Eclipse Durante El Amanecer

La Boda

El tiempo fue pasando, llegando el verano, y con él Ania creció un poco.

Quien si que creció más fue Seth, quien pasó de ser de su altura a sacarle una cabeza a finales de agosto.

Durante el verano Ania se había hecho amiga de Layla, la novia de Seth.

También hizo un grupo pequeño de amigos humanos, en realidad no era un grupo, eran sólo tres (contando a Ania), pero se lo pasaban de maravilla.

Ellos se llamaban Fred y George, y eran gemelos.

Ania lo flipaba al ver a los gemelos y al haber conocido sus nombres.

Exceptuando el apellido ES QUE ERAN CLAVADITOS A LOS GEMELOS WEASLEY DE HARRY POTTER.

Pelirrojos, traviesos, ojos azules, además de majos y divertidos.

Tenían mucha imaginación, y juntos gastaban bromas a los vecinos.

En la acampada "A solas" de Seth y Ania, Seth invitó a su novia y a dos amigas más, ya se su edad.

Estaba tan en su salsa con los más mayores que hablaban de temas que a ella le daban igual, criticaban a otras personas y terminaron dejándola un poco de lado.

Pero que vamos, le fue mejor, porque cogió su tienda y, en vez de ir con el grupo, se fue sola.

Fue un buen momento para pensar, aunque alguna noche tuvo frío.

En la acampada con la manada pasó algo parecido, y es que las dos chicas de la manada durmieron en la misma tienda.

Y si, hubo beso. Esto alarmó un poco a Seth cuando, al día siguiente, los labios de Ania olían a su hermana, pero nada del otro mundo.

Seth se había centrado en su relación con Layla, pensando que eso del beso por Ania y los sentimientos sólo fueron un despiste momentáneo, y confundió amistad con amor.

Ania nunca había estado enamorada de Seth, ni se había confundido, siempre creyó que sólo era un amigo.

(Uh.... Más ciegos que el Adrien de Ladybug)

Durante el viaje a Disney se lo pasaron genial, increíblemente genial.

Se hicieron miles de fotos, y compraron peluches, camisetas, etc...

Ania se compró una camiseta a juego con su madre que

El verano terminó, y con este llegó la boda de Bella y Edward.

Ania, ya con 13 años, se arreglaba para ir.

Su madre también estaba invitada, pero no había podido ir, debía cubrir a Charlie en el trabajo.

Seth y Jacob también fueron, bueno, Jacob llegó tarde, pero ella se centró más en estar con los Cullen que con ellos.

La ceremonia fue bonita y divertida.

Y en el convite, los discursos también fueron bonitos.

Todo genial hasta que le tocó a Ania, nadie le había avisado.

"Me cago en to mis muertos de no haber leído las mentes de estos antes de que me hiciesen ponerme ante unas 50 personas (más o menos) a hablar" pensó ella.

Y es que es cierto, de verdad, que por una vez que no tenía ganas de leer mentes y PUM.

Tuvo que subir a la tarima como el resto de los de los discursos.

No llegaba al micrófono.

- A ver si... - se puso de puntillas y tampoco - pos nada.

Y cogió el micro de ahi, para hablar a un lado de donde debería estar.