¿Ɗє qυιє́η єѕ єℓ вєвє́?

════ ∘◦ Capítulo 5 ◦∘ ════

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Otro día de escuela daba comienzo, por los pasillos atiborrados de alumnos que iban y venían daba indicio de ser un día normal más, pero un rubio cabizbajo con un aura deprimente se dirigía sin mucho animo a su casillero. Dos pares de ojos curiosos se le aproximaron por detrás provocando que se asustara.

─Tweek, ¿Qué tal amaneciste hoy? ─pregunto Bebe.

─¿Es necesario responder? ─respondió apoyando su espalda contra el loquer.

─Es que Tweek, si se te ve muy acabado, y verte llegar así nos preocupo ─fue esta vez Wendy quien tomo la palabra.

─No se que sentir realmente, estoy muy confundido pero mas que nada aterrado. ¿Cómo afrontare esto?, ¿Qué dirán mis padres? ¿Cómo llegare día a día aquí a la escuela y me vean con un enorme vientre de embarazo? ─decía nervioso y cuestionando a sus amigas.

─Tweek no te pongas así, cuentas con nosotras ─le animo Wendy y la rubia que estaba con ella asintió a sus palabras.

─Si, trata de animarte.

─Es que también me atormenta el hecho de no saber quien es el padre ─comento ya bajando la cabeza y ocultando su rostro entre sus manos.

─Bueno, inventa que es de alguien fuera del colegio y listo, no te atormentes Tweek, no serás el primero ni el último en embarazarte de cualquiera ─dijo aquello de lo más normal Bebe levantando los hombros.

─¿Y a mis padres? ¡Oh Dios!, morirán de vergüenza por un hijo como yo ─seguía diciendo sin cambiar de posición.

─¿Tweek te sentirías bien saber que te acompañaremos? Tu mamá es muy comprensiva y con tu papá nos arreglaremos con algo ─fue Wendy quien ahora opinaba.

Levanto la cabeza mirando a las chicas, se sentía muy apoyado por ambas, suspiro y les sonrió, gesto que fue correspondido por ellas. La campana de la escuela sonó y se encaminaron a su aula que por su fortunio, compartían los tres.

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Unos pasos apresurados se dirigía, tarde, a las clases, ese día había apagado la alarma por descuidado y se quedo durmiendo hasta tarde. Empujo las puertas y veía como hasta el último alumno ingresaba a la aula y como si fuera maratón llego agitado y miro para todos lados no encontrándose con la maestra, suspiro y se dirigió a su banco junto a sus amigos.

─Por milagro llegaste a tiempo ─le recrimino Token.

─Si, fui un tonto, apague la alarma y bueno, ya se imaginaran el resto, hasta Tricia me traiciono y había salido antes que yo ─se recostó sobre el pupitre escondiendo su rostro entre sus brazos.

─Yo aprovechare que no llego la maestra y le preguntare a Bebe si quiere salir ─dijo a animado Clyde levantándose y yendo a donde estaba.

Cuando se encontraron solos el chico de piel morena comenzó a sacudir al azabache y no dejar que durmiera. Este fastidiado lo miro pero al ver su cara bajo un poco la vista adivinando que es lo que quería hablarle.

─¿Y? ¿Le dirás? ─pregunto Token.

─Cuando lo encuentre solo, le diré.

─Será difícil, Wendy y Bebe no se le despegan en ningún momento, míralas ahora, parece que lo protegen de algún mal invisible ─apunta con los ojos a las chicas que actuaban un poco raras con el rubio. Levanta la cabeza y observa al grupo intrigado.

Las chicas reían mientras anotaban quien sabe que cosas en una hoja y mimaban, por decirlo de alguna manera, al rubio que ya estaba apenado por la acción de sus amigas.