¿Ɗє qυιє́η єѕ єℓ вєвє́?

════ ∘◦ Capítulo 18 ◦∘ ════

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En la habitación del chico de cabellos rubios, un azabache estaba sentado en la cama dejando que su ahora novio atendiera el corte de su labio, soltaba unos leves quejidos pero no mas que eso, no se iba a demostrar débil. Tweek tenia el botiquín en sus piernas mientras atendía la herida del azabache, no pudo evitar soltar un suspiro pesado y entristecer la mirada.

─Cariño, ¿Qué tienes? ─pregunto Craig mientras sostenía su mano deteniéndolo de lo que hacia.

─Es que… ─pauso para luego desviar su mirada a otro lado de la habitación ─Por mi culpa tu padre los hecho.

─No Tweek, no fue tu culpa ─se arrimo al chico y lo abrazo por los hombros ─Mi padre solo es un idiota intolerante, el no sabe lo que se perderá por ese comportamiento.

─Esta bien ─medio sonrió llevándose sus manos a su vientre.

La habitación del blondo ya se encontraba preparada para el recibimiento de aquella niña que era esperada por todos los habitantes de esa casa, incluyendo de las chicas que visitaban todos los días al rubio. La cuna estaba ubicada a un lado de la cama, el cambiador con sus cajones llenos de ropita de niña, y por casi todo el cuarto regado juguetes y peluches.

─Sabes, me siento un poco mal. Tiene todo para nuestra hija y yo no le compre nada ─agacho la cabeza con una media sonrisa, no queriendo reflejar su tristeza y disgusto.

─No te desanimes Craig. Esto fue obra y gracia de mi madre y las locas de Wendy y Bebe.

─Si, pero cariño, por mi cobardía yo tenia que haber estado en todo momento ─seguía culpándose el chico.

─Craig, no ganas nada seguir reprochándote. Aun no nace nuestra hija, y estos meses que quedan serán los mas pesados ─poso su mano en la de él regalándole una cálida sonrisa ─Lo mejor que puedes hacer es apoyarme desde ahora y claro cuando nazca la niña.

─Esta bien Tweek ─suspiro pesado ─No te merezco ─se acerco y beso la frente del blondo, provocando que este se sonrojara.

No se dijeron mas después de aquella charla y se acomodaron para poder descansar, el día había sido pesado y no solo para ellos. En posición de ‘cucharita', el azabache abrazo al embarazado apoyando su mano sobre el abultado vientre, se dieron las buenas noches y cerraron los ojos para así poder descansar.

A la mañana siguiente, el nuevo día los recibía con una mañana prometedora, ya que mostraba que el sol iba a ser el que de inicio el amanecer. Todos, incluyendo las chicas que ya les hizo costumbre estar siempre en esa casa temprano, estaban en la mesa desayunando y controlando cada cosa que ingería el chico, hasta el punto de fastidiarlo.

─¿¡Quieren dejarme ya tranquilo!? ─grito mientras empujaba el tazón de donde comía.

─No protestes Tweek, necesitas fibra en tu dieta ─la rubia de cabellos rizados le reprochaba.

─Esta cosa ni gusto tiene ─volvió a discutirles.

─Ya honey tranquilo, que sabes que no es bueno que te alteres ─esta vez saltaba Craig interrumpiendo la discusión que se estaba formando ─¿No puede echarle algo para que cambie el gusto?.

─Un poco de azúcar no creo que le afecte en nada, así también no correrá ningún peligro en desmayarse ─analizo Wendy y le tendió el recipiente al chico de ojos verdes.

Tranquilo, y con las indicaciones de las chicas de cuanto debía utilizar logro calmar al chico de cabellos alborotados que ahora alegaba que si podía comer esa cosa que decidieron comprarle, pero Craig sabia que no estaba del todo contento por lo que decidió cortarle unas frutas y el gustoso acepto en comerlas. Los adultos que se mantenían absortos de la conversación de ellos, fue Laura quien decidió hablar.