SESENTA Y SIETE.

603 90 11
                                    

Cuatro meses después; Octubre, 2021.

╔═══════════════════╗

Jeon Jungkook.

╚═══════════════════╝

La brisa del agua de lluvia roza con la piel descubierta de mi cara y manos. Puedo observar que las hojas de los árboles y los arbustos se han vuelto pequeñas cascadas de agua por la lluvia torrencial que ha comenzado a caer desde hace una hora y el goteo del techo contra la madera del piso me hace suspirar por la tranquilidad del lugar.

Cierro los ojos por un momento, sintiendo el clima acariciar mi cuerpo con suavidad. Los días lluviosos son mis favoritos, y me hacen recodar muchas cosas de mi pasado, cuando aún los seres humanos eran normales y el planeta tierra no estaba muerto como ahora lo está.

De pronto me siento nostálgico, estar solo aquí afuera me hace sentirme vacío con el paso de los minutos. Y sé qué es le falta al hueco en mi corazón, Hoseok

No puedo dejar de pensar que han pasado más de cuatro meses desde que Hoseok se fue para siempre.

Siento mis ojos picar, pero no quiero llorar en silencio otra vez. La muerte de mi mejor amigo me afectó más de lo que creí, y lo único que me mantiene distraído de ese triste pensamiento, es Jimin y las constantes expediciones a la ciudad por comida.

Suspiro mirando hacia mis botas llenas de lodo; Al lado de ellas, está la colilla de mi último cigarro que guardé para una ocasión como éstas, una donde puedo descansar y estar relajado por el sonido de la naturaleza sin tener que cuidarme la espalda cada segundo. El pórtico de la cabaña me cubre de la lluvia, lo cual agradezco, puesto que no quiero pescar un resfriado y terminar muriendo por hipotermia o algo peor.

—Jungkook, ¿Qué haces afuera? Te vas a enfermar —Dice Jin, saliendo de la casa. Tiene puesta una enorme chamarra y puedo ver que está tiritando levemente por el frío —. Tienes la nariz roja, ¿Estabas llorando?

—No me digas que tienes frío, Jin. —Le digo, con una pequeña sonrisa —. Y no, no estaba llorando. Por el fío mi piel se pone rojiza de algunas partes —. Miento, pero él asiente rápidamente y puedo ver que desvía la mirada hacia el frente, así que yo también lo hago. A lo lejos, puedo observar que hay un infectado caminando lentamente, hundiéndose en el lodo y tambaleándose con cada paso que da. No voltea hacia acá por el ruido de la lluvia y además por la distancia, así que vuelvo a bajar la guardia para mirar de nuevo a Jin.

De todos modos, aunque él nos llegara a ver, las vallas de metal le impedirían cruzar el jardín lodoso —que en primavera era hermoso por todas las flores— hasta nosotros, al igual que las trampas de madera puntiaguda que fácilmente podrían atravesarlo antes de que pudiera pasar.

—¿Y Jimin? —Pregunto metiendo mi manos en mi chaqueta de cuero.

—Está en la habitación de Yoongi. No sé de qué estén hablando pero Taehyung tampoco tiene permitido entrar —Dice antes de soltar una risita, por lo que yo bufo en respuesta. 

—Han estado juntos todo el día, ¿No? —Pregunto, después de rodar los ojos.

—Tranquilo, Jungo. Taehyung y Yoongi son novios desde hace un mes, es obvio que Jimin y Yoon sólo son amigos.

—Espera, ¿Me dijiste Jungo? —Pregunto mirándolo con una mueca, y él sólo ríe asintiendo feliz —. Idiota —Ahí es cuando la sonrisa de Jin desaparece y me mira mal. Ahora yo sonrío, para después voltear des nuevo hacia el frente y volverme a mecer en el asiento de madera colgante donde me encuentro —. Ahorita me meto, es de los días que más he estado esperando. Las estaciones del año cambiaron, y hace una semana estábamos muriéndonos de calor. 

—Según por los cambios de temperatura, y las plantas del bosque, estamos en otoño. Cada vez se acerca más el frío y eso me preocupa mucho.

—¿Por qué? —Pregunto levantándome de mi asiento.

—Si las estaciones del año están así, es muy probable que el frío sea muy fuerte. Tendremos que ir a la ciudad a buscar ropa que nos abrigue y más comida...ya casi no tenemos.

—¿Para cuánto tiempo nos queda?

