Hacía un tiempo me había empezado a sentir angustiada. Eran tantas las razones que a veces prefería no recordarlas, solo centrarme en que debía conseguir escapar. La amargura me recorría las venas cada segundo y ya ni recordaba cómo se sentía cuando estaba tranquila, sin presiones, sin sensaciones y perturbaciones en la cabeza.
Mi madre fue una de las principales razones. Vivía con ella, mi tío (su hermano) y mis abuelos. Ella sufría de esquizofrenia desde antes de mi nacimiento, su vida fue bastante difícil y vivía encerrada en casa, así que mi abuela tenía que estar pendiente de ella todo el tiempo.
Mi tío era una persona muy fría, él me crió obligadamente, ya que mi madre no podía hacerlo. Su forma de crianza fue muy dura, pero eso era algo que no deseaba recordar en ningún momento.
Mi padre era otra razón, si no me equivoco, creo que se encontraba en Inglaterra según mi madre. Nunca lo había visto y mamá nunca me hablaba de él. Era un desconocido para mí y tampoco tenía intereses de conocerlo. La única imagen que mi cabeza me brindaba de alguien como él, era la de un criminal.
En ese momento estaba pasando por una especie de crisis existencial. No tenía idea de que mierda hacer con mi vida y ya no aguantaba estar viviendo con mi madre, día a día soportando peleas con ella y con mi tío. El único que me entendía en esa casa era mi abuelo, gracias a él aprendí a tener las cosas claras en mi vida.
De a poco fui pensando y decidí irme de casa, sin decir nada, sólo escapar. Lo llevaba pensando desde hacía tiempo y era lo que más deseaba en ese momento. Sabía que no era la forma para solucionar las cosas, pero no se me ocurrió otra, mi cabeza estaba agotada. Necesitaba un respiro, nueva gente, nuevos amigos, nuevo lugar, una nueva vida.
ESTÁS LEYENDO
When I Look Into Your Eyes [Axl Rose]
FanfictionSunset Boulevard, Los Ángeles, California, 1985. Todo inadaptado terminaba ahí en ese momento, incluyéndome. El destino me llevó ahí y me dió al fin, lo que en años no había tenido; paz. Pero nunca imaginé toparme con alguien como él, nunca pensé qu...