—Empiezo a arrepentirme de esto—confesé mirando la caída de cuatro o cinco metros al lago, debía admitir que la vista era fantástica, el agua se veía realmente transparente pero hacia frió y era una caída que me asustaba..
—Mira yo salto primero, así con ropa y todo por si te avergüenza, sino no hay problema—guiño un ojo y golpee su hombro, era tan tarado cuando quería.
Volví a mirar la caída y no, no tenía las agallas suficientes, es más hasta estaba planeando una huida, si corría rápido luego de que él se tirara quizás no me encontraría.
—Si muero es tu culpa, mi abuela sabe que salí contigo y si no aparezco viva en las siguientes veinticuatro horas sabrá que algo me pasó—advertí con una sonrisa y manteniendo mi voz firme.
—Deja de ser tan inmadura, solo salta, no te ocurrirá nada—sonrió—solo procura nadar rápido no vaya a ser que te coma un tiburón—agrego con tono burlón, definitivamente estaba colmando mi paciencia.
Lo haré, lo haré para demostrarle que puedo hacerlo si me lo propongo, bueno pensándolo bien voy a considerar nuevamente la opción de salir corriendo.
—Deja de pensar en escaparte.
—No soy tan estupida como para hacer eso—respondí indiferente, maldito brujo.
Él se sacó la remera para dejarla sobre una piedra, fue tan rápido que ni siquiera pude presenciar el momento en el que se tiro.
Asome mi cabeza para mirarlo y estaba vivo, bueno podía hacerlo, ¡ay claro que lo haría!—si lo sigo diciendo me lo creeré—me saque mis zapatillas, no las arruinaría por el plan estupido de Alex.
Cerré los ojos y me repetí mentalmente que podía hacerlo.
Corrí con rapidez, no lo iba a pensar demasiado porque sino correría pero en la dirección opuesta para irme.
Salte y tape mi nariz con mi mano, al cabo de unos segundos la fría agua hizo contacto con mi cuerpo, pero debía admitir que fue asombroso, la adrenalina corría por todo mi cuerpo.
Sentía hasta ganas de volver a hacerlo, había sido estupendo, aunque seguramente me resfriaría aún que era lo que menos me importaba.
Y por mas que me duela admitirlo Alex tenía razón, me sentía jodidamente viva, nunca había estado tan alegre, quería hacer cosas que antes no haría ni porque me pagaran un millón de dólares, por un momento había olvidado todos mis problemas y se sentía fantástico.
—Ahora dime, ¿que te pareció?—pregunto Alex nadando hacía mi.
—Créeme me estoy tragando mi orgullo por esto pero si, fue una experiencia única, divertida—sonreí tirando mi cabeza hacia atrás y permitiéndome ver él asombroso cielo de hoy.
Hacía frío, a decir verdad hacía mucho frío pero juro que era lo que menos importaba, se sentía genial nadar por esas aguas, no creí que existiera un lugar semejante a este, que trasmitiera tanta paz, si hubiera sabido de este sitio en mi niñez hubiera rogado a mis padres porque me trajeran cada verano aquí.
Es que era algo tan simple pero tan hermoso a la vez, como un lago tan insignificante me podía hacer sentir tan bien.
Alex nadó hacía mi con lentitud, lo miré con las cejas en alto, creo que quería decir algo.
—Creo que me merezco un beso por lo bien que la estás pasando, ¿no es así?—comencé a reír apenas termine de escucharlo, estaba equivocado si creía que lo besaría en nuestra primera cita, me haría ver desesperada.
—Que ridículo.
El comenzó a reír e intentó hacerme creer me que lo que había dicho era en chiste, cree que no me di cuenta pero lo hizo porque de alguna forma rechacé besarlo.
—Si te soy sincero creí que no lo harías, aparentas ser una chica que no sale de su zona de confort—sonrió, ¿se supone que es un halago?—así que me alegra haberme equivocado.
El no dejaba de mirarme, lo hacía con deseo, con admiración, se tomaba su tiempo para observar cada parte de mi rostro parecía que intentaba memorizarlo.
Me ponía nerviosa, nunca me habían mirado así, al menos que me haya dado cuenta, quizás si recibía halagos o comentarios vulgares pero nunca me habían contemplado de esa manera.
—Deja de mirarme como si quisieras devorarme—le pedí, me ponía realmente nerviosa su mirada, era como si él fuera un perro y yo su alimento preferido, así es como me sentía cuando Alex me miraba.
—¿Cómo pretendes que lo haga si en este momento lo único que quiero hacer es besarte?
Estoy segura de que palabras como esas usan solo los mujeriegos, pero no podía ponerle esa etiqueta a él, desde que había llegado no lo había visto coquetear con otra chica que no sea yo.
—Si algún día lo consigues créeme te felicitaré yo misma—sonreí con arrogancia, justo como él lo hacía.
—Tranquilamente podría robarte un beso, pero como soy bastante competitivo conseguiré que desees besarme y el que tenga que felicitar al otro seré yo—mierda, era mucho mejor que yo.
—Como vos digas—comencé a nadar a la orilla para poder salir del lago, había estado mucho tiempo y ya comenzaba a darme mucho frío.
Una vez que salí me senté en una piedra bastante grande que había a unos metros del lago y cubrí la mayor parte posible de mi cuerpo abrazándome a mi misma, quizás había sido una mala idea ahora me estaba muriendo de frío.
Cuando ambos ya estábamos lo suficientemente secos nos dirigimos a donde Alex había estacionado la moto, por suerte ahora manejaba con más tranquilidad comparando cómo había conducido hoy.
Llegamos a mi casa y agradecí haber agarrado la llave porque el auto de mis abuelos no estaba, seguramente se habían ido a comprar o algo por el estilo.
Bueno tenía que despedirme de Alex, como lo haría con un simple "gracias la pase muy bien" o "me divertí espero repetirlo" definitivamente la segunda opción no.
—El viernes voy a ir al autocine con mi hermanita, ¿quieres acompañarnos?—pregunto sacándome de mis pensamientos idiotas.
—Lo pensaré, de hecho nunca fui al autocine—admití con una sonrisa, por primera vez parecía una conversación sincera, sin sus típicas sonrisas arrogantes o frases egocéntricas y debía admitir que se sentía bien, habían sido unas pocas palabras y se sentía muy bien.
Él se subió a la moto, estaba por arrancar pero me miró nuevamente y dijo lo siguiente:
—No te ilusiones no te besare delante de mi hermanita—y ahí estaba el Alex que conocía, reí porque a decir verdad me había causado gracia.
El no lo sabía pero estaba jugando con fuego y yo ya tenía quemaduras que me hacían más fuerte.
¿Que les pareció este capituló? ¿Que creen que ocurrirá próximamente? Espero que les haya gustado, gracias por absolutamente todo!! Me hacen muy feliz!! Espero que les haya gustado y si es así no olviden dejar sus votos y comentarios, así se que esperan el próximo capituló!!
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El inexplicable sentimiento de amar
Fiksi Remaja"Muchos dicen que amar es ver la perfección en una persona. Yo creo que no, amar es ver cada jodido defecto y verlo perfecto a su manera"