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Soltó un sollozo, dando algunos saltitos de frustración mientras llevaba sus manos a su rostro y terminaba sentado en el sofá abrazado a su abuela

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Soltó un sollozo, dando algunos saltitos de frustración mientras llevaba sus manos a su rostro y terminaba sentado en el sofá abrazado a su abuela. Desde hace unos diez minutos se encuentra en la misma rutina, caminando de un lado a otro con la mirada en el suelo, su mayor hablaba por el teléfono de la casa conforme anotaba unas cuantas cosas en una libreta. Y Después, terminaba llorando a mares no pudiendo creer la noticia que acababan de darle. Esto podía ser malo y a la vez bueno, ni siquiera sabía que diría TaeHyung al respecto, ¡hace dos días no lo ve!, y es que los fines de semana no podían estar juntos ya que él había conseguido trabajo y esos dos días era dónde estaba más ocupado. Ggukie quería hacerse pequeñito en un lugar, y sí, podía fácilmente estar en su forma de conejo, pero ese "fácil" ya no lo era, no cuando estabas más gordito y con las piernas pequeñas que ya ni podía caminar. 

Porque sí, es eso. 

Esta esperando un bebé. 

Un bebé que descansaba dentro de su pancita y cada día crecía más y más. 

Y estaba tan preocupado y a la vez asustado de la respuesta que tendría su alfa al contarle tal suceso. ¿Y Si era muy pronto para tener un cachorro?, ¿y si TaeHyung no lo quería por ahora ser gordito y encima cargar un bebé?. 

—nene, tranquilo. —su nana acarició con su mano la espalda de su pequeño.

Sintiendo los espamos de su cuerpo por el desgarrador llanto que hacía a su viejo corazón arrugarse mucho más. La nariz de Ggukie se encontraba completamente roja al igual que sus ojitos, sorbiendo su naricita mientras esta se movía olfateando una camiseta de su alfa que tenía entre sus manos. TaeHyung solía traer de sus prendas que no usaba para dárselas a Ggukie en esos días en los que no podrían verse o el menor estuviese triste, y justo hoy, era uno de esos momentos. A través de la marca sucedían muchas cosas, Alfa podía percatarse de la tristeza de su omega pero al querer una respuesta,no recibía ninguna y eso lo llevó a alarmarse. 

— preocuparás a taehyung y él debe estar en su trabajo,cariño, cálmate, sabes que el te ama tanto y un bebé no arruinará su relación,la hará más fuerte. 

Ggukie tapo sus ojitos un instante,negando con la cabeza para inhalar y exhalar. 

—él no puede venir,él..él no debe enterarse de esto,abuela. —intento calmarse, pero nuevamente, se quebró. — ¡é-él me odiará por arruinar nuestra vida juntos! —. 

Muñequito de porcelana, tan frágil, tan bonito y tan valioso. 

Sorbió su naricita, aferrando a su pecho aquella camiseta antes de escuchar dos veces el tocar de la puerta de entrada.

—¡JungKook,soy yo, Alfa!. 

Y Por primera vez, omega quiso huir de esa voz. 

Se levantó ansioso, tapo su rostro y luego intento cubrir su pancita abultada con la camiseta de TaeHyung,abultando sus labios al no ver resultado. Movió sus pies hacía la cocina, y luego, al darse cuenta de que no sería un buen escondite, trató de subir las escaleras, ¿desde cuando subir cinco escalones era tan complicado?. 

❝ Sweet bunny .❞ ┊ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora