Pesadillas

7.1K 422 27
                                    

POV DANIELA

Estaba atrapada en un callejón sin salida, corría y corría y por más que me esforzaba, esa luz brillante frente a mí se hacía más lejana. Algo en mí decía que debía alcanzarla pero no podía, mis piernas ya no daban para más.

Me detuve por falta de aire y miré atrás de mí, me encontré con dos caminos, divisaba personas al final de cada uno de ellos pero no podía distinguir sus caras.

Decidí cerrar los ojos y apretar fuertemente pero al abrirlos, me encontré que los caminos habían desaparecido, me vi sola, con todo a oscuras y fue entonces que desperté.

Daniela: María José!! María José!!

Desperté sudando y con mucho miedo, mi instinto fue gritar su nombre mientras que dejaba que Ramón lamiera con desesperación mí mano, seguramente lo asuste.

Poche: Dani!!!! Estas bien? (entro corriendo y se sentó a mi lado, de rodillas al piso).

Daniela: nooo (dije y sin saber por qué empecé a sollozar).

Poche: no mí vida, no llores, Dani, te duele algo? Vamos al hospital bebé! (iba a pararse pero la jale del brazo para que se sentará, tenía una cara muy preocupada).

Daniela: estoy bien, fue solo una pesadilla (dije aún sollozando) donde estabas?

Poche: en la sala mí vida, no quería que durmieras incomoda (dijo mirando al piso, obviamente nuestra platica anterior fue sobre esos acercamientos que tanto necesitaba en este momento).

Me sentía sola y muy confundida, tenía muchos sentimientos encontrados, por un lado no recordaba nada de mí vida con esta mujer, pero por el otro me inspiraba mucha confianza y me gustaba sentirla cerca, a la vez me incomodaba su mirada tan intensa pero no quería que me quitara la vista de encima.

Me dolía la cabeza ahora.

Daniela: puedes dormir aquí...(solté en un susurro).

Poche: de poder puedo, pero tú quieres? (Dijo lento como temiendo mi respuesta).

Daniela: por favor.

Me dio una sonrisa torcida y se subió a la cama a mí lado.

Ramón hábilmente se metió por debajo de las cobijas para quedar a un lado de nuestros pies.

Daniela: siempre hace eso? (Pregunte viéndola a los ojos).

Poche: siempre desde que duermes aquí (dijo viendo al vulto en nuestros pies con una sonrisa).

Daniela: María José?

Poche: sí? (Dijo al fin viéndome a los ojos).

Daniela: mañana me gustaría que me dieras un tour por el departamento para ver si hay algo más familiar que me ayude a recordar. También quiero ver mi celular, solo me preocupa la contraseña.

Poche: es tú cumpleaños (me interrumpió y no pude evitar verla sorprendida por su contestación). Siempre hemos sabido nuestras contraseñas, prácticamente después de cumplir el segundo mes de novias.

Vaya! Debía confiar mucho en esta mujer para que sepa todas mis contraseñas. Bueno, aunque nunca fui una persona infiel.

Daniela: de acuerdo! Entonces mañana vemos eso (le di una sonrisa y volví a acomodarme para dormir).

Poche: sabes? (Volte a verla) cuando tenías pesadillas, solías pedirme que te diera besitos en el cuello, decías que eso te relajaba (la interrumpí).

Daniela: creo que debemos dejar ese tipo de gestos afectivos a un lado, podría confundir las cosas, en especial para ti.

Me miró con el ceño fruncido y podía ver que estaba muy confundida y tal vez algo molesta y la entiendo. Lo que pasó hace rato lo permití por que ella estaba muy triste y estaba segura que si la dejaba besarme, se tranquilizaria de algún modo.

PERDÍ LA MEMORIA, PERO NO EL CORAZÓN (FANFIC CACHE) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora