Él de pueblo y ella de ciudad

El convento

Sheila iba a ser la monja más joven del convento, la edad mínima para entrar en el convento eran dieciséis y ella los tenía.
Sheila no sabía bien el significado de monja.
Era católica pero, nunca querría estar en un sitio encerrada por siempre.
Orar seis veces al día, cuidar jardines, renunciar a toda tu vida. ¿Eso es vivir? Las monjas tienen su porqué, pero Sheila por mucho que las respetara, nunca jamás querría serlo.
¿Sería un pecado escaparse de allí?
Sheila se hacía esa pregunta la noche antes de irse.
Justamente en ese momento, se escuchaba a sus padres discutir.

PADRE
-¡Que no podemos MUJER!
MADRE
-¿Nunca has querido a nuestra hija?
PADRE
-¿Lo has hecho tú a caso?
MADRE
-Cuando empezó a decir esas tonterías de que quería ser policía... ¡Supe que no la habíamos educado bien!
PADRE
-¿Sabías que el único sitio cerca de aquí que opina como nosotros es este verdad?
MADRE
-¿Y si la niña lo cuenta aquí? ¿Y si nos arruina el plan?
PADRE
-Estará en el convento, tranquila.

Sheila se puso a llorar en silencio, al parecer, ella pensaba que sus padres la querían pero...

Al día siguiente, la madre la despertó. Lista para llevarla al cursillo.
El cursillo duraba 2 años más o menos, para ser una monja finalmente y una parte del dinero que ganó Sheila, debía de ir allí si o si. Pero el otro se lo quedaban sus padres para Dios sabe qué.

HORARIO DE UNA MONJA (allí)

-Se puede ir libremente por el convento hasta las 12:30 h.
-Rezar (30 minutos).
-Ir a comer a la 13:00 o 13:15, posteriormente fregar los platos, limpiar la mesa de comida, etcétera.
-Después de hacer todo eso, tienen tiempo libre para hacer la siesta, leer (religiosamente), o pasear. Sin hacer ruido para no molestar a las que hacen la siesta. Hasta las 15:00.
-Rezar una hora.
-Leer (religiosamente).
-A las 17:00 las monjas novatas se reúnen con su maestra (formación) y las monjas definitivas (procesas) trabajan y hacen tareas.
-Cenar a las 20:30 más recoger, limpiar...
-Tiempo libre otra vez hasta las 22:30.
-Luego de estar media hora rezando, las monjas comienzan a prepararse para dormir y descansar.
-Las actividades generales pueden ser ir al hospital, ayudar a los pobres...

En el pueblo también tenia un tipo de horario. Pero este tenía cosas nuevas.
La madre dejó a su hija allí y ni le dijo adiós.
Una mujer mayor la recibió:

Hola, soy la abadesa, la madre superior, te voy a enseñar durante dos años para ser una monja finalmente. Puedes llamarme maestra.

Maestra, maestra... No por favor.

SHEILA
-¿Usted se llama...?

Eh... Isabel...

SHEILA
-Prefiero llamarle Isabel.

La madre superior se quedó sorprendida.

ISABEL
-Muy bien pues pasa. Supongo que habrás visto el horario.
SHEILA
-Sí.
ISABEL
-Son las once y media de la mañana, nos veremos a las cinco de la tarde, y ahí aprenderás con tus otras hermanas.

Sheila tenía tiempo libre hasta las 12:30 h. Primero fue a ponerse la ropa que le dio Isabel y luego
se le ocurrió hablar con otras monjas, o sea hermanas. Todas las monjas del convento la miraban. Era muy joven.

Hola

Sheila se giró.

SHEILA
-Hola ¿cuál es tu nombre?
TERESA
-Hola hermana, soy Teresa.
SHEILA
-Yo Sheila, ¿que edad tienes?
TERESA
-Dieciocho. Eh, se dice que ha venido una nueva novata, yo lo soy. Eres la más joven.
SHEILA
-Ya...
TERESA
-Que bien que te quieras unir a Dios como nosotras.