Dark destiny

Trigésima novena parte

Habían pasado el primer año de Tetsuya con Chuuya y Dazai. Nyoko insistía en hacer a su pequeño hermano comer pastel pero el bebé aun no podía comer muy bien. También quería jugar con Chuuya y su habilidad pero Chuuya le dijo que no podía moverse, definitivamente Nyoko quería jugar así que... Dazai se arriesgó. Juro jamás volver a intentar saltar de una ventana después de jugar con Nyoko, pues quería jugar así con sus hijos algún día.

Los días seguían pasando, Chuuya no se movía para nada, Mori tuvo que llegar a un trato muy estricto por la ayuda de Yosano, realmente Dazai le pidió a Yosano el favor, ella acepto pero como no le dijeron nada al líder de la mafia esté obviamente estaba preocupado por su mejor ejecutivo. Todo resulto excelente para la agencia.

Nacieron a finales del verano, en un hospital aliado de la mafia, eran trillizos. Lo cual sorprendió a algunos. Nyoko jugaba con Kenji y Kunikida. Tetsuya dormía en los brazos de Akutagawa mientras Atsushi leía un libro para sus clases – ustedes se han completado bien ¿no? – cuestiono Fukuzawa alegre

― Bueno, es eso o que le vaya mal – menciono Atsushi con una sonrisa

― ¿seguro que no quieres ser parte de la agencia?

― Muchas gracias Fukuzawa-san, pero soy feliz cuidando de mi familia

― Pronto es su graduación – añadió Akutagawa – y uno de sus profesores quiere que trabaje en una librería que heredo

― Solo libros de estudio, le sugerí la alianza con Inoue-san, parece que le gusto tanto la idea de hacer su librería un café también que quieren que lo maneje yo

― Suena increíble Atsushi

― Sigue así mocoso

― Gracias a ustedes por siempre estar presentes... A pesar de que me case con un mafioso

― Bueno han pasado tantas cosas, eres de la familia Atsushi – añadió Fukuzawa - No importa de donde venga tu pareja, haz hecho mucho por la agencia

― Se los agradezco tanto

― Naomi-neesan es una nee-san de verdad – dijo Nyoko alegre

― Por supuesto – le sonrió Naomi

― Podras contar con el apoyo de la mafia para promocionarla – menciono Mori

― Realmente no importa si alguno de ustedes van, solo mantengan separadas las cosas – añadió Atsushi

― Esté niño sigue sin temor a nadie ¿eh? – menciono Ozaki – mi preciosa Kyouka-chan disfrutará del lugar

― ¿quiere otro café con leche y conejitos?

― Es su favorito

Aunque Atsushi se llevaba bien con la mafia y la agencia, manejaba una regla "todos son personas" no importaba quien fuera, los trataba por igual con el respeto merecido de cada uno. Sabía que podía contar con cualquiera de ellos.

Todos podían ver a los trillizos desde una ventana, Chuuya estaba en cuidados intensivos pero fuera de peligro gracias a la doctora Yosano. – son tan lindos...

― Felicidades Dazai – dijo la agencia

― Fue... algo realmente duro – menciono agotado – Chuuya está completamente cansado

― Bueno, aunque no es imposible es sumamente difícil que un alfa dé a luz

― Está bien Dazai – le sonrió Ranpo – sigue así, todo estará bien, además puede que te haga competencia