҂🌻❐; ➢ ❝ un dulce conejito celoso de su cachorra bebé y un Alfa que hace lo posible para no hacer llorar a ninguno de ellos dos. .❞
꒰-ella sólo llora para llamar tu atención, alfa, ¡yo también puedo hacerlo!.꒱
Creada en : Abril 2020.
Finalizada: J...
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El danzar por la cocina no se había vuelto tan divertido como en ese instante, dónde incluso cantaba a todo pulmón aquella popular canción que le hacía mover hasta los huesos. CLC, Hobgoblin. Vamos, ¿a quién no?, era un tema bastante poderoso y movible que le hacía querer gatear por el suelo en busca de cierto Alfa para luego bailar sobre él, en serio, así era el poder de esa canción en él. Un conejo estaba haciendo sus travesuras en la cocina y es que hoy a él le tocaba hacer la cena, y sólo estaba preparando lo que sabía hacer mejor: Galletas. TaeHyung estaba en la sala con Chaeryoung oyendo como JungKook cantaba y viendo como el mismo se movía al ritmo de la poderosa también,coreografía. Era bonito ver a su omega tan contento cuando estaba cocinando ya que nunca estaba contento o...nunca estaba en la cocina.
Las agujas del reloj marcaban las siete en punto, Ggukie estaba sacando las galletas del horno antes de que la música se cambiara y fuese por otra de sus favoritas, una de Red velvet, la última que habían sacado y si, esa canción lo hacía sentir bien por el profundo significado de ella.
TaeHyung se acercó al oler ese delicioso y dulce aroma que llego a sus fosas nasales aparte del olor de su omega, Chaeryoung terminó sentada en aquella mesita para bebes y ambos mayores sólo pudieron servir y apartar tantas galletas para los tres. Chaer aún no tenía sus dientecitos pero, podía mascar algunas cuantas. La cena fue bastante entretenida, la radio encendida reproducía música que el omega cantaba conforme comía.
— estás muy feliz, hoy. —habló Tae, mirándolo. — ¿a qué se debe?. —.
— Hoy hay luna llena..~ —canturreó el omega. — es noche de novios. —.
JungKook creía que esas noches eran cuando madre luna andaba de escurridiza juntando parejas para luego volverlas destinados, así como él, así como TaeHyung y él. Aquella peculiar cena terminó cuando las galletas yacían en sus estómagos. Leche tibia bastó para dormir a la pequeña castaña y llevarla a su cuna, dejando a un par de enamorados en la cocina arreglando todo mientras de fondo sonaba una canción más melodiosa de una banda que no conocía, pero le gustaba la canción que repetía constantemente un "Illegal", era pegadiza. Dado por finalizada su tarea, el menor se encontraba mirando por la ventana de la cocina como la luna iba subiendo poco a poco, ella era muy linda, ¿como algo tan simple para muchos podía ser tan hermoso para él?
— ¿quieres ir afuera?. —TaeHyung preguntó, mirando desde la entrada a Jeon. Quién sonrió, asintiendo de inmediato. — Bien, vamos. —.
Los dos juntos caminaron hacía la entrada, la calle estaba siendo iluminada por tenues focos de luz en los postes de electricidad, vacía, algunos gatos caminando y protegiendo la zona mientras ellos, seguros de que chaeryoung no iba a despertar, terminaron sentados en la acera juntos, mirando el cielo oscuro despejado de nubes y sólo dejando a vista las estrellitas y la hermosa y brillante luna. Alfa por inercia y puro instinto, paso sus manos por los hombros del chico junto a él para aferrarlo y sólo abrazarlo con intención de cuidar ese cuerpo del frío. Sabía lo mucho que su amado amaba mirar la luna y a él también, púes le recordaba aquel lunes quince de agosto en dónde conoció a ese chico que sería su futuro esposo,púes era algo que estaba planeando desde hace ya días.
— Ver la luna...me hace recordar aquellos momentos bonitos en dónde tú y yo ni eramos novios, dónde tan sólo hablábamos como desconocidos...dónde sólo te contaba pocas cosas de mi.
TaeHyung asintió. Mirándolo y escuchándolo atento.
— Me he dado cuenta de que...el tiempo pasa volando, cariño. Antes estaba completamente solo con mi abuela, no tenía a nadie con quién hablar y viajar acá era..desconocido, yo era un desconocido, pero te conocí a ti y simplemente..hiciste todo más hermoso, confié en tí muy rápido, te conté mis mayores secretos,se siente simplemente hermoso que..tú, me escuches, así...así como haces ahora. — sonrió ,riendo ambos poco después. — No sabes lo perfecto que es que te entiendan como tu me entiendes a mi, que me toleres, que soportes mis tontos celos y mi mimosa personalidad y algo malcriada lo sé, pero aquí estás, amándome como el mismo día en que lo hiciste, en serio,TaeHyung yo..tengo tanto que agradecerte, sé que nunca podré a amar otra persona como te amo a ti. Por favor, no me dejes nunca, por favor, sigue amandom...
Aquel cursi discurso dado por un omega cursi fue interrumpido por suaves labios de su amado en un beso tibio lleno de pasión por el otro, ese intenso amor, esas frágiles palabras. Ellos se amaban, se amaban mucho más que aquella palabra. Sus labios se movían en un vaivén suave y lento, el mundo simplemente dejo de existir hasta que TaeHyung se separo para juntar sus frentes,todo exploto en ambos. La luna los iluminó con un intenso brillo.
Solo ellos dos.
— Sólo buscas hacerme llorar, JungKook...sabes que te amo como no tienes idea y jamás dejaré de hacerlo, sé que el trabajo me consume y a veces..simplemente olvido algunas cosas pero eso no cambia el hecho de que te ame tanto. Seguiré demostrándolo, seguiré enseñándote cada fase del amor hasta mis últimos días, bebé. Sólo seremos tú, yo y Chaeryoung.