Tú (Pausada)

21

Maratón 2/3

–Y eso te hace una de las personas más fuertes en este lugar.–continúo y lo agarro por los hombros–Aunque tengas miedo de darle una nueva oportunidad al amor.

Ops.

Tenía que decirlo.

Su rostro baja automáticamente al mío y frunce el ceño poniéndose nervioso.

–¿Qué?

–Vamos, sabes de lo que hablo.

–No, no tengo ni idea.–se rasca la nuca.

Sonrío.

–De acuerdo, haré como si nunca lo hubiera dicho.–le enseño mis manos en señal de paz.–Voy a mi coche, avísame cuando estemos listos para partir.

Salgo del despacho pero me detengo en el pasillo al escuchar una conversación que no es de mi incumbencia ni escuchar, ni interrumpir.

–...con Thalia.–escucho la voz de Marcus y ahora si quiero quedarme a escuchar que posiblemente pueden estar hablando de mi.

–No.–reconozco la voz de Ariel.

–Pero...

–Te dije que no Marcus, confía en mi.

–¿Porqué de todas las personas tienes que ser tú?–pregunta ahora exaltado–Si vas solo a ese edificio no sabes lo que puede pasar, y no tienes apoyo hasta que Tana y yo terminemos.

Hay un segundo de silencio antes de que el otro hable.

–Nene, he arriesgado mi vida desde mucho antes de conocerte. Se lo que hago y como lo hago. ¿No decías que extrañabas la pelea? Pues vamos.

–Si pero no así... no si tu me vas a costar.

Hay un silencio y por un momento me replantee la idea de mandar a Ariel solo. Se lo eficiente que es como para poder salir de allí respirando pero quizá el mal presentimiento que tenía es debido a él. A la parte que le toca.

–Años atrás–Ariel le toca el cabello–, ¿recuerdas la pelea que tuvimos porque no querías aceptar que te pasaba conmigo?

–Ajá.

–¿Quién ganó?

Escucho un gruñido de molestia por lo bajo y me inclino solo un poco para poder ver. Marcus estaba pegado a Ariel quién estaba de espaldas a la pared.

–¿En serio? ¿Crees que eso me va a hacer sentir mejor?

Ariel sonríe.

–Necesito que confíes en mi.

–Lo hago. Pero es en ellos en quién no confío.

–No te pido que lo hagas, te pido que confíes en mi y en Thalia. Sus planes nunca fallan y hoy le ponemos un alto a todo esto, pase lo que pase.

–Nene...

–Pase lo que pase.–dice más firme intentando que entre en su cabeza.

Hoy le ponemos fin a esto, luego de esto tengo una vida común y corriente.

Pase lo que pase.

Ariel mira directo a los ojos de Marcus y noto como la duda cruza por sus ojos.

–Mira, no tengo ni la más remota gana de decirte esto y tampoco es de mi incumbencia pero... ¿No crees que esto sería un buen momento para hablar...?

Marcus niega.

–No.–interrumpe–Eso no es mi familia.

Aiden.