Hacían unos pocos minutos desde que la pelinegra había terminado por fin de peinar su cabello aún húmedo, consideró que tal vez tomar otra ducha podría ser un medio lo suficientemente factible para alejar toda la tensión que sé había apropiado de su cuerpo en la mañana; cuándo apenas, y sé dispuso a levantarse para dar comienzo a su día, él cuál prometía ser igual que los últimos: tediosos, aunque sumamente interesantes e inesperados. Estaba más que convencida que éste no podía haber transcurrido de peor forma. Para empezar, ambas, junto a la pelirroja, no habían asistido al Instituto por haberse quedado dormidas... Sí, dormidas. En su defensa, no era algo que habitualmente le pasase, pero en las utlimas semanas, había estado descansando considerablemente mal, lo cuál claramente no favorecía en lo absoluto a su estado anímico. Desde que era pequeña, siempre sé había considerado una persona verdaderamente responsable, por lo que no acudir al Instituto simplemente por no escuchar sonar su despertador, había contribuido en gran parte a que su mal humor sé intensificase, y alcanzase su punto más alto. Al contrario que ella, desde que tiene memoria su amiga siempre había sido de sueño profundo, por lo que no era realmente una sorpresa él que no hubiera escuchado la alarma.
Caminó hacia la espaciosa cama que se hallaba en un rincón de la habitación, para poder descansar sobre ella unos minutos. Últimamente la extrema fatiga, y él sumo agotamiento eran quienes reinaban sobre su cuerpo, gracias a esto, sintiéndose extremadamente exhausta la mayor parte del tiempo. Sin poder evitarlo, paulatinamente sus párpados sé fueron cerrando, y su semblante sé relajó. Estaba muy asombrada por los diversos cambios que había atravesado su vida en tan poco tiempo. Volver a relacionarse con Lisa luego de su amistad completamente rota y resquebrajada, fue algo que jamás hubiera previsto ni en sueños, sin embargo, debía admitir, que por más qué no le gustase admitirlo, no era algo qué ciertamente le desagradase como tal; menos después del inolvidable beso que habían compartido ambas hacía apenas unos días, el cuál no encontraba manera de borrar de su mente traicionera, y sin siquiera percatarse, una sonrisa embobada sé había instaurado en su rostro nuevamente, algo bastante habitual desde que Lisa sé convirtió en la dueña de todos sus pensamientos.. Esa rubia, que parecía no darse cuenta aún de la catástrofe que estaba ocasionado en su mundo, y para su desgracia, también en sus emociones.
Llevaba encima simplemente una toalla, ayudando a cubrir su cuerpo todavía desnudo. Segundos antes de ingresar a la ducha, había recibido un inesperado mensaje de Jackson, comentandole que pasaría por ahí en unos minutos, pues "moría de ganas de verla" palabras textuales del chico. Pensó seriamente en rechazarlo, pues creía saber las verdaderas intenciones de su novio, hacían algunas semanas que no habían tenido intimidad alguna, por lo que no le extrañaba en lo absoluto las repentinas ganas que tenía de verla, más bien, de lo que sé moría en realidad era de ganas de follarsela, sin embargo, el negarse hubiera provocado otra discusión, seguramente igual de exhaustiva que el resto de ellas, de la cuál no tenía ánimos para ser partícipe, por lo que finalmente sé limitó a contestarle con un simple "Está bien", en el momento, ya encontraría la manera de quitárselo de encima.
La temperatura había comenzado a bajar considerablemente, así que sé dispuso a vestirse de una vez antes de contraer un posible resfriado; no tenía ni la más mínima intención de arreglarse, y menos para él, así que un pijama le había paracido la opción más acertada, y por supuesto la más cómoda entre todas sus prendas.
Pasados unos minutos, Jennie se encontraba nuevamente sobre la cama, sentada en una esquina de ella con una frustración patente en él rostro, frotándose la sien lentamente con dos dedos, y maldiciendo por lo bajo a su mala suerte, magnífico día de mierda. Había buscado y rebuscado en cada espacio de su habitación, sin embargo, ni un sólo rastro de su pijama, un momento.. seguramente Jisoo sabe dónde está, tal vez me lo escondió cómo la última vez, razonó la pelinegra finalmente, por lo que sé levantó entonces de un brinco de la cama, y sé dispuso a ir a buscarla. Bajó las escaleras con suma precaución, para evitar algún tipo de accidente indeseado, y en el último escalón, sé acomodó un tanto la toalla que aún cubría su cuerpo, no consideró que fuera necesario cambiarse, ya qué simplemente era Jisoo, así que pensando en los posibles lugares de la casa en los que podría estar su amiga, optó principalmente por la cocina, estaba segura que la encontraría allí comiendo algo de pollo, o algún tipo de comida, pero que seguramente contenía pollo, por lo que se encaminó hacia allí.
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It had to be you ; [JENLISA]
FanfictieLuego de que Lisa decide inesperadamente apartar a Jennie de su vida, y de sus planes a futuro sin dar ninguna explicación, esta debe lidiar con ello, y el repentino odio que la rubia empieza a profesarle. A pesar de su ya rota amistad, continúan co...