❝ Mírame una ultima vez.
Sonríe como si todo estuviera bien.
Así cuando te extrañe, podre recordarlo.
Así podre dibujar.
Tu rostro en mi mente ❞.
☁ | Dos jovenes que se aman, que tienen problemas en estar juntos, porque uno piensan en el "¿Esta mal...
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❝ Que belleza guardan aquellos, que no han encontrado su lugar entre tanta gente; no es soledad, es un privilegio no encajar ❞.
Narrador Omnisciente
Palacios estaba indignado. Y no solo por el hecho de que Biquard le había prohibido ir a su casa, si no porque había alguien más con el. Sus celos eran sumamente notorios, y eso se lo hacía saber con el tono de voz con el que le hablaba, y las palabras que utilizaba.
— Pero ¿Por qué? —. Hablo con un puchero —.
— Te dije que no se, mi mamá me dijo que por problemas, pero no se que tipo de problemas —. Mustio —.
— Entonces decime, ¿Qué tiene de malo que vaya? No es como que vayamos a coger ni nada, apenas y nos tocamos —. Dijo el menor, a lo que Vainstein soltó una pequeña risa ante lo dicho —.
— Es que no sabes como es ella... —.
— ¿Y cómo es? —. Interrumpió —.
— B-bueno es, m-muy, muy, empalagosa, y siempre esta increíblemente cerca de mi, y pues, e-eso —. Habló con dificultad —.
— Me estas dando más razones para ir con vos —.
— Solo serán unos cuantos días ¿si? —.
— Me dijiste que no sabías cuantos —.
— Si pero, no serán muchos. O eso espero... —. Susurro lo último —.
— Pero respóndeme ¿Por qué no queres que vaya? —. Preguntó nuevamente, a lo que el mayor no respondió —. Con esto acabas de dejarme en claro que te doy vergüenza Manuel —. Y colgó —.
Felicidades Manuel Vainstein. Lograste lo que inevitable.
Marcó, y marcó, y marcó, y siguió marcando, y nada. Mandó uno, y otro, y otro mensaje, y tampoco. Pensó que al menos, hubiera estado bien que le clavara el visto, pero ni eso. Fue a la habitación de su madre, y antes que nada toco la puerta, para después recibir un "pase" como respuesta.
— ¿Puedo ir a donde Mateo? —.
Ella soltó un gran suspiró pesado, y luego hablo. — Manuel, te e estado dando demasiadas libertades —.
— Yo se, pero, es importante —.
— Hijo, las cosas se están poniendo muy mal afuera, y creo que sos consciente de eso o ¿estoy mal? —. Negó inmediatamente —. No es por ser mala, ¿Está bien? Solo, no quiero que te pase algo. Ya tuvimos demasiados problemas, y no necesitamos a un integrante menos acá —.
