Internado PNE

Capítulo 27: Jugada Final.

Cuando todos llegaron al bosque, marchito en sí, Ben deja en el suelo a Rachel con cuidado y todos los demás se sientan alrededor.-¿Cómo haremos esto?-Preguntó Óscar y ninguno supo cómo responder.

-No se me ocurre cómo hacer que ustedes usen su don sin dañar el ambiente y cooperar con Rachel-Dijo Olms pensativo.

-Creo saber como-Habló Rachel. Todos la miraron.

-Pues entonces dinos-Intervino Lis.

Rachel tomó aire para hablar.-Ustedes pueden poner sus manos en mi espalda y transferirme su don mientras yo paso el mío junto con el de ustedes a la Tierra-Explicó.

Todos quedaron en shock.-¿Cómo estás segura de que eso va a funcionar?-Preguntó Ben cruzado de brazos.

Rachel sonrió a medias.-Porque... en un entrenamiento... Fui capaz de absorber y devolver el don de Dereck y... De un chico llamado Max.

Olms asintió comprendiendo la situación. Rachel regenera y degenera, por lo que no le parece extraño que también pueda contener la materia de los otros elementos.-Entonces está dicho, hay que proceder ahora.-Ordenó.

Todos se pusieron detrás y a los lados de Rachel para colocar sus manos en su espalda y hombros. Rachel se acomodó poniendo ambas manos en la tierra seca y quebrada, concentrándose solamente en eso y regenerar. Los otros chicos comenzaron a pasarle energía a Rachel y ella comenzó a mandar todo eso y su propia energía a la Tierra.

Olms y Ben miraban todo desde atrás mientras tanto.

Por otro lado, las cosas en el Internado iban mal. Otros chicos habían logrado salir junto con el personal del Internado, ponían fuerza en volver y luchaban. El presidente del Internado salió con varios escoltas al exterior y sonrió para sí mismo, ya que sabía que todo el proceso había comenzado.

Asimismo, los supervivientes al darse cuenta del alboroto, habían ido en grupos hacia el Internado para ayudar a acabar con los soldados. Las calles se habían vuelto un campo de lucha, y el Internado un lugar inseguro para cualquiera.

Nadie se había dado cuenta de nada, hasta que los rayos del sol les pegó en el rostro. Todos se detuvieron y miraron el cielo, estaba azul y el sol brillaba fuertemente. Miraron a su alrededor y había claridad, las plantas cobraban vida y sentía el aire en el rostro.

-Todo salió como lo planeado, o al menos una parte.-Dijo el Presidente del Internado observando su alrededor.

Rachel estaba sudando y temblaba, no sabía cuánto iba a poder soportar y tampoco podía fijarse en si estaba funcionando lo que había planeado, veía borroso. Se decía a sí misma que no podía fallarles, no después de todo lo que habían logrado.-Es suficiente, Rachel-Escuchó la voz de Ben. Subió la mirada, sonrió y perdió el conocimiento cayendo de lado en el suelo.-¡Rachel!

Olms se acercó y le midió el pulso, estaba yendo más lento de lo normal y su respiración era escasa. Olms sacó de su mochila una mascarilla con una bomba de oxígeno y se la colocó a Rachel. Asimismo sacó la inyectadora, y le inyectó la vacuna que contrarrestaría a la de inmunidad. Ya Rachel había cumplido su parte del trato, ahora le tocaba a él salvarle la vida.-Sólo resta esperar. Si esto no hace que mejore... Entonces en definitiva morirá.-Habló.

El grupo de chicos lucía triste por esa noticia, sin embargo se encontraban alegres de que la Tierra había vuelto a cobrar vida. El bosque donde estaban había florecido y se escuchaba el agua del río a lo lejos. Ben cargó a Rachel agarrando la bomba de oxígeno también.-Debes vivir, se lo prometí a tus hermanos-Dijo en voz baja, a lo que todos volvían a la Ciudad.

(...)

En el almacén, se dieron cuenta del silencio sepulcral que se hizo de repente. Y quedaron sin palabras al sentir la brisa y ver cómo los rayos del sol entraban por los ventanales. Sam fue la primera en salir corriendo a ver el exterior, también la siguió Anny, quien se deshizo de la mascarilla y pudo respirar con normalidad. Detrás venían el resto junto con Lilian y Dereck, quién había despertado. Al salir y observar el mundo como antes, les sorprendió mucho, sobre todo a Anny, quién nunca lo había visto hasta ahora.

Caminaron hasta las calles y se dieron cuenta de que estaba el bando de SúperH y los otros bandos aliados, los soldados y varios niños, adolescentes y adultos del Internado. Nadie peleaba, simplemente se habían detenido a observar todo a su alrededor.

-Creo que es buen momento para decir que todo esto es gracias a mí-Vociferó el presidente del Internado.

Todos lo miraron. Fue en ese entonces en que el grupo de Rachel, Ben y Olms llegan y caminan hasta ellos.-¡Eso no es cierto!-Habló Ben.-Todo es gracias a esta chica que llevo en mis brazos y al resto de chicos que vienen conmigo y el doctor.

Ahora eran el centro de atención, Lilian, Dereck, Alexander y Samantha miraban con preocupación a Rachel.

-¡Yo los creé!-Gritó el Presidente del Internado.-Sin mis ideales nada de esto hubiese pasado.

Olms se interpuso.-Eso es cierto, pero usted solamente ha esparcido sufrimiento a jóvenes y al personal que trabaja en este Internado desde hace años.-Dijo.-Ya no tienen por qué seguir sus órdenes, la Tierra es como antes... O al menos volvió a cobrar vida-Expuso.

Los soldados se miraron entre ellos y observaron al resto de los presentes que no ponían fuerza ni tenían ánimos de pelear. Luego posaron sus miradas en el Presidente del Internado.-Supongo que me lo llevaré a las celdas y ahí permanecerá hasta los últimos días-Habló uno de sus escoltas y agarró sus manos por detrás cómo le había ordenado anteriormente con Ben y Rachel.

-¡Están cometiendo un error! Sin mí. ¿Quién dirigirá el nuevo mundo?-Preguntó. Nadie le respondió y sus escoltas se lo llevaron.

Olms ignoró la situación y se enfocó en Rachel.-Ben, acompáñame adentro, hay que ponerla en una habitación con suero y el debido tratamiento.-Ben asintió.-Mientras tanto... Quiero que los demás doctores se encarguen de contrarrestar la vacuna de inmunidad al resto de jóvenes del Internado. Así volverán a la normalidad, pero deberán tomar descanso dentro del recinto.-Explicó y se dirigió con Ben adentro.

El resto del personal se puso en marcha a reunir a los jóvenes que estaban adentro y llevarlos para colocarles la vacuna y darles el tratamiento adecuado. Los psicólogos también fueron con su niño asignado.

-Dereck, debemos entrar nosotros también.-Habló Lilian. Ernesto se apareció frente a Dereck para llevárselo consigo y los tres entraron.

Samantha y Alexander no sabían qué hacer. El resto de los supervivientes estaban conmocionados por todo lo sucedido.-Supongo que tenemos que esperar a que nuestra hermana se recupere-Dijo Sam a Alex. Él asintió.

-¡Por ahora todos volveremos a dónde pertenecemos!-Exclamó Leo.-Luego se decidirá cuando los del Internado estén en condiciones óptimas, quién dirigirá el nuevo mundo y cómo se moverá todo a partir de ahora.

Dicho esto, todos comenzaron a volver a sus refugios para recuperarse de lo sucedido. A excepción de Samantha y Alexander. Ellos querían saber qué pasaría con su hermana, pero no estaban seguros de querer entrar al Internado, así no fuese un lugar malo ahora.

-Deberíamos volver pero... No podemos irnos y dejar a Rachel aquí-Dijo Sam.

Alexander asintió.-Tienes razón... Pero por otra parte, ella tiene a personas aquí que la están cuidando... Nosotros deberíamos resolver nuestros asuntos y volver más tarde.-Tomó la mano de su hermana y la hizo caminar con él devuelta al edificio.

-¡Pero Lex!-Se quejó.

-Volveremos más tarde, tranquila.