—Quizá para tres días o cuatro... —Dice, después de hacer una mueca —. Y con ese maldito lodo la camioneta no saldrá, eso significa que nos iremos caminando hasta la ciudad.

(...)

La cabaña me parece aburrida ahora que está lloviendo; No puedo ir al patio trasero donde encontramos una casa del árbol cuando llegamos aquí, ni tampoco puedo ir al ático porque hay muchas goteras. Jimin sigue con Yoongi, y lo único que puedo encontrar divertido es mirar dormir a Taehyung en el sillón individual, quién tiene la boca abierta y está roncando levemente. 

De pronto puedo oír una de las puertas del segundo piso abrirse, y luego, las piernas de Jimin son lo primero que puedo observar cuando baja.

—Hola Kookie —Dice en cuanto baja, para después acercarse a mí y abrazarme del cuello para plantarme un beso que ni yo esperaba. Segundos después se separa de mí, tomándome de la mano para subir las escaleras hasta nuestra habitación —. Tengo un regalo para ti, pero cierra los ojos primero.

—No me gusta cerrar los ojos porque me duermo —Le digo de broma, para después cerrar los ojos y extender las manos, pero siento un suave manotazo que me hace abrir los ojos de nuevo —, ¡Hey! ¿Por qué me pegas? 

—Sólo cierra los ojos...—Dice, así que asiento. Segundos después puedo sentir cómo sus manos bajan el cierre de mi chaqueta, por lo que sonrío —. Si quieres que tengamos sexo, no necesitas que cierre los ojos.

—¡Jeon Jungkook! Deja de ser tan sucio por una vez en tu vida —Exclama, por lo que río. Sus manos tocan mi cuello, y lo que parece ser una cadena fría pasa por ambos lados, para después colgar de éste —. Ya, ábrelos. 

Y cuando lo hago, lo primero que veo son los ojos de Jimin, luego, el collar que me ha puesto. Es una pequeña luna de metal. 

—Yo tengo uno como el tuyo...—Dice mostrándome el suyo, que también se encuentra en su cuello —. Yoongi los encontró en su habitación, me dijo que se lo iba a dar a Taehyung, pero dijo que es tan idiota que terminaría perdiéndolo. Así que este regalo, es una forma de decir que tú y yo siempre estaremos juntos a pesar de cualquier cosa...y también que eres mío frente a los ojos de los demás.

—Gracias Minie, es muy bonito de tu parte —Digo con una risita —. Un segundo, ¿Soy tuyo? ¿Qué no es al revés?

—No, ya te dije que no —Reprocha, pero antes de que él pueda decir algo, me abalanzo contra él, dejándolo debajo de mí para sentarme en su abdomen y dejar sus manos en cada lado de su cabeza.

—¡Kookie, no! —Exclama, cuando suelto sus manos para comenzar a hacerle cosquillas sin que pueda escapar —, ¡Ya, por favor! ¡Yaaa!

—Mejor juguemos a otra cosa —Contesto dejando de hacerle cosquillas, para después acercarme y darle un beso que corresponde rápidamente. Sus manos rápidamente me toman de mi ropa, acercándome a él para tener más contacto. Y pronto, sus frías manos entran por debajo de mi playera, por lo que yo me estremezco separándome de él para quitarme la chaqueta con rapidez por el maldito calor que he comenzado a sentir. Luego, nos volvemos a besar, esta vez con más pasión y salvajismo.

—Mierda, tengo que cerrar la puerta —Balbuceo entre el beso, y Jimin asiente pero no me suelta —. Mi amor...deja que vaya a cerrar la puerta.

—Si quieren yo la cierro por ustedes —La voz burlona de Yoongi me hace separarme rápidamente de Jimin, y él también me empuja levantándose de su lugar para acomodarse la ropa y mirar a Yoongi con la cara totalmente roja.

En la puerta no solamente está Yoongi, sino también Namjoon. Quiero matarlos por asustarnos de esa manera, pero para cuando me levanto, Jin pasa por ahí, deteniéndose junto a ellos para mirar hacia dentro.

—¿Qué está pasando? —Pregunta Jin, y seguramente por mi cara roja de vergüenza se da cuenta, así que comienza a reír con esa maldita risa de limpia vidrios que tanto odio cuando estoy enojado.

A veces quisiera matarlos.

𝘋𝘦𝘴𝘵𝘳𝘶𝘤𝘵𝘪𝘰𝘯 ¡! 𝗄𝗈𝗈𝗄𝗆𝗂𝗇 ₁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora