en su lugar, las palabras de Aiden parecieron tan sencillas como nunca y unas ganas inmensas de tirarlo por un risco me consumieron.

–¿Hace cuanto lo sabías?–vuelve a preguntar.

Ariel mira con gran decepción al que una ves fue mi mejor amigo y quizá este no fue el mejor plan. Creo que debí dejar las cosas como estaban y hacernos cargo por nuestra parte de ese tal Vincent.

–Un par de años...–y ahí está el golpe de Nick.

Aiden da unos pasos atrás aturdido y Nick avanza hacia él. Miro automáticamente a Marcus.

–Sepáralos.

Él solo sonríe de medio lado mirando la escena.

Claro, que demonios iba a hacer él.

–Dime Aiden,–Nick lo agarra del cuello de su chaqueta–¿Como se siente ser tú?–lo golpea de nuevo pero esta ves Aiden se recompone y lo golpea también.

–Chicos ya basta...

–¿Como vives contigo mismo?–gruñe Nick rodando por el suelo con Aiden.

En algún momento Nick queda encima de él y le da un fuerte golpe en la mandíbula.

–¡Te hubieras muerto aquella noche!

Aiden lo empuja con una pierna y se endereza a una velocidad sobrehumana para golpearlo y Nick logra esquivar algunos golpes.

–¿Quieren parar?–exclamo pero me ignoran.

Claro... ¿Que estaba pensando?

–Déjalos,–dice Marcus–ese idiota se lo tiene bien merecido.

Con unos cuantos golpes más se quedan mirándose con odio y unos cuantos metros de distancia, Nick escupe un buche de sangre y uno de los pómulos de Aiden brotaba demasiada sangre.

–¿Terminaste con él?–pregunta Marcus–Creo que es mi turno.

–Todo tuyo.

Ruedo los ojos y corro para avanzar pero Marcus logra atinarle un golpe antes de que me ponga en medio. Aiden había acabado en el suelo y para mi sorpresa se estaba riendo por lo bajo. Con su rostro lleno de sangre parecía un psicópata.

–Bájale a tu enojo, Marcus.–con una mano en su pecho lo empujo un poco hacia atrás ya que ponía resistencia.

–Si...–Aiden hace una mueca poniéndose de pie– Escúchala.

–Hijo de...

–¡Marcus!–exclamo–¡Para atrás!

Cuando sus ojos caen en los míos veo que duda. El resentimiento que tiene con su hermano es demasiado y yo quiero saber que lo provocó. ¿Que hizo que la persona más cercana a él sea la que más lo odia?

Tú (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora