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Gabi

-Gracias por venir - les dije a mis amigos - Por cierto Sol, ¿aún estás aquí en el hospital?

-Sí, pero me han dicho que estoy mejorando rápido, no te preocupes por mi - respondió animado.

Víctor le dió un pequeño codazo a Riccardo, y este asintió. Entonces el de cabellos azules sacó su teléfono móvil, tecleó algo y me lo extendió. Le miré confuso.

-¿Qué pasa? - pregunté, mirando los ojos ámbar de Víctor.

-Cógelo, ya veras - me respondió.

Agarré el dispositivo y me lo acerqué. Miré la pantalla, lo que ví no me lo esperaba. Estaban todos mis compañeros del Raimon, conectados en una llamada de vídeo des del instituto.

-¡Felíz cumpleaños! - gritaron todos al unísono.

Casi se me sale una llagrimilla de la emoción. No me podía creer lo que estaba pasando. Miré a los que estaban en mi cuarto, todos sonrieron. Volví a centrar mi atención en la pantalla.

-¿Cómo estás Gabi? - preguntó Sky.

-Bien, genial - respondí.

-¡Ya te puedes estar recuperando, que por tu culpa casi perdemos el partido contra el Kirkwood de ayer! - me riñió Jade.

-¿Por mi culpa? - cuestioné.

-¡Menudo agujero dejaste en la defensa! - continuó.

-Lo siento - me llevé la mano en la nuca - No lo hice queriendo.

-No, claro que no - Adé apartó a Jade - Tú ni caso, tómate tu tiempo y vuelve al 100%, ¿vale?

-Hecho.

-¿Ha ido todo bien? - preguntó la señorita Hills.

-Sí sí, la operación un éxito. Ya hace casi una hora que me he despertado y no me encuentro mal.

-Qué alivio, espero que vuelvas pronto - suspiró.

-Y que vuelvas con ganas - añadió el entrendador Evans - Pero de momento, céntrate en recuperarte.

-Sí sí, eso haré - respondí de nuevo.

-Vaya... - dijo Aitor con los ojos cerrados y una sonrisa pícara - Ahora que no estás voy a tener que buscar otra víctima a quién gastarle bromas.

Le hice una mirada con pesadez.

-Es broma, nadie te sustituye - se rió.

-¡Aitor! - le reñí, riendo yo también.

Por algún motivo me sentía felíz y en paz. Supongo que así responde el cuerpo humano cuando todo va bien después de malos tiempos.

-Bueno, bien está lo que bien acaba, como diría Jordan - habló el entrenador - Espero verte pronto por aquí Gabi, mucha suerte, sabes que estamos contigo.

-Gracias, volveré antes de que os deis cuenta - respondí, dando fin a la llamada.

Le devolví el dispositivo a Víctor, y sonreí ante mis amigos.

Mientras yo esté aquí...  [Inazuma Eleven] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora