CAPITULO 18

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Mis pies estaban congelados a causa del frio, nunca más saldría a algún lugar en invierno sin medias. Pero todo sea por charlar con mi hermana sin la presencia de otras personas.

No me había dado cuenta de lo mucho que la extrañaba hasta que la tuve al lado mío, haciendo algo tan simple como tomar un café y conversando acerca de todo lo que nos había ocurrido durante el tiempo que estuvimos separadas.

Se la veía tan feliz con su nueva vida, era algo que verdaderamente me alegraba, se había esforzado mucho por conseguirlo.

—Había olvidado lo bueno que era este café—murmuro con una sonrisa para luego darle un sorbo.

—Sí, creo que desde que me mude aquí solo he venido una vez con la abuela—comente.

—No puedo creer lo rápido que ha pasado el tiempo, parece que fue ayer cuando eras esa niña que peleaba por tener mis muñecas—miles de recuerdos invadieron mi mente, había sido lindo poder compartir mi infancia con ella.

—Por supuesto que las iba a querer, tenías las mejores—me defendí entre risas por parte de ambas

—Estoy segura de que no querrás hablar de esto, pero me gustaría saber porque estás aquí.

La pregunta me molestaba un poco o quizás solo era que me dolía tener que hablar sobre eso, una vez que lo hacia todos los malos momentos que había pasado junto con mis padres invadían mi mente y de esa manera me era imposible no romper en llanto. Venia sintiéndome bien ya una semana, no podía permitir caer de nuevo.

—No me hagas esto, no tengo ganas de hablar sobre eso—respondí tomándome mi tiempo y luego sonreí, no le mostraría lo mucho que me había afectado su pregunta.

—Mira, se lo difícil que puede ser convivir con ellos, pero mírate supiste salir delante de cualquier obstáculo que la vida te impuso y completa—tomo mi mano y la entrelazo a la suya.

Quise soltar una risa sarcástica, pero me contuve, si ella creía eso estaba tan equivocada. Está bien, supongamos que logre salir adelante "completa". ¿cómo es que me siento tan rota? ¿cómo podía sentir que me hacía falta algo cuando lo tenía absolutamente todo?

—¿Y que si no lo logre? —propuse con una sonrisa llena de dolor. Parecía una adicta, intentando con todas sus fuerzas salir adelante, pero al cabo de un corto tiempo volviendo a la misma situación... volviendo a caer.

—Entonces busca otra manera de salir adelante, desvía tu ruta, salta los pozos, procura no pasar semáforos en rojo, deja tu luz prendida sin importar nada y lo lograras—sonaba tan sencillo saliendo de ella cuando para nada lo era.

Era inteligente sabía que era una metáfora, desviar mi ruta: no seguir un camino que posiblemente me cause heridas. Saltar los pozos: cualquier obstáculo que la vida me imponga. No pasar semáforos en rojo: no apresurarme si aún no es el momento y esperar lo que el destino me tenga preparado. Dejar mi luz prendida: no dejarme caer en un hoyo negro del que no sea posible salir o me detenga por un largo tiempo.

Si había fallado en la mayoría, pero la única que estaba al tanto era mi abuela y si mi hermana se enteraba armaría un alboroto.

—Lo tendré en cuenta—guiñe un ojo y ella sonrió con gracia.

Sabía que eso me traería consecuencias, agregaba un peso a mi dolor cada vez que hacia algo para ocultar que me pasaba o sentía.

—¿Y tienes algo nuevo para contarme? —pregunto mientras le daba un mordisco a su medialuna. 

—Mi vida es aburrida, ¿Qué hay de vos? —cuestione mientras jugueteaba con la pulsera en mis manos.

—Se supone que lo hablaríamos junto con toda la familia, pero hare una excepción por vos, tenemos la oportunidad de venir a trabajar en un hospital cerca de aquí junto con Logan y conseguimos una casa bonita—comento con una sonrisa e instantáneamente sonreí, eso era fantástico—. Estaríamos cerca de los abuelos y además podría venir seguido a visitarte.

Me levante de mi silla y la abrace, era la noticia más buena que me habían dado desde que me mude. El tenerla cerca lo cambiaba todo.

—Estoy muy feliz por ambos—admití aun sonriendo.

—Por un tiempo prefiero que solo lo sepas vos y nuestros abuelos, nuestro padre estará en desacuerdo y no quiero pelear con el—. Agrego corriendo de su cara un mechón de pelo.

—Ellos consideran cualquiera de tus decisiones correctas—dije con una sonrisa y comenzó a negar con la cabeza.

—¿Estas segura de eso? Cuando decidí irme a vivir con Logan dejaron de hablarme por un año, luego se les paso—confeso y sus ojos estaban lagrimosos—. Creyeron que prefería a un chico antes que a mi propia familia.

Me partió el alma verla de esa manera... tan vulnerable cuando para nada era esa clase de persona. Esta no era la Sophie que yo conocía, la chica que hacia reír al punto de terminar todos llorando, la que sonreía todo el tiempo, la amiga que estaba para ser el paraguas que cubría la lluvia sin importarle si tiene que soportar también el granizo.

—¿Estas bien? —pregunte por más que sabía que no era así, ella con su manga limpio una lagrima que se estaba deslizando sobre su mejilla.

—Sabes que nunca elegiría a un hombre sobre nuestra familia—continuo y su voz temblaba, había tocado un tema que la lastimaba.

—Claro que lo sé—conteste acariciando su mano e intentando demostrarle que siempre estaría para ella.

—No le comentes esto a Logan, no quiero que sepa que aún me afecta—dicho eso limpio algunas lágrimas que había derramado y sonrió.

—No lo iba a hacer de todos modos.

—No volvamos a tocar el tema ¿sí? —indico mientras ataba su pelo en un rodete—. Ahora, cuéntame acerca del chico, ¿es tu novio? —interrogo sin quitar su mirada de mis ojos, atenta de mi respuesta.

—No claro que no, nos estamos conociendo—respondí rápidamente desviando mi mirada—dudo que quiera estar conmigo al conocerme verdaderamente.

Eso era totalmente cierto y si hacía falta lo repetiría mil veces, no merecía un chico como el siendo una persona que solo causaba dolor en otros.

—Vuelve a repetir eso y te golpeare con mi medialuna—me causo gracia su amenaza y solté una risa, provoque una mala mirada por parte de la pareja de la mesa de en frente.

—Cuando lo conozcas te darás cuenta de eso—insistí y le di un sorbo a mi café.

—Me alegra saber que hay posibilidades de conocerlo y espero que sea pronto—dijo con una sonrisa y sonreí internamente al imaginar una cena con mis abuelos y mi hermana con Alex oficialmente como mi novio.

—El destino es totalmente impredecible, nadie sabe que puede ocurrir el día de mañana—sonreí y ella imito mi gesto.

—Cuéntame sobre el—indico con una sonrisa, ¿Cómo podía preguntarme por un chico luego de llorar sin importarle estar en un lugar público?

—No lo sé, es un gran chico, me hace bien—conteste con una sonrisa.

—Eso es lo más importante, me alegra que hayas encontrado a alguien luego de haber sufrido tanto por Steven.

El que lo haya nombrado no me lastimo, no me molestaba hablar de él, pero no valía la pena hacerlo. Había comprendido que personas así no merecían un lugar en mi vida ni siquiera segundas oportunidades. 

—Me gustaría que las cosas se quedaran así con él, no sé si estoy preparada para ser oficialmente su novia, solo sé que disfruto estar a su lado y no quiero que se termine por mi culpa—especifique y baje mi mirada.

—De todas maneras, el amor es más que el título que le entregamos a otra persona, si esas personas se aman lo demás no debe ser un problema—expreso con una sonrisa.

Una vez había dicho que el amor nos hace un tanto vulnerables y si es verdad, pero todo lo bueno tiene un precio que debe ser pagado.

—El problema es que tampoco estoy segura de lo que quiero—confesé con una sonrisa creo que nunca había tenido claro lo que quería.

—No apresures las cosas, cuando sea el momento lo sabrás—dijo con calma, como si fuera tan fácil.

—Por mi está bien, soy capaz de esperar toda mi vida, pero, ¿que si él no quiere hacerlo o se cansa de esperar? —pregunte sabiendo que la respuesta me lastimaría.

—Pues entonces otra persona aparecerá—concreto con una sonrisa.

El inexplicable sentimiento de amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